Historia de la filosofía de la economía solidaria

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Los montepíos: Los objetivos iniciales de "los gremios" se desviaron hacia la defensa de intereses propiamente comerciales y lucrativos. Por ello, en los países de origen latino se constituyeron nuevas formas de organización de sentido religioso. Primero fueron las "cofradías" y luego los "montepíos" –entendidos como mecanismos para el ejercicio de acciones piadosas-. Estos últimos se crearon en Italia y se difundieron en España y Portugal, expandiéndose a diversos sectores de la población, incluidos los miembros de las cortes. Los montepíos se constituían mediante la entrega de aportes individuales, representados en dinero, con el propósito de socorrer a los huérfanos y a las viudas o de colaborar con sus miembros en los casos de enfermedad, invalidez o muerte. Como ocurrió con las "guildas", en algunos lugares los montepíos tendieron hacia las actividades comerciales y originaron las empresas de seguros; en otros, unidos a los movimientos de respuesta popular en contra de los flagelos del desarrollo capitalista, se establecieron entre los sectores más deprimidos de la sociedad...

Las comunas religiosas: Durante los primeros siglos de formación del modo de producción capitalista se presentaron propuestas para allegar una sociedad humana ideal. No fue indispensable la teoría cooperativista moderna para intentar hacer realidad este sueño. En esos tiempos se habían emprendido los procesos de colonización en América y éste fue el destino de numerosos grupos religiosos exiliados de Inglaterra, Alemania o los Países Bajos, los que formaron comunas por todo el territorio norteamericano, combinando las ideas utopistas con su pensamiento religioso. Muchas de las comunas perduraron e imprimieron a la sociedad norteamericana un estilo de vida diferente; en ellas se unían las posesiones y se vivía comunalmente.

Las sociedades de socorro mutuo: En la medida en que se desviaban los objetivos iniciales de las sociedades fraternales tipo "guilda" o de los mismos "montepíos", se iba haciendo necesaria a los sectores sociales más deprimidos la búsqueda de mecanismos de organización para la solidaridad y la resistencia a las nuevas circunstancias económico-sociales provenientes de los efectos de la Revolución Industrial. Historia y Filosofía de la Economía Solidaria 41 Una de las respuestas fue su reencuentro con la antigua tradición solidaria, presente en la memoria colectiva de los pueblos europeos: surgieron las "sociedades de socorro mutuo" con el objetivo de otorgar alguna protección a sus miembros, aunque sin enfrentar las causas de su desesperante situación. Estas organizaciones prosperaron principalmente entre los artesanos que ejecutaban oficios no muy afectados por la industrialización. Comienzan con "Las uniones de compañeros" que contrarrestan las prácticas selectivas de los maestros artesanos, adelantando un papel defensivo de protección de sus miembros y a sus familias, asegurándoles mínimas condiciones de bienestar social de acuerdo con los ritos de la tradición cristiana.

Las organizaciones sindicales Como producto de la Revolución Industrial surgió el obrero industrial asalariado. Los trabajadores de las grandes fábricas de hilados y de otras industrias se vieron obligados a adelantar diferentes formas de respuesta al aumento de la explotación del trabajo y al deterioro de sus condiciones de vida. A instancias de las teorías políticas surgidas de la Revolución Francesa y de los utopistas modernos, se originó el movimiento obrero y una de sus instituciones básicas: el sindicato. Las mutualidades, cooperativas y sindicatos son fenómenos surgidos de la lucha de resistencia de los trabajadores durante el período de desarrollo de la industrialización. Pero cada una de ellas se forjó por caminos propios, y constituyeron vertientes diferentes del movimiento obrero europeo de las primeras décadas del siglo XIX. El movimiento obrero-sindical estableció formas de organización sobre la base de unos principios clásicos que le han dado coherencia y permanencia. Algunos de estos principios presentan alguna similitud con el cuerpo doctrinario cooperativo, debido a que su base teórica se encuentra en los escritos y acciones de Robert Owen, Charles Fourier y Luis Blanc.

5 ¿Quiénes fueron los utopistas y cuales sus principales ideas?

- Utopía, de Tomás Moro: Thomas Moro nació en Londres en el año de 1478, estudió leyes e incursionó en la literatura y en poco tiempo inició una carrera diplomática; en 1529, durante el reinado de Enrique VIII, es nombrado Lord Canciller de Gran Bretaña; sus contradicciones con el régimen monárquico lo conllevan a la muerte por decapitación en 1535. Entre los años 1515 y 1516, siendo agregado diplomático en la embajada de Flandes, escribe y publica su principal obra: "Utopía". Moro describe allí una sociedad cimentada en las virtudes de la prudencia (la sabiduría), el valor (la fortaleza de espíritu), la sensatez y la justicia; valores muy distantes de la Inglaterra que le tocó vivir. Descubrió las desigualdades imperantes en su país y quiso proponer una forma de justicia, basada en el ideal religioso y en los principios platónicos.

- Nova Atlantis, de Francis Bacon: Francis Bacon (Barón de Verulam), considerado como uno de los fundadores del método empírico de la investigación en ciencias puras, nació en Inglaterra en 1561 y murió en el año 1626. Su "Nueva Atlántida" se publicó un año después de su muerte. En 1620 había escrito su principal obra ("Novum Organum") en la que sienta la tesis de que "el saber es poder", en cuanto que las investigaciones científicas deben servir para develar los secretos de la naturaleza y poder dominarla. En la "Nova Atlantis" describe una sociedad utópica basada en el desarrollo científico y gobernada por científicos, sin extenderse en las problemáticas de tipo social. Propone un modelo de orden social, de tipo tecnológico, en donde el pueblo no cuenta, pero se inspira en el punto de vista de que "el fin de nuestro establecimiento es el conocimiento de las causas y movimientos ocultos de las cosas; y extender los límites del imperio humano para efectuar todas las cosas posibles".

- La Cittá del Sole, de Tomasso Campannela Campannela, monje dominico italiano que vivió entre los años 1568 y 1639, escribió su "Ciudad del Sol" en 1623; allí describe un país imaginario con una organización socioeconómica colectivizada, basada en la selección de la especie humana a través de un estricto control sobre la procreación. Sufrió las vejaciones y persecuciones de la era inquisitorial. Concibió su obra maestra y escribió