EL MOVIMIENTO HIPPIE: orígenes y consecuencias de su desarrollo.

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La cultura hippie se movilizo y se unifico reuniendo a todos los consumidores de acido y las grandes estrellas de esta cultura joven en un mega evento y así mostrar al mundo las ideas sobre una nueva sociedad, la cual veían como utópica y de aquí nació el “human Bean” al cual acudieron más de 30.000 personas, artistas e intelectuales del movimiento y personas rebeldes de generaciones anteriores que se oponían al movimiento controlador y totalitario del sistema.

El gran fabricante de LSD Timothy learney creó su propia iglesia donde se rendía culto al acido, como el elemento capaz de unir lo terrenal con lo místico y espiritual, con lo natural. Así comenzó a separarse del movimiento que había ayudado a crear.

Los hell angels, de ideología racista, volátil y de clara extrema derecha atacaban las actividades hippies por la paz. Pero estos dos grupos tenían cosas en común pese a sus muchas diferencias, ambos odiaban a la autoridad y amaban las drogas. Pronto se convirtieron en la fuerza de seguridad del movimiento hippie y participaron de la contracultura naciente.

El human bean tuvo una gran repercusión en todos los medios de comunicación, televisiones, radios, periódicos centrando el foco de atención en esta revolución. Quedo claro que algo estaba pasando, pero los medios se centraban mas en las extravagancias, las apariencias, la parte interna y el porqué de este movimiento no interesaban.

Las líneas generacionales con este suceso se resquebrajaron. Había un miedo paternal a que sus hijos siguiesen ese camino de locura, drogas sexo y alucinaciones. Esto a su vez provoco que los jóvenes lo viesen desde el lado opuesto y se sintieron atraídos por todo eso que se les impedía o se les prohibía.

El human bean tuvo gran éxito en su misión, habían logrado capturar la imaginación de toda una poderosa generación incansable. El movimiento hippie ya era una realidad evidente e innegable.

En la primavera de 1967 el movimiento estaba en pleno florecimiento y comenzaría también toda esa simbología floral tan presente en la década de los 60. Se aferraban a los símbolos del human bean para expresar su desaprobación contra la sociedad de Estados unidos. El sentimiento que había era de que no estaban satisfechos con el mundo que sus padres habían construido por ello debían buscar nuevas formas de vivir, crear una alternativa y los hippies definirían lo que era esa alternativa.

Partimos de que esta generación joven había heredado una de las mayores bonanzas económicas en su crecimiento, por lo que realmente no era una situación extrema en este ámbito como para que odiasen tanto la herencia, tenían una situación de vida relativamente cómoda respecto a muchos otros lugares del mundo, pero había una situación de conflicto armado que si que podía hacernos entender con mayor facilidad que no quisiesen esta situación. Tras la victoria de los aliados en la II guerra mundial los estados unidos con un total del 6% de la población mundial producía la mitad de los bienes del mundo. Bajo esta resplandeciente superficie económica también había problemas, el principal fue que este expansionismo económico fue dirigido por un pensamiento dinámico y militar que muchos de los combatientes habían traído de vuelta al país a su regreso. Con un general de 5 estrellas en la casa blanca, el sacrificio y la obediencia como slogan, la tierra de la libertad se convirtió en el hogar de la burocracia y de un fuerte sentimiento de disciplina y rígida conformidad.

La frustración nunca desaparece y junto con la expansión del movimiento afloraron diferentes formas de enfocar esta cultura, desde california hasta Siatel y las grandes escenas psicodélicas expresadas por los medios de comunicación atraían a más gente interesada en la búsqueda de una alternativa que les permitiese vivir y realizarse siendo felices.

En nueva york el movimiento alcanzo un punto de vista más artístico e intelectual y el consumo de drogas se endureció, se cambio el LSD por heroína metandrina o speed. En Los Ángeles los hippies se aglomeraban en los clubes de moda, situados en Sunset bullevard, justo al lado de Hollywood y las estrellas de cine. En Londres también hubo un gran sentimiento de contracultura y de aprobación del LSD. Tuvieron su particular fabricante similar a Timothy leanley.

Sin embargo San francisco seguía siendo la cuna del movimiento y su lugar más representativo. Cientos de turistas llegaban constantemente y la ciudad estaba plagada de simpatizantes y jóvenes descuidados, muchas veces bajo los efectos de las drogas, lo que creaba un ambiente interesante para los turistas y personas comunes que trataban a los hippies como salvajes. Se les acercaban para hacerles fotografías por sus inusuales vestimentas, peinados y aspectos.

El 5 de abril de 1967 una gran compañía de autobuses creó un recorrido turístico “hippie hob” al estilo safari psicodélico por las calles de Philadelphia. El mayor interés de los turistas se centraba en el distrito de haigth ashgbury. Poco a poco los residentes de este distrito comenzaron a molestarse de que se les tratase como animales y comenzaron a parar los autobuses, lanzarles piedras o enseñarles el trasero. Otros trataron de aprovecharse de la situación y pedían dinero para dejarles circular por sus calles haciendo fotos. La policía no tardaría en entrar para tratar de controlar el ambiente extraño que se había formado.

Todos los jóvenes de la contracultura comenzaron a agruparse en San francisco. Llegaban de hogares destruidos, o huyendo de sus problemas, jóvenes que no tenían nada, ni donde ir ni un centavo para comer. Estos llegaban sin un método de ganarse la vida y tal acumulación de miles de personas supuso que se agotasen rápidamente los puestos de trabajo y recursos suficientes para todos ellos. Así comenzó a crecer el número de gente que vivía en la calle y consumían drogas peligrosas para la mente. Durante esta época las mujeres jóvenes eran particularmente vulnerables.

El verano del amor:

La marea de jóvenes que llegaba diariamente a San francisco siguió creciendo hasta alcanzar más de 100.000 y la floreciente sociedad se vio aplastada por tal cantidad de jóvenes, sin tener a donde ir. La mayor necesidad existente en las calles fue la atención sanitaria. Había mucha mercancía ilegal en las calles, drogas peligrosas y duras en grandes cantidades y con un gran mercado que se aprovechaba de estos jóvenes sin esperanzas. También comenzaron a propagarse enfermedades por el uso incontrolado de jeringuillas y de transmisión sexual.

En relación al consumo de la población, los traficantes