EL ENSAYO SOBRE SALUD OCUPACIONAL.

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Para continuar en este hilo de ideas cabe anotar que muchas de las personas que son objeto de este tipo abusos son sujetos de escasa educación y de estratos muy bajos, que por desconocer las normas y sus derechos no son capaces de hacer un reclamo justo para que se mejoren sus condiciones de trabajo, antes bien se abstienen de hacer algún tipo de comentario en contra de sus jefes o la empresa por el temor a ser despedidos y así de esta manera quedarse sin el único sustento que tienen, a sabiendas que afuera habrá muchos esperando realizar su mismo trabajo por el mismo sueldo e incluso por mucho menos que eso.

A pesar de que en nuestro medio se predica por parte de los organismos de control del estado la garantía de los Derechos Humanos en nuestro país, la justicia como se dice en el argot popular “solo es para lo mas pendejos”, puesto que aquellos de altos estratos o que gozan de una buena posición económica influyente hacen caso omiso de los deberes que la ley les exige como patronos, cometiendo todo tipo de abusos y maltratos con sus trabajadores, que por necesidad muchas veces no denuncian este tipo de conductas inapropiadas y degradantes que ponen en riesgo la salud y el bienestar del personal que se desempeña como obrero o trabajador.

Debido a esto el trabajador común o asalariado se ve afectado en su salud física por distintos tipos de enfermedades que se originan de una prolongada actividad sin usar la protección debida como cascos protectores, guantes, tapabocas, protectores auditivos, gafas, entre lo más conocidos, esto solo por hacer alusión a elementos de uso personal, aunque hay otro tipo de enfermedades que se contraen por trabajar en ambientes no aptos, en lo que el trabajador se ve sometido a condiciones extremas que afectan su salud y que a largo paso traen como consecuencia el detrimento o la limitación de su capacidad física.

Por consiguiente de esto se desprende que nuestra clase obrera llegue a padecer un sinnúmero de enfermedades laborales originadas por el no acatamiento de las normas de Salud Ocupacional vigentes de parte de los empleadores, que se hacen los de la vista gorda y que después pretenden remediar los males y ayes de los afectados con despreciables indemnizaciones que jamás podrán devolver la salud y el normal desempeño de sus funciones físicas y mentales, en una sociedad como la nuestra en la que se es mucho más difícil vivir cuando se discrimina a cualquiera por ser diferente o verse distinto.

En relación a esto se puede traer a colación el caso de la ciudad de Medellín en donde a causa del desplome del edificio SPACE² en un sector exclusivo, murieron hasta el momento sin confirmar, 10 personas, la mayoría de ellas simples obreros que fueron víctimas de esta tragedia, a simple vista porque la empresa o constructora que lideraba este proyecto omitió o no tuvo en cuenta las normas esenciales de seguridad industrial contempladas por Salud Ocupacional para la realización de esta obra y en consecuencia este acto irresponsable enluta el hogar de muchas familias por causa de este siniestro.

Aunque bien es cierto que toda actividad trae consigo riesgos o peligros propios que se originan como consecuencia de dicha labor, algunas profesiones como la nuestra se ven afectadas como todas por factores físicos y sicológicos en donde este último viene a jugar una parte importante para el correcto desarrollo de nuestra actividad como policías, esto en gran parte a la presión diaria que se maneja al entrar en contacto con la ciudadanía permanentemente, al atender los casos de policía en donde se recibe muchas veces maltrato y rechazo como consecuencia de la autoridad que nos asiste; siendo conciliadores en ocasiones y parte represiva para aquellas conductas que lo requieren.

Aparte de esto hay que tener en cuenta que como personas o ciudadanos también debemos cargar con el peso de nuestras obligaciones diarias tanto en el plano familiar como institucional, lo que supone que el hombre policía es sometido a una estresante labor que puede afectar su parte emocional y sicológica, que puede llevarlo si no recibe asistencia profesional a peligrosos niveles de suma depresión y baja auto estima, que puede acarrearle un desequilibrio emocional y mental de no ser tratado a tiempo y de forma adecuada a su patología especifica, como corresponde y en la medida necesaria, no solo por llenar una planilla y dar cumplimiento al nivel central a un área de Salud ocupacional.

En consecuencia por no prestar la debida atención a este tipo de patologías por parte del área de Salud ocupacional de nuestra institución muchos compañeros caen en vicios como el alcoholismo y la drogadicción que vienen a empeorar su estado anímico o emocional, y esto trae como consecuencia que el policial vea afectado su núcleo familiar y como consecuencia también su desempeño profesional, en donde sus jefes inmediatos al tomar las medidas correctivas y disciplinarias necesarias vienen a complicar mucho mas el estado mental de la persona, al acarrearle sanciones y muchas veces traslados a unidades a las que comúnmente llamamos “rotos” por su complejidad y condiciones difíciles de orden público.

En algunas ocasiones esta serie de situaciones al agravarse provoca que la conducta del policía empeore y se convierta en un problema mayor para sus comandantes directos, quienes muchas veces desconocen el origen y la patología que presenta el policial y terminan por así decirlo “embalando” mas al subalterno y convirtiéndolo en un policía problema en la unidad donde labore, lo que conlleva finalmente muchas veces a que el policía sea destituido y en casos extremos en donde sumido por la depresión atenta contra su vida y muchas veces contra la de sus familiares y compañeros, de los que ya comúnmente se conocen por los medios de comunicaciones y es noticia de primera plana.

Mas pese a todo lo dicho no puede negarse que en muchas unidades se brinda atención y se le da un trato justo a este tipo de problemas por parte de Salud ocupacional, dándosele la ayuda necesaria por parte de sicólogos y personal idóneo que tiene experiencia manejando este tipo de problemas que presenta el policía como consecuencia de nuestra profesión y diario actuar, en una sociedad compleja que se ve afectada por la desigualdad social, el desempleo y la injusticia.

CONCLUSION

Hablar de salud Ocupacional es tema de suma importancia que es necesario socializar mucho mas por parte del estado, para que la clase obrera o trabajadora sea consciente de los derechos que tiene como trabajador y sepa a que instancias debe acudir en caso de que se presenten irregularidades que se opongan a las normas de seguridad personal e industrial