INTERVENCIÓN DEL ESTADO EN INNOVACIÓN Y EDUCACIÓN.

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Para poder concretar la idea de asumir el rol del Estado dentro del desarrollo y la innovación es necesario primero que nada crear una buena y de calidad Gestión Educativa que promueva la realización de proyectos tanto a nivel escolar como universitario para que los niños y jóvenes se familiaricen con nuevos términos, formas y habilidades, que puedan propulsar al país a nuevas fronteras en cuanto a la tecnología y calidad. Es aquí donde también aparece la gestión de los docentes, quienes son los primeros en aportar al fomento de la explotación y realización de las nuevas ideas que un niño o joven pueda traer y de esta manera guiarlos al mundo del desarrollo sostenido.

“La idea de educación que se desarrolla a lo largo de toda la vida es un proceso continuo que acompaña y atraviesa la vida de las personas en sociedad, que se desarrolla en distintos ámbitos y relaciones sociales, más allá de las instituciones escolares y académicas, específica mente dedicadas a la enseñanza”[3]. Es aquí donde se funda la idea y se argumenta el hecho de que la intervención del Estado en la Educación es el primer pie para lograr transformaciones y nuevas ideas, ya que como señala la anterior cita, la educación es el primer paso para desarrollar otras habilidades, que se pueden llevar fuera de las instituciones e instaurarlas en la economía y política de manera que aporten no solo a la sociedad, sino que también al Estado y a la búsqueda del desarrollo y de una buena calidad de vida para todos los individuos dentro de la nación. Es por esto que se debe comenzar a fomentar la investigación tanto dentro de las escuelas y universidades (privadas y estatales) como en las empresas, ya que estas forman también gran parte del Estado y tienen más medios para poder hacer efectivas las ideas que un sujeto pueda proponer, para así poder utilizar dichas ideas nuevas a favor del progreso de la Educación, del Estado y la calidad del país en todos los aspectos.

Junto a ello, es indispensable -también- el fomentar dentro del aula, la cooperación entre los estudiantes, para así ir destrabando los cerrojos heredados de la Dictadura Cívico-Militar, en lo que respecta a la idea dominante de la “competitividad” basada en el individualismo.

Dicha cooperación es necesario -además- fomentarla en cada una de las instancias que tengamos a nuestro alcance, para así involucrar a los diversos agentes participes de la comunidad educativa en el desarrollo de una nueva mentalidad transformadora.

Propuestas claras y concretas, que apuntan en dicha dirección y que nos sirven como orientación, como las de Stephen Covey (a modo de ejemplo), deben ser parte importante, y decidora inclusive, de nuestro futuro ejercicio docente. Los conceptos de “Victoria Privada” y “Victoria Publica”, vinculados a Iniciativa; Visión Compartida; Aprendizaje en Equipo; y Pensamiento Sistémico (Covey, 1992), bien pueden ser de ese tipo de propuestas orientadoras, que necesariamente debiesen ser las ideas directrices dentro de los procesos educativos, y de la gestión educativa en sus diferentes niveles y alcances.

Cuanto mayor y significativo sea el estímulo y el refuerzo positivo en nuestros estudiantes, con un enfoque altamente efectivo, mayores han de ser, cualitativa y cuantitativamente, las posibilidades de generar pequeñas fisuras en el sistema, las cuales el día de mañana bien pueden transformarse en verdaderas grietas.

Cuando planteamos esto -pensando en los contenidos y aprendizajes del ramo de Gestión Educativa, y en el futuro próximo- lo hacemos meditando no solo en nuestros futuros estudiantes; sino también, y como lo mencionáramos anteriormente, en padres y apoderados; colegas y autoridades; trabajadores; y en todo el espectro que conforma una comunidad educativa. Es ella la base, precisamente, de todo el sistema educativo, y es ahí en donde hemos de roer los cimientos de uno de los pilares fundamentales de la superestructura de este sistema de dominación.

Si queremos que el Estado asuma un rol diferente al que viene desempeñando desde la Dictadura Cívico-Militar; uno mucho más preponderante, debemos necesariamente abocarnos a la tarea de transformar nuestro entorno más inmediato: a mejorarlo en todos los sentidos y a dotarlo de cuantos elementos poseamos y/o estén a nuestro alcance. En ello va el que comencemos a fortalecer lo “Público”, desde sus instancias más elementales.

Conclusión

Para poder concluir el presente trabajo es necesario poner énfasis en la importancia y la responsabilidad que tenemos nosotros como futuros docentes con respecto al tema, ya que es con nuestro trabajo que tenemos la instancia de generar debates y entregar información a toda el área educativa que nos rodea, tanto a padres, apoderados y alumnos, en temas de derechos que poseemos como ciudadanos y las responsabilidades que posee el estado con nosotros y nuestro bien estar, y así lograr poco a poco un país más informado y capaz de reclamar y luchar por aquellas cosas que nos son justas.

También es importante recalcar el rol del Estado frente a los temas sobre la educación y los impulsos de nuevos proyectos para fomentar la investigación para la innovación y el desarrollo, siendo estas las herramientas principales para que Chile sea un país reconocido a nivel mundial por su buena gestión en los aspectos anteriormente señalados.

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