Kayak en el baker junto a mi hermano.

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El segundo día fue muy interesante, pues al comenzar a remar nos acercábamos a lo que parecía ser el primer rápido que correríamos, pero término siendo solo un par de olas ruidosas. Ese día término siendo prácticamente igual que el primero solo con un poco de molesto viento extra y el imponente “rápido González” en donde volví a sentir miedo, ya que jamás había corrido un rápido tan grande pero lo pase sin mayor dificultad. Al finalizar llegamos a hermoso “Paso San Carlos” en donde acampamos.

Día nº3

Este día demoramos en salir, porque algunos de nuestros compañeros se quedaron dormidos y le desarmamos su carpa estando ellos adentro. La salida fue divertida ya que al comenzar debíamos esquivar “el saltón”, en ese momento me di cuenta lo insignificante que somos en comparación con la naturaleza y me reí de los demás que no podían salir de los gigantes remolinos, en la tarde después de almuerzo nos enfrentamos al “rápido Borquez” el cual era más fuerte que el del día anterior y en el cual la ayuda de una balsa inflable fue de mucha ayuda ya que nos sentíamos más seguros en caso de caernos del kayak, afortunadamente no sucedió. Al finalizar el día acampamos en el campo de don Lalo Sandoval quien nos esperaba con un asado al horno solo para nosotros dos. Con mi hermano dormimos dentro de un galpón junto al fuego, mientras que los demás dormían en sus carpas afuera en la lluvia.

Día nº4

Este día fue para descansar y ver los asombrosos paisajes que nos ofrecían el rio y los glaciares que se encuentran en la zona, sin mencionar las gigantescas montañas de ciprés, al atardecer llegamos donde un hombre de unos 40 años a quien no conocíamos, nos dio permiso para acampar junto al grupo y luego de conversar unas horas con él, resulto ser un pariente lejano de parte de madre.

Día nº5

Luego de unos mates, mi hermano quien desde entonces ya fuma le pidió unos cigarros para el camino y partimos lo que sería nuestro último día. Al llegar a tortel, almorzamos y partimos hacia Cochrane.

Para mi este viaje me sirvió para confiar en mí mismo y unirme más con mi hermano, sin duda será un viaje inolvidable.