Medicina veterinaria: Un nuevo enfoque

Medicina veterinaria: un nuevo enfoque

Leidy Alejandra Giraldo Martínez

La medicina veterinaria ha evolucionado a través del tiempo, tal como otras ciencias, hacia un campo específico y especializado. Aunque se enmarca dentro de las ciencias de salud, en muchas ocasiones fue menospreciada e incluso se le dio una connotación despectiva. Actualmente, debido a diversos problemas ambientales que amenazan la supervivencia del ser humano en la tierra, se ha desarrollado una visión holística que busca bridar nuevas soluciones: la medicina de la conservación. El término fue acuñado por Kock en 1996 para referirse a la “integración de la salud humana, la animal y la de los ecosistemas” (Arrivillaga & Caraballo, 2009, pág. 56), es decir, tiene un enfoque transdisciplinario. A pesar de que es una ciencia muy reciente, ha cobrado gran importancia a nivel mundial, por esta razón es oportuno preguntarse ¿cuál es el papel del médico veterinario en la medicina de la conservación?

Ante todo, la veterinaria se originó a partir del estudio de los animales domésticos, sin embargo, en los últimos años se ha incrementado considerablemente la investigación sobre especies silvestres. Beldomenico (2006) considera que los aspectos sanitarios de la fauna son “intereses trascendentales para la humanidad” (pág. 7), y resume dichos intereses en salud pública, conservación de especies, producción animal y salud de ecosistemas. La interpretación de este autor encaja perfectamente con los conceptos de otros autores sobre la medicina de la conservación: “el principio central de esta disciplina es que la salud conecta a todas las especies, porque está inextricablemente ligada a los procesos ecológicos que gobiernan la vida en el planeta” (Aguirre & Gómez, 2009, pág. 598).

Saggese (2007) indica que para un correcto estudio de cualquier patología, es necesario el conocimiento no sólo de profesionales en medicina veterinaria y humana, bioquímica, biología molecular y genética; sino que también involucra a las ciencias sociales, políticas y económicas, con las cuales se busca respaldar el uso sustentable de los recursos naturales. La medicina de la conservación, como acertadamente lo expresan Aguirre y Gómez (2009), “proporciona puentes entre las disciplinas separadas por la tradición o por la falta de un lenguaje común” (pág. 598).

Hoy en día, el médico veterinario es considerado una ficha clave en el progreso de la salud, acorde con la medicina de la conservación, ya que “coordina e integra un gran número de disciplinas imprescindibles para el estudio de enfermedad en fauna” (Beldomenico, 2006, pág. 14). De igual forma, es el encargado de garantizar el bienestar de los animales que son objeto de estudio, analizar su comportamiento, realizar necropsias, investigar y diagnosticar causas de mortalidad (Saggese, 2007). Desde esta perspectiva se despliegan infinidad de campos en los cuales se pueden desempeñar los médicos veterinarios.