LA UNIDAD ACADEMICA DE INGENIERIA CIVIL, ARQUITECTURA Y DISEÑO
Enviado por monto2435 • 19 de Octubre de 2017 • 1.838 Palabras (8 Páginas) • 570 Visitas
...
Al modelo BIM para que los arquitectos lo tengan en cuenta. Podríamos decir que el Modelo de Información hace de coordinador entre los diversos profesionales que intervienen en la creación de los edificios, ya sea alojando directamente sus objetos u ofreciendo vías de comunicación controladas. Tampoco no hay que olvidar a los usuarios finales del edificio, los cuales se beneficiarán de poder disponer de información fiable acerca del inmueble que explotarán.
-
BIM PARAMÉTRICO
El Modelo de Información que gestiona una aplicación BIM está compuesto por una serie de objetos que se diseñan según las características esenciales que los definen, es decir, se parametrizan. Esto se hace mediante una interface que los conceptualiza y que asiste su creación con multitud de parámetros preestablecidos en relación a la naturaleza del elemento que se quiere crear.
Un muro, por ejemplo, puede escribirse por los siguientes valores: número de capas, grueso de cada una, altura, materiales, recorrido, etc... Después, necesitaremos de una interface gráfica que permita editarlo dinámicamente mediante pinzamientos o variando sus características en un listado desplegable.
En cualquiera de los casos, estamos modificando los parámetros que definen el objeto y de rebote su aspecto aparente. Pero también se puede ir más allá incluyendo otra clase de parámetros no dimensionales, como por ejemplo, el color, el material y peso, el nombre, etc.
El objeto que se modela acontece, así, mucho más completo y editable permitiendo acceder directamente a sus características. Así, ya no se modelan representaciones, sino que se modela el objeto en sí mismo cubriendo el máximo de facetas. En cambio, con una herramienta de CAD literal, se invierte mucho tiempo representándolo mediante múltiples modelos con el fin de poderlo controlar mentalmente en su globalidad.
También, se debe tener en cuenta que, debido a que la parametrización de objetos puede ser algo complicado, todas las aplicaciones disponen de extensas librerías de componentes pre-configurados que tienen comportamientos también preestablecidos. No se trata pues de aplicaciones de diseño paramétrico puras, mucho más potentes pero también mucho más complejas de emplear. Esto no quiere decir que se limite al usuario al uso de estos objetos, puesto que en cualquier momento se puede crear uno, paramétrico o literal, para resolver casos concretos.
La edición de un modelo global se hace a través de toda clase de visualizaciones especializadas, ya sea diédricas, tridimensionales, en forma de listado, o cualquier otra clase de vista que sirva para controlar los objetos desde una óptica concreta. Como que todas ellas provienen directamente del Modelo de Información, estarán siempre actualizadas.
Para que esto sea posible, el software debe gestionar las vistas por sí mismo, dejando en manos del usuario únicamente la configuración más o menos pormenorizada de estas. Aunque la mayoría de aplicaciones BIM generan, en la mayoría de los casos representaciones del Modelo de Información, conceptualmente se deben entender todas como vistas, ya que son generadas de manera automática.
Debido a que el entorno de trabajo de los modelos de información esta necesariamente, muy controlado, sólo se puede crear aquello que se sabe cómo funciona, por lo que puede resultar algo frustrante para los principiantes. Por ello, todas las aplicaciones BIM dejan un espacio para la representación literal con el fin de cubrir determinadas situaciones en que no se pueda generar un objeto adecuado, pero su uso debe ser necesariamente restringido si se quiere ser fiel a la tecnología BIM.
-
BIM MULTIVISTA
Una de las aportaciones más importantes de los Modelos de Información es que las representaciones de sus diferentes aspectos pueden automatizarse. Todas provienen del mismo modelo, así que se consigue, de forma natural, que estén siempre coordinadas entre sí (que no se contradigan) y actualizadas (representando los últimos cambios hechos al proyecto) y que su generación sea inmediata o casi inmediata.
Por eso decimos que las representaciones extraídas del BIM son en realidad vistas del modelo, aunque en algunos casos se lleguen a generar cada vez como dibujos bidimensionales. Por otra parte, para poder satisfacer las necesidades de visualización de cada representación, cada aplicación dispone de diferentes mecanismos de personalización de estas, de tal manera que pueda mostrarse o que se desea y con un grafismo adecuado.
No obstante, el abanico de posibilidades siempre será más limitado que el de las representaciones delineadas a mano, por lo que habrá que aprender a prescindir de ciertos virtuosismos, que por otra parte, dejaran de ser necesarios al contar con el potencial de generación múltiple de vistas de este tipo de software.
Podríamos decir que, en este caso, podemos substituir la calidad por la cantidad, ya que resulta mucho más conveniente el uso de múltiples vistas pera explicar un tema que el de unas pocas y muy trabajada, ya que estas, inevitablemente, deberán omitir parte de la información del proyecto. De todas formas, también es cierto que una vez adecuado el grafismo de las visualizaciones a nuestro gusto, veremos como cualquier vista gozará del mismo nivel de acabado, ya que realizarla o no ya no dependerá del tiempo disponible hasta el día de la entrega.
Otro aspecto esencial es entender que la posibilidades de una vista no se limita al campo de las representaciones gráficas (dibujos) que tradicionalmente ha sido el soporte básico del arquitecto, sino que también cubre otro tipo de representaciones de tipo alfanumérico, como tablas (para mediciones o inventarios, por ejemplo), esquemas, leyendas, etc.. Para una aplicación BIM, todo está al mismo nivel, ya que los objetos no solo contienen información formal sino también de cualquier otro tipo. Por ejemplo, una estructura suele ser más fácil de replantear en forma de esquema de barras, mientras que al que debe presupuestarla, le interesará sólo la cantidad, tipo y peso de los perfiles.
El arquitecto, en cambio, deberá trabajar con una representación formal fidedigna de la misma, para poder compatibilizarla con el resto de sistemas arquitectónicos. Por último, lo que vimos en los objetos paramétricos en cuanto a su compatibilidad con elementos literales puede aplicarse a las prestaciones de representación de las aplicaciones BIM. Cualquiera de ellas, puede incorporar a las vistas dibujos manuales que las
...