Estrategia "Tiro al blanco"

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amigos no se puede aprender” (p.23), se reconoce la importancia de tres tipos de aprendizaje, pero se enfoca más a los componentes intelectuales, afectivos y sociales.

Una vez formados en grupos se repartió un tablero por equipo y dos fichas, y se comentó que la actividad seria en una de las canchas. Al terminar de decir esto todos corrieron hacia el lugar indicado; una vez estando ahí, solo un equipo siguió las instrucciones, los demás solo corrían, al ver que no me hacían caso y no realizaban la actividad tome la decisión de regresar al salón. Atribuyo el descontrol a la falta de costumbre de trabajar afuera del aula ya que todas las actividades siempre se realizan adentro de esta.

A pesar de ese problema continuamos con la actividad en el aula. A pesar del espacio reducido la actividad se llevó acabo de manera favorable, ahora los equipos fueron por mesas. Ganaba el equipo que tuviera más sumas y estas fueran correctas. El saber que abría un equipo ganador motivo a los alumnos a realizar el mayor número de sumas posibles, además de trabajar y apoyarse.

De acuerdo con Brophy (1998) “se ha visto que las metas relacionadas con la obtención de recompensas externas, como lograr premios o evitar la pérdida de objetos y privilegios, actúan determinando el esfuerzo selectivo que el alumno imprime en su trabajo” (p.61), el saber que existe un reconocimiento provoca que los alumnos pongan más de su parte para lograr un resultado favorable.

Cada que un integrante del equipo tirara y tuvieran una suma los alumnos la copiaban en su cuaderno de trabajo y la realizaban, una vez resuelta comparaban sus resultados y si alguno estaba mal los mismos integrantes del equipo le mostraban donde estaba su error para que este lo corrigiera. Para realizar las sumas utilizaban diferentes técnicas, como usar sus deditos y hacer rayas en el cuaderno, además de utilizar fichas (véase anexo No 11).

Para Ausubel (1963), esta forma de aprender, “A través de la toma consciente de decisiones facilita el aprendizaje significativo” (p.193), pues promueve que los alumnos establezcan relaciones significativas entre lo que ya saben y la nueva información, decidiendo cuales son los procedimientos más adecuados para hacer la actividad. De este modo, el alumno no solo aprende como utilizar determinados procedimientos, sino cuándo y porque utilizarlos y en qué medida favorecen el proceso de resolución de la actividad.

Interrumpí la actividad para explicar cómo se harían las restas, que primero tirarían las fichas dos veces al número mayor era al que quitarían el siguiente número, la mayoría no entendió la diferencia dado que seguían sumando por ejemplo se pudo observar en un cuaderno operaciones como la siguiente: “2-7: 9” (C/Ao14/16/02/2016).

Como se observa aquí el alumno no distingue lo que representa cada símbolo (+ agregar, - quitar), para el en toda operación es agregar no importando el símbolo que tenga.

De manera grupal se hizo un recordatorio de cada operación con su símbolo y lo que cada una significa, aquellos que tenían un error solo corrigieron sus resultados apoyándose de fichas para facilitar la acción e quitar (véase anexo No 12); con lo expuesto se comprueba que los errores que tienen los alumnos son parte de su proceso de aprendizaje y estos pueden y deben aprovecharse para que los niños avancen en sus conocimientos, según Ausubel (1983) “la resolución significativa de problemas, en contraste con el aprendizaje de ensayo y error constituyen un aprendizaje por descubrimiento” (p.485), y fue precisamente que a partir de su error pudieron comprender lo que se les pedía en cada operación.

El trabajar primero con las sumas y que entendieran el procedimiento facilito en gran medida la comprensión de la realización de las restas.

Para concluir los alumnos compararon sus resultados por equipo y de manera grupal comentaron que fue lo que más le agrado de la actividad. La comparación de resultados fue en equipo y para esto utilizaron la autocorrección ya que todos tenían que tener los mismos resultados; los alumnos comparaban sus respuestas por si era necesario corregirlas; en este aspecto el resto de los compañeros hacían notar donde estaba el error del alumno.

No se pudo comentar que les pareció la actividad porque llego la hora de la salida pero por lo observado fue de su agrado y fácil de comprender, en todo momento estuvieron interesados a excepción del momento en el que salimos a las canchas.