Analisis de la evolucion

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El proceso de evolución por selección natural implica entonces que las especies se originan a partir de un ancestro común, que la selección natural opera sobre unidades auto-reproductivas, y que debe existir un mecanismo de generación de la variabilidad. Este mecanismo de generación de la variabilidad, representaba una gran preocupación para Darwin, y continúa siendo, en alguna medida, una preocupación para los investigadores en evolución en nuestros días.

Para Darwin, que había propuesto la idea de la selección natural para explicar el proceso evolutivo, la idea de la herencia dura era inicialmente más atractiva. Es decir, la idea de que hay caracteres que no son modificables, que se van a heredar de generación en generación, y sobre los cuales va a operar la selección natural.

En cuanto a la relación entre la selección natural y los mecanismos de adaptación, se puede decir que los mecanismos de adaptación dependen en cierto grado de la selección natural, ya que esta va modelar los cambios que un individuo efectué ya sea por efectos climáticos o efectos en la competencia y el modo de alimentación, de este modo cada cambio va a ir representando una ventaja o una desventaja para cada individuo dependiendo del medio donde se encuentre, al verse favorecido por dicho cambio, según las hipótesis de selección natural planteadas, dicho cambio se va a transmitir de generación en generación con el fin de irse perfeccionando hasta lograr obtener el mayor éxito reproductivo posible y de esta manera perpetuar la especie en cuanto a población y a nivel individual perpetuar el linaje. La selección natural va a favorecer por ende el mecanismo de adaptación ya que al existir diferencias entre los individuos, producidas por los cambios genéticos que se expresan morfológicamente, haciendo que los individuos mejor adaptados al medio que habitan van a lograr tener un mayor éxito que aquellos menos aptos, es decir que los cambios obtenidos no sean los favorables para colonizar ese medio. En palabras generales, la selección natural es un mecanismo de adaptación ya que los cambios favorables en dichos individuos son los que hacen efectivo el proceso de adaptación y estos cambios se ven modelados por dicha selección.

Para que ocurra el proceso evolutivo debe haber selección natural o deriva genética. Para que la selección opere, deben cumplirse tres requisitos: herencia, variación y fitness o adaptabilidad diferencial. La selección puede adquirir varias formas, ya sea selección por mortalidad, por fecundidad, por fertilidad o selección sexual; si existen estas condiciones, puede ocurrir la evolución concebida como los cambios acumulativos en las características de una población a través de varias generaciones.

La capacidad para anticipar fluctuaciones del entorno está relacionada con la plasticidad fenotípica.

Los forcejeos del organismo para dar cuenta de los desafíos ambientales originan una tendencia a incrementar el contenido de información mutua entre Fenotipo y Entorno, y cuando esta información se incorpora en el registro genético, se incrementan los contenidos de información mutua entre Genotipo y Fenotipo, y entre Genotipo y Entorno. Los Fenotipos individuales se ajustan al Entorno, y en caso de ser seleccionados y fijados genéticamente se detectan a

posteriori incrementos de información mutua entre Genotipo/Fenotipo y Genotipo/Entorno. La relación Fenotipo/Entorno está mediada por el comportamiento de los Agentes en Evolución y Desarrollo, y corresponde a una interacción funcional, permanente y siempre en curso que genera ajustes estructurales (codificaciones analógicas).

La evolución y el desarrollo describen trayectorias de transformación desde estados primitivos de baja exclusividad fenotípica a estados más estables y específicos por medio de la interiorización de información ambiental.

Los Agentes en Evolución y Desarrollo forcejean para incorporar información del Entorno incrementando así la exclusividad del Fenotipo. El desarrollo y la evolución no dependen exclusivamente de la adaptación a un Entorno estable, sino de la independencia a condiciones cambiantes, manteniendo la habilidad para elegir. Durante la ontogenia los aumentos de información se detectan como modificaciones de las rutas epigenéticas en particular por la adición terminal de pasos. En la filogenia, los incrementos de información se reflejan en aumentos de la plasticidad fenotípica.

La conversión de información ambiental en genética, es un fenómeno que en parte se resuelve con el modelo de la asimilación genética de Waddington. La información genética se hereda de acuerdo a las leyes de Mendel, mientras que otras clases de información se pueden transmitir por medio de los Sistemas de Herencia Epigenética (SHE). La contribución evolutiva de los SHE depende de su incorporación al registro genético. La información puede incorporarse al registro genético solamente si su versión análoga correspondiente se ha producido y estabilizado por la acción del estímulo externo. Es decir que los registros analógicos, aunque reversibles e inestables, favorecen la fijación de mutantes que producen o refuerzan la característica que los organismos manifiestan en presencia del estímulo externo. Una vez incorporada, el organismo manifiesta la característica aun si el estímulo externo se ha retirado. El Agente en Evolucion y Desarollo es la interfase donde Genotipo y Entorno se interpretan instantáneamente, puesto que la interacción con el Entorno provoca ajustes fisiológicos, conductuales y en los SHE que regulan la expresión genética, a la vez que crean a largo plazo las condiciones para la eventual asimilación de nuevas variantes génicas.