TEOLOGIA Y EDUCACIÓN

...

necesarios para actuar en un contexto social determinado por un marco de valores y de participación cívico-política.

1. La experiencia de relación Dios –Ser humano, permite que se encuentre en sí misma la realización de la persona como ser integral y transcendental dentro de un contexto real, de allí la relación inmanente de la teología vs. Educación el ser humano busca realizarse en todos los pilares de aprendizajes que ésta propone. Es necesario que le apostemos a una formación integral, basada en valores humanos, pero a la vez cristianos que nos permitan ver una sociedad distinta a la que propone el siglo XXI, es de vital importancia que nos dejemos invadir de la experiencia de Dios en el acto educativo, sólo desde allí podrá transcender nuestra labor como docentes en el momento de acompañar a tantos jóvenes y niños que se ven envueltos por una sociedad netamente materializada y tan alejada de la experiencia de Dios.

2. Para que haya un diálogo entre teología vs. Educación es necesario que se tenga como centro un discurso antropológico, en donde se mantenga una visión crítica e interrogativa de la crisis actual que enfrenta el ser humano y la interdisciplinariedad. La persona debe ser el centro de todo el proceso educativo, basada en un pensamiento crítico y formativo frente a la realidad GLOBALIZADA en que nos encontramos sumergidos. No hay experiencia de Dios, sin experiencia de cultura, de sociedad, de religión y viceversa no podremos tener una verdadera experiencia de cultura, de sociedad, de religión sino no nos dejamos interpelar por la experiencia que Dios.

3. Teología vs. Educación es igual a INTEGRALIDAD. La experiencia de la educación debe estar basada en principios cristianos, sólo desde allí podemos ser personas convencidas de lo que hemos venido a realizar aquí en la tierra.

4. Educación vs. Teología es igual a EDUCABILIDAD HUMANA y esto es igual a PENSAMIENTO CRÍTICO para construir IDENTIDAD. Es necesario que le trabajemos a nuestros jóvenes, niños y niñas dentro y fuera del aula la capacidad de criticidad, el no comer entero, para que puedan ser personas que saben responder coherentemente a los retos que la misma sociedad presenta en el día. Me identifico con mi cultura, con mi sociedad con mi familia, con mi territorio siempre y cuando se tenga sentido de pertenencia y pensamiento crítico frente a la construcción de la misma.

APLICACIÓN O CONCLUSIONES

Si se le apuesta a la práctica de los saberes de la educación desde un PENSAMIENTO CRITICO, ciertamente que conseguiremos que nuestros niños y niñas se comprometan en la construcción de su propia IDENTIDAD, basada en principios éticos y cristianos tan necesarios en este contexto del siglo XXI. La educación está en nuestras manos y de nosotros depende el seguir rutinizándola o el darle el valor que ésta merece. La educación puede destruir como puede construir, el gran reto de los docentes en ejercicio es fomentar procesos desde la escuela y desde la relación con Dios, ésta educación ayudará a no ser VACIOS, sino a crear e innovar en esta sociedad tan necesita de gente que le apueste a la construcción y no que se deje denominar por el mundo materialista que la envuelve.

Por eso, la necesidad que surge en mí en éste momento es la de continuar en mi formación profesional y estar pendiente de la coherencia que debe existir entre la teoría y la práctica educativa, atendiendo a las necesidades de las nuevas generaciones desde su contexto histórico social y cultural y apostarle a la formación integral de tantos nuños y niñas, jóvenes que están ávidos de Dios.