Hikikomori y similitud en México.

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Además, el aislamiento social femenino es difícil de detectar dentro de la sociedad japonesa, esto arroja más incógnitas acerca de las estimaciones estadísticas del fenómeno.

“En Japón es más frecuente encontrar Hikikomori en familias con pequeñas desventajas socioeconómicas. Estos resultados ampliaron nuestro conocimiento sobre los mecanismos únicos del desarrollo de Hikikomori. Nuestros resultados mostraron que el nivel de educación superior de los padres se asoció significativamente con un mayor riesgo de Hikikomori; la asociación de padres de nivel educativo siguió siendo significativa incluso después de ajustar en los encuestados antecedentes de trastornos mentales. Una posible explicación de esta asociación es que los padres con estudios superiores tienen mejores ingresos y pueden darse el lujo de tener a sus hijos sin trabajo en casa.”[3]

Todavía no hay un resultado definitivo acerca de este fenómeno social a falta de hallazgos empíricos, este estudio trata de encontrar los factores determinantes en la aparición de este trastorno mental. Se relacionaron pues los factores económicos, sociales e incluso los antecedentes de trastornos mentales registrados en la familia. Ya que la psicopatología de los padres puede ser determinante en los jóvenes que padecen esta enfermedad.

Similitud con México.

“En general para América Latina la década de los ochenta es identificada como la “década perdida” o de “crecimiento nulo” ...[4]

Hay que mencionar, que respecto a México se tiene una percepción similar en Japón. Ya que ser considerado un NINI automáticamente se es estigmatizado y por lo tanto hay un desprecio generalizado. A su vez alimentado por los medios de comunicación. Las condiciones materiales en México han coadyuvado al surgimiento de este fenómeno en el país.

Mientras en México el incremento de los ninis se debe netamente a factores económicos, en Japón es cosa contraria. Ya que los altos requerimientos académicos y la excesiva competitividad pesan en los jóvenes japoneses.

Termino pues, con una postura negativa hacia el Estado mexicano ya que sigue moviendo su maquinaria política dentro de un Estado paternalista. Esto desencadena una problemática social ya que, no se le da prioridad a otros sectores mucho más importantes, como lo son: Sector salud, económico y educativo.

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