Ensayo capitalismo historia de amor

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Uno como consumidor tiene varias exigencias en el momento de compartir una comida o buscar un sabor en particular. Muchas cadenas de cafés o restaurantes le apuestan a estos negocios por lo mismo que diariamente como seres humanos tenemos la necesidad y la rutina de comer, es un negocio que nunca dejará de existir, tomándose en cuenta las largas jornadas de algunos empleos y las horas del día en donde en familia se comparte en la mesa.

Sin embargo, hasta la OMS convoca a la gente a pensar mejor en lo que ingiere diariamente y lo que muchos padres de familia permiten que sus hijos coman. Retomando lo del cultivo de varios alimentos, no todos se hacen en óptimas condiciones; muchas son tratadas con químicos y otras alteradas por sustancias no aptas para el cuerpo humano generando enfermedades silenciosas donde poco a poco se pueden ver sus alteraciones donde nos perjudica diariamente ya que no se logra a tiempo su tratamiento y es algo preocupante en estos tiempos.

Por otro lado, existe un sistema industrial no valorizado en los gobiernos. Cada día muchos agricultores, ganaderos y granjeros sufren con sus mínimas ganancias en los productos que cosechan y recogen; potencializar una cosa y dejar a un lado otra no tiene sentido. Se supone que un sistema agrario se constituye por la gente que labora en el campo y permite que se nutra el país con lo que se recoge, pero al no haber inversión en este ámbito, muchos han tenido que vender sus tierras a grandes corporaciones o cerrarlas, dedicándose a otras labores que no estaban acostumbradas.

Hay que tomar consciencia y ver qué está pasando con nuestro modo de vida, que tan cierto es lo que nos venden y con qué objetivos se hace. Una sociedad que se piense dos veces las cosas antes de consumirlas, motiva a que líderes empleen mejor sus recursos y que produzcamos un producto de calidad y que no perjudique ni a niños, ni a jóvenes ni adultos.

Con la salud no se juega, pero tampoco se juega con la comida. Instruyámonos a cerca de estos procesos y mejoremos nuestra sociedad actual, garanticemos lo natural y cuidemos para que esto se logre, porque un campo tóxico no beneficia a nadie.

- NO A LA VENTA “UNA LABOR NO ‘MARCA”

No es mentira que vivimos en un mundo tan globalizado y lleno de nuevas estrategias en donde el único objetivo es vender, pero, ¿a qué precio debemos pagar un producto con una persona esclavizada matándose por crearlo?

En Colombia han llegado grandes multinacionales extranjeras brindando a la población productos de calidad internacional, ofrecidos a la canasta familiar o abriendo convocatorias de empleo a jóvenes con características específicas que puedan hacer parte de estas corporaciones. La gran mayoría de ellas, convocan jóvenes entre los 18 y 25 años, algunos se rigen en la experiencia a otros no les importa, con un nivel de estudio básico, pago a salud y pensión y con horarios de 8 horas diarias, pero muchas se exceden de esta cantidad.

En este texto no se pretende evidenciar que características o factores son óptimas en la vinculación de un personal a una empresa multinacional, aquí se muestra es una reflexión sobre lo que en la actualidad como país y mundo vivimos en este siglo a través de las empresas y estados que comandan el mercado.

LA VIOLACIÓN A LOS DERECHOS HUMANOS

A lo largo de la historia, varias generaciones han luchado por el respeto a los derechos humanos que en varias oportunidades no han sido respetadas, tomamos el ejemplo al derecho a la igualdad de género, el derecho a la vida, el derecho a la libertad de expresión, etc.

Los gobiernos son principalmente los líderes que no han garantizado una lealtad por parte de ellos hacia su sociedad en lo que respectivamente un derecho humano hace énfasis; tomando esto lo anterior, lo primero que uno espera en una empresa es que suceda todo lo contrario, pero no. Estados y multinacionales de nombres destacados trabajan de la mano, siendo una conexión infalible en un contexto económico de vital importancia para una nación que exporta y tiene que rendir cuentas al banco mundial y a otras organizaciones para que su nivel de equilibrio monetario sea beneficioso para un gobierno sano.

Sin embargo, al no garantizarse un derecho dentro de un ambiente laboral, pues se comete una injusticia por parte de una empresa, lo que significa que su principal objetivo aparte de incrementar ventas es explotar la mano de obra lo más injusto posible y no debe ser así.

Si una empresa garantiza un espacio ameno, con beneficios para sus empleados, el trabajo siempre va a responderse de manera positiva y su capacidad de trabajo incrementará notablemente, cosa, que en el campo financiero toda empresa busca.

UNA EMPRESA ES JUSTA, NO CORRUPTA

Existe en promedio familias con cinco o más integrantes dentro de ella, muchas son lideradas por jóvenes menores de 25 actualmente y sin un estudio que les permita ascender de puesto y obtener mejores ingresos. Situaciones como ésta, hace crear empresas que convoquen gente que se esclavice por un sueldo y no les permita ni siquiera pensar. La corrupción es sinónimo de corromper, pervertir o sobornar; para ninguna de las anteriores se tiene un concepto bueno, lo que quiere decir que una empresa que no me inspire en fortalecer mis competencias como empleado o llegar a opinar respecto a otros campos ajenos a los míos, no es una empresa que sea confiable.

Una labor no ‘marca’, es lo que se debe apostar en una atmósfera actual. Debemos pensar desde casa si queremos ser siempre obreros y no llegar a buscar un mejor futuro, hay que tocar fondo quizá para saberlo, pero la idea es que no pasen ni diez ni veinte años para tomarlo en cuenta; ni como sociedad ni como país no lo merecemos.

Demostremos que buscamos algo mejor siempre, así empresas que sólo contratan para esclavizar se van a dar cuenta finalmente que las manos y la creatividad cuestan, que el levantarse y trasnochar en un sitio de trabajo, cuesta, que no almorzar y caminar dos horas para llegar a nuestros hogares cuesta, que querer un mejor futuro para mis hijos cuesta.