Proyecto de diseño de ambiente de aprendizaje para estudiantes de la licenciatura en derecho
Enviado por karlo • 27 de Septiembre de 2017 • 5.829 Palabras (24 Páginas) • 714 Visitas
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Cosa diferente me sucedió en la secundaria, en clase de matemáticas, aplicaba la teoría constructivista, claro de manera inconsciente, pues en ese momento ignoraba esta forma de aprendizaje, cuando al desarrollar alguna ecuación algebraica empleaba mis conocimientos anteriores, como la suma, la resta y otros, para obtener el resultado, obteniendo con ello nueva información.
Es de mencionar que aunque siendo la protagonista de mi educación, mis profesores han jugado un papel importantísimo en mi historia, pues ellos de una u otra forma –como emisores- conductistas o constructivistas, me han ayudado en mi formación educacional, ya que basándose en sus experiencias trazaron las directrices cognoscitivas adecuadas según ellos, que yo debería seguir para alcanzar los objetivos perseguidos, aunque no siempre fueron satisfactorios, dada la forma inadecuada de valerse de los paradigmas; por lo que considero es de suma trascendencia que ahora en mi papel de facilitadora cuente no solo con los conocimientos de lo que les deseo transmitir a mis alumnos, sino también que sepa la manera adecuada de allegarlos a la completa comprensión del tema impartido, a través del uso de las herramientas cognoscitivas, y una conducta apropiada, trazándoles las directrices que los conduzcan a sus metas particulares, en otras palabras, que logren alcanzar el nivel de desarrollo próximo.
Ahora bien, la teoría de Piaget, me dice que los niños pasan a través de cuatro etapas específicas conforme su intelecto y capacidad para percibir las relaciones maduran (Jean Piaget 1896-1980), Estas etapas se desarrollan en un orden fijo en todos los niños, sin exclusión alguna, pudiendo variar ligeramente entre un niño y otro, etapas que a continuación razonaré:
En la primera etapa sensorio motora, cuyo periodo abarca del nacimiento a los dos años de edad. Aprendí a manipular torpemente objetos, aunque no pude entender la permanencia de estos objetos si no están dentro del alcance de mis sentidos. Es decir, una vez que un objeto desaparecía de mi vista, no pude entender que todavía existe ese objeto (o persona), por lo que me resulta interesante el juego al que mi mamá jugaba conmigo, escondiendo su cara tras un objeto, como un cojín, y luego volver a “aparecer”. Este juego además, me enseñó la permanencia del objeto, siendo la capacidad de entender que estos objetos continúan existiendo aunque no pueda verlos es uno de mis éxitos en esta etapa. Así como también la capacidad para entender que cuando mi madre salía de la habitación, ella regresaría, generando en mí una sensación de seguridad. Y ya casi finalizando este periodo la habilidad para mantener una imagen mental del objeto o persona sin percibirlo apareció.
Etapa preoperacional, de los 2 a los 7 años. Comienza cuando comprendí la permanencia de objeto. Durante esta etapa, aprendí cómo interactuar con su ambiente de una manera más compleja mediante el uso de palabras y de imágenes mentales. Esta etapa está marcada por el egocentrismo, o la creencia de que todas las personas ven el mundo de la misma manera que yo. También creen que los objetos inanimados tienen mis mismas percepciones, pudiendo ver, sentir, escuchar, etc. Un segundo factor importante en esta etapa es la conservación, que no es otra cosa que la capacidad para entender que la cantidad no cambia cuando la forma cambia. Es decir, si el agua contenida en un vaso corto y ancho se vierte en un vaso alto y fino, en esta etapa creía que el vaso más alto contiene más agua debido solamente a su altura. Esto es debido a mi incapacidad de entender la reversibilidad y debido a que se centran en sólo un aspecto del estímulo.
Ya en la etapa de las operaciones concretas que tiene lugar entre los siete y doce años aproximadamente y está marcada por una disminución gradual del pensamiento egocéntrico y por la capacidad creciente de centrarse en más de un aspecto de un estímulo. Pude entender el concepto de agrupar, sabiendo que un perro pequeño y un perro grande siguen siendo ambos perros, o que los diversos tipos de monedas y los billetes forman parte del concepto más amplio de dinero. En ese tiempo solo podía aplicar esta nueva comprensión a los objetos concretos (aquellos que haya experimentado con mis sentidos). Los objetos imaginados o los que no he visto, oído, o tocado, continuaban siendo místicos para mí; toda vez que mi pensamiento abstracto aún tenía que desarrollarse.
En la etapa final operaciones formales del desarrollo cognitivo que abarca desde los doce años en adelante, comencé a desarrollar una visión más abstracta del mundo y a utilizar la lógica formal. En este punto abordé la aplicación de la reversibilidad y la conservación a las situaciones tanto reales como imaginadas. También desarrollé una mayor comprensión del mundo y de la idea de causa y efecto, empezando a formular hipótesis y ponerlas a prueba para encontrar la solución a un problema, y a razonar en contra de los hechos. Es decir, si me daban una información y me pedían que la utilizara como la base de una discusión, ya era apta de realizar tala tarea.
Al referirme a la Teoría Constructivista de Piaget, puedo decir que entiendo que su idea principal es que en mi aprendizaje, los nuevos conocimientos lo construya a partir de la base de enseñanzas anteriores, concibo que activamente construyo mi conocimiento, basado en lo que conozco previamente y lo relaciono con el conocimiento nuevo de aquellos con quienes interactúo, y me quedó claro que este paradigma debe promover el pensamiento crítico, constructivo y creador durante el proceso de enseñanza-aprendizaje.
Al estudiar estos enfoques, observé que los he venido usando en cierto grado, desde el principio de mi aprendizaje. Es decir, que los estadios de desarrollo cognitivo van desde mi infancia a la adolescencia, evidenciando como las estructuras psicológicas se desarrollan a partir de mis reflejos innatos; iniciando en mi infancia en esquemas de conductas, como modelos de pensamiento en mi adolescencia; para desplegarse complejas estructuras intelectuales que caracterizan mi vida adulta.
También percibí que esta teoría del aprendizaje sostiene que los aspectos cognitivos, sociales y afectivos del comportamiento, no es un mero producto del ambiente ni un simple resultado de mis disposiciones internas, sino una construcción propia que se va produciendo día a día como resultado de la interacción de dos factores: Experiencias del presente y esquemas mentales propios, históricamente desarrollados a partir de las experiencias pasadas. Por tanto, deduje que según esta teoría las relaciones sociales en las que me involucre, me dejaron experiencias y que aunadas a todas y cada una de las etapas de mi vida
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