Colonia de Acapulco

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A través de la historia más reciente de nuestro ya independiente país la ciudad y puerto de Acapulco no ha perdido popularidad, al contrario ha ganado más por su importante desarrollo como puerto comercial y turístico a nivel no sólo continental, sino mundial. Esto sin mencionar la gran relevancia que tomó durante la guerra de Independencia de México por su trascendencia bélica en las batallas del sur del país, los ejércitos del fuerte de San Diego lidereados por personajes como José Maria Morelos y Pavón y Vicente Guerrero. De igual forma, en los intentos de invasión al país en los siglos más cercanos temporalmente hablando, Acapulco se ha distinguido por ser un puerto muy importante en la defensa de la nación.

En el ámbito social del país es obvia la importancia que esta ciudad ha tenido en el desarrollo histórico del país, recordemos que por este puerto entraron varias de las razas que después se combinaron para formar la raza mexicana actual, además por aquí ha entrado y salido mucho comercio y turismo lo cual ha propiciado un gran intercambio cultural con el mundo así como también se ha defendido al país y todo a través de Acapulco.

Pero el objeto de estudio del presente tratado no es Acapulco en si, sino la comunidad en la cual se encuentra ubicada la Escuela Primaria “Rotaria 20 de Noviembre”, es decir, la colonia denominada “20 de Noviembre”. Como ya se dijo al principio, para entender el presente de algo hay que conocer su pasado, por eso se estudiarán primero bases históricas de la comunidad. En el siglo XX el aumento de la población en la ciudad de Acapulco fue impresionante, principalmente por navegantes que se establecían en ella e inmigrantes de los municipios e incluso de los estados colindantes que venían a probar suerte y a buscar una mejor vida, por eso fácilmente la población se duplicó en la primera mitad del siglo y aún más en la segunda mitad que será la que se estudie.

A principios del siglo obviamente la ciudad era muy diferente de como es hoy, cien años antes no estaba tan poblada y por lo mismo su territorio abarcaba menos de la mitad de lo que abarca hoy, el núcleo poblacional se estableció a la orilla de la bahía y en la parte baja del anfiteatro sin expandirse más allá de lo que hoy se conoce como “La garita” o “Mozimba”, sólo con pequeños asentamientos humanos fuera de los límites descritos en lugares como “El coloso”, “Puerto Márquez”, “Icacos”, “La roqueta” (isla que fue ocupada como prisión, refugio para pacientes con lepra y últimamente zoológico) ,“La fábrica”, “El zócalo”, ya que como se debe suponer el principal centro de atracción era la bahía.

Claro que por ser un puerto tan importante estaba en comunicación constante con la capital del país y viajeros desde allá venían durante todo el año a la ciudad con distintos fines y como ahora la puerta de entrada es por lo que hoy se conoce como “Los órganos” “La vacacional” o “Renacimiento” y, al llegar por ahí forzosamente tenían que pasar por la ubicación de la comunidad que es el tema de estudio, pero como se comprende los automóviles no eran tan comunes en esos tiempos, eran más típicos los caballos o las caminatas a pie y, si se considera la distancia que hay por ejemplo entre “La vacacional” y la bahía, en realidad es muy grande, así que a lo largo de este recorrido se comenzaron a establecer puntos de refugio que los viajeros utilizaban como posadas para comer o bañarse, pero sólo como eso, como puntos de referencia o apoyo para pasar por ahí no para quedarse en ellos.

Pero a partir de la segunda mitad del siglo XX, como ya se dijo, la población creció de forma impresionante de tal modo que regiones más alejadas de la playa comenzaron a presentar asentamientos humanos tal es el caso de lo que ahora es el centro de la ciudad y la parte hacia dentro enfrente de la bahía surgiendo así colonias que actualmente conocemos como “La Progreso” entre otras.

En los primeros años de la década de los sesentas se comenzó a difundir por las colonias ya existentes y por el centro de la ciudad el rumor de que los ejidos de la parte más alta del camino de salida de la ciudad se iban a poner a la venta. Por lo anterior en esa parte comenzaron a asentarse grupos de personas para “apartar” su terreno, antes de que siquiera se hiciera el anuncio oficial de la venta de éstos. Para 1962 existían en el lugar casitas improvisadas de cualquier material (hule, cartón, asbesto, entre otros) ya se vislumbraba el surgimiento de una futura colonia.

En 1962, siendo presidente de la república el Lic. Adolfo Ruiz Cortines, gobernador del Estado de Guerrero el licenciado Arturo Martínez Adame y presidente municipal de Acapulco el Lic. José Joseph Piedra después de una serie de problemas y desacuerdos con los dueños y la agencia de bienes raíces “Fraccionamiento las Dalias” que fue la primera que se encargó de las negociaciones pero falló al no poder disminuir el precio de los terrenos a menos de 9.30 centavos el metro cuadrado., que los representantes de la nueva colonia, lidereados por los señores Jesús Pardo Jaramillo, y otros así como también asesorados por la compañía de bienes raíces “Pineda – Montenegro” comenzaron a reunirse en mesas de diálogo con los dueños del terreno y consiguieron la venta de los terrenos en ese año por el precio de 6.50 centavos el metro cuadrado y por fin en el mes de noviembre de ese año se hace la inauguración oficial, de ahí el porqué del nombre de la colonia según sus habitantes por la fecha en que les fueron entregados los terrenos y no en honor de la Revolución Mexicana como se pudiera pensar fácilmente.

Las primeras viviendas que se establecieron se relata que eran tipo jacales, chozas o casas de madera con lámina de cartón o hueso de palapa, sólo alguna que otra de adobe, cosas que dadas las características geográficas del lugar resultaba muy peligroso, claro que con el paso del tiempo esto ha ido evolucionando.

La colonia “20 de noviembre” se encuentra ubicada en la parte más alta de la ciudad, cerca del punto conocido como “La cima” (nombre que se le dio por ser lo más alto). La constitución geográfica de la colonia presenta muchas variantes puesto que comienza en una parte baja y se extiende para arriba del cerro, es un área grande que comienza en el punto conocido como ”La llave de agua” (por ser la primera toma del servicio en la colonia proporcionada por el presidente Alfredo López) y se extiende hasta la parte más alta del mismo casi llegando a donde se encuentran ubicadas las antenas de transmisión de radio y televisión. Por lo tanto la descripción de la orografía del lugar se puede decir que