PORQUE LA VISIÓN ES CRECER

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4. PROFETA EXPLORADOR

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Busca en tu diccionario: (Estas palabras saldrán después en la lectura de este libro).

Unción:_____________________________________________________________________

Liberación: :__________________________________________________________________

Trascendencia:________________________________________________________________

Intercesión:__________________________________________________________________

Potestad:____________________________________________________________________

Carismas:____________________________________________________________________

Profeta:_____________________________________________________________________

Discernimiento:_______________________________________________________________

Trinidad:____________________________________________________________________

Magnificar:__________________________________________________________________

I. Aprendiendo a ser lleno del Espíritu Santo y el secreto de la unción.

Texto: Efesios 5:18

Ser lleno y bautizado en el Espíritu Santo (Hechos 1:5) es un mandamiento de la Palabra de Dios para todos los cristianos que ya han creído y han sido salvos. Cualquier cristiano que cree que puede vivir sin la llenura de esta gracia esta profundamente equivocado y está dando al enemigo una gran ventaja, ya que ser llenos del Espíritu Santo es la capacitación de poder (Lucas 24:49) de parte de Dios para que el cristiano venza todos los obstáculos y adversidades, tanto del mundo, del enemigo, como de nuestro yo.

Tu te harás la pregunta si has sido lleno del Espíritu Santo o si has sido bautizado en el Espíritu Santo, debes saber que cuando tu crees con fe salvadora ya tienes una manifestación del Espíritu Santo en ti (Juan 16:8) quien ha logrado convencerte de tus pecados y ha obrado en ti el nuevo nacimiento (Juan 1:12-13, 3:5-6), además de ser sellado (Efesios 1:13, 4:30) con el Espíritu Santo de la promesa en el momento que creíste. El espíritu Santo y su plenitud no lo recibe el mundo, sino los hijos de Dios (Juan 14:16-17). Los apóstoles tenían el Espíritu Santo antes del Pentecostés, pero era como en el Antiguo Testamento, no se había manifestado aún todo su poder y ministerio a los creyentes (Juan 20:22). En el Evangelio según San Juan este discípulo dedica tres capítulos (Juan Cap. 14,15,16) para hablar lo que Jesús dijo acerca de la venida del Espíritu Santo como un nuevo ministerio a la Iglesia y al mundo, en donde Dios Espíritu Santo habitaría en los santos permanentemente. Este hecho es el Bautismo del Espíritu Santo. El bautismo del Espíritu Santo es una gracia de Dios que actúa sobre la fe salvadora de los creyentes, a veces puede pasar un tiempo o puede ser inmediatamente a haber creído. No sólo una manifestación en ti, sino la llenura y presencia constante de El en ti (Hechos 2:1-13). Este bautismo se manifiesta con hablar en lenguas (Hechos 2:4, 10:44-46, 19:1-6), grande gozo y alegría que a veces se manifiesta en llanto o algazara, y el glorificar y magnificar a Dios Padre y a su Hijo Jesucristo (Juan 16:14), y los dones y fruto que empiezan a actuar como capacitación para el servicio cristiano, fruto que hace claramente evidente al verdadero cristiano (Gálatas 5:22-23). Así que siempre debemos andar en el Espíritu (Gálatas 5:16) en obediencia y guiados por el Espíritu de Dios (Romanos 8: 1-16).

Tu tienes que buscar el bautismo del Espíritu Santo, a continuación te damos las formas de recibirlo.

A, Aprendiendo a ser llenos del Espíritu Santo.

a. Debemos pedirlo en oración: Salmo 51:1-11; Hechos 1:14, 2:1, 4:31; Lucas 11: 13.

El Espíritu Santo lo recibimos cuando creemos con fe salvadora, recibimos su sello (Efesios 1:13-14), pero la llenura del Espíritu Santo es fruto de la gracia de Dios a aquellos que obedecen y empiezan a caminar por la senda de la consagración y la búsqueda personal de Dios. A Dios le agradan los que le buscan en fe, aunque todo es por gracia y misericordia de Dios, siempre Dios nos enseña la importancia de poner nosotros una mínima parte, la fe, para recibir su bendición. La flojera en la oración nunca traerá bendición, sino cristianos tibios que vivirán sus vidas a medias. El pedir y buscar ser llenos de Espíritu Santo marcará la diferencia entre un cristiano y otro. Porque uno será lleno del Espíritu Santo y de poder y el otro vivirá en debilidad, tal como Pedro cuando negó a su Señor, pero una vez lleno del Espíritu Santo se transformó en un líder poderoso.

b. Debemos obedecer a Dios. Hechos 5:32; Juan 14:15-17; Efesios 5:18.

La obediencia permite que el Espíritu Santo nos sea ministrado por Dios. Alguien desobediente ha contristado al Espíritu Santo, o está en vías de hacerlo, debido a que el Espíritu Santo es muy sensible, no débil, sino sensible, El anuncia su llegada, pero nunca cuando se va, por eso es de sumo cuidado aprender a vivir con y para el Espíritu Santo, obedeciendo y siendo sensibles a su voz. Debemos tener cuidado de empezar nuestra vida en el Espíritu y terminar en la carne o en el yo (Gálatas 3:3). Vivir en el Espíritu es vivir en la gracia, o don inmerecido, en donde debemos aprender a conocer cada día a un Dios de amor.

c. Debemos ser llenos por la Palabra. Juan 6:63.

La Palabra de Dios en nosotros produce fe, produce que nuestro intelecto y espíritu se llenen del conocimiento de la verdad de Dios, produce que haya un cambio de mente, para así comenzar a pensar como Cristo nuestro Señor. La Palabra es espíritu y vida, es una proclamación profética a nuestra alma, hace que nuestra vida se ordene y empiece a dar los pasos de la obediencia.

d. Debemos arrepentirnos y bautizarnos. Hechos 2:38

Lo que el Señor ha mandado se debe obedecer, hoy las personas tienen la tendencia a pensar que los mandamientos del Señor son optativos