Hollywood Cut: La CIA y los entretenimientos televisivos.

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La influencia directa de la CIA, según el documental, es clara. Un ejemplo de ellos es HOMELAND, serie que analizan en el documental para mostrar esa influencia.

Se trata de una serie que muestra la guerra contra el terrorismo, una serie de drama/thriller desarrollada para la televisión estadounidense por Howard Gordon y Alex Gansa basada en la serie israelí Hatufim (traducción al español: Secuestrados) creada por Gideon Raff. La serie estadounidense está protagonizada por Claire Danes como Carrie Mathison, una agente de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) que ha llegado a creer que un marine estadounidense, que fue hecho prisionero de guerra de Al-Qaeda, se convirtió en el enemigo y ahora representa un riesgo significativo para la seguridad nacional.

Según testimonios del documental la imagen que proyecta la CIA es una imagen no real pues, según este joven, la CIA mata a niños y a civiles sin miramiento. Ellos intentan vender una imagen neutral y culpan a los malos de fuera en vez de a su política. Esos malos, muchas veces musulmanes descritos, como en Homeland, como terroristas. Se retrata a los musulmanes con religión y violencia y así hacen un espejo del islam. Además, podemos hablar de que en base a la representación heroica de los americanos se produce el concepto de otredad, ellos no son nosotros. Los americanos son los héroes que luchas por su patria y sus valores mientras que, por ejemplo, los musulmanes, son los malos, los terroristas que matan violentamente. Cuando aquí nadie se salva.

En buena parte de la cultura popular de Estados Unidos el enemigo es a menudo una caricatura de los estereotipos étnicos asociados a supuestos enemigos del país. Siempre los matan los supuestos héroes estadounidenses.

La colaboración de la CIA con la industria del cine se da para promover ideologías estadounidenses en el exterior y llevar a cabo operaciones encubiertas. La influencia en las decisiones de los demás, la manipulación consciente e inteligente de las costumbres y opiniones de las masas es un elemento importante de la sociedad democrática. Quienes manipulan esto constituyen un gobierno oculto que rige el país americano.

Muchas de las grandes producciones muestran una falsa realidad. El objetivo principal es ensalzar al héroe americano. Utilizan el cine para empatizar con el telespectador y el ciudadano, se trata de una propaganda para ganarse el cariño de las personas.

Revisando la historia del cine desde sus orígenes nos damos cuenta que la propaganda ha hecho del cine un eficiente vehículo para ser comunicada al público, esto es no solo gracias a la riqueza artística que conmueve al público, ni por el entretenimiento que le ofrece sino también por todos los detalles y características que le implican: Estando en una sala, con las luces apagadas y frente a una pantalla más grande que uno mismo donde se aprecian imágenes enormes cuyo poder de penetración es único y que ningún medio posee; el espectáculo es aún más apasionante. Es entonces; por medio de este poderoso instrumento, el cine, cuando la propaganda puede convertirse en arte.

La Historia, la mentalidad de una sociedad, una ideología o un cambio político aparecen claramente reflejados en el cine del momento. El cine puede ser una excelente fuente histórica, una fuente primaria, cuando es un reflejo de las circunstancias que está viviendo una sociedad en un momento determinado, y una fuente secundaria cuando dramatiza o reflexiona sobre hechos que se produjeron en un pasado más o menos lejano. Pero también sirve como un claro ejemplo de propaganda política, un medio de manipulación capaz de llegar a un público muy extenso y de cambiar ideas y opiniones de aquellos que lo ven.