LA GRAN ESCUELA SUPERIOR POLITECNICA DEL LITORAL

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Nuestra naturaleza humana es exigirse cada vez más a uno mismo del mismo modo que se exige a los demás, la naturaleza del consumidor de igual manera también es exigente y su objetivo como tal es consumir productos de calidad, tener una atención personalizada y que el servicio sea rápido y sin problemas. Una nueva era tanto para productor como para consumidor se acerca y con ella trae cambios positivos ya para las empresas no solo somos un número sino un objetivo que cumplir. Viendo más allá de las funciones que realiza una empresa se visualiza a una gran familia de visionarios con una gran conciencia de servicio, compromiso y sueños donde cada actividad realizada es un paso para llegar a ese objetivo que perdura e impulsa a cada miembro de esa familia llamada empresa y que por tal representan a una marca. Muchas empresas para mantenerse vigentes y en posicionamiento invierten en innovaciones para que sus productos lleguen a ser atractivos y novedosos para la sociedad. Un claro ejemplo es la industria tecnológica que avanza a pasos agigantados desarrollando nuevas aplicaciones y usos a sus productos pero tras ese manto de actualizaciones e innovaciones podremos encontrar un equipo profesional con objetivos claros de ayudar a facilitar la vida del consumidor.

En conclusión, varias son las personas que ven a la empresa como el ogro sin corazón que solo ve a sus clientes como un número más o una estadística más pero tras conocer la realidad de muchas de esas empresas de esas marcas que sueñan cumplir sus objetivos, metas y mantener su visión es fácil darse cuenta que hay personas luchadoras que se han esforzado por mantener ese sueño vigente no solo por beneficio de los más altos ejecutivos sino también para sus colaboradores que en muchas empresas son el pilar principal de su progreso porque no es fácil mantenerse en un mercado tan competitivo donde si no se resalta puede quedarse en el olvido, como consumidores siempre deseamos elegir lo mejor, sin embargo, al momento de pagar no faltan las quejas por el precio y culpamos al producto, hay que dejar de menospreciar el esfuerzo que hacen estas empresas para poder llevar los productos a una estantería o un local donde se puedan exhibir y estar al alcance de nosotros, dejar de culpar a las empresas por los costos que tiene cada producto ya que siempre existen otros factores que intervienen en ese costo que van desde la materia prima hasta el costo que asumen terciarios para que lleguen a estar al alcance de nuestras manos, en Ecuador existe una iniciativa “primero lo nuestro” que impulsa a consumir productos hechos en Ecuador, esta iniciativa es realizada para impulsar nuestros productos los cuales son rezagados por marcas globalizadoras, tengamos identidad propia y valoremos nuestros productos que a pesar de tener un costo algo elevado en comparación con marcas extranjeras son nuestras marcas y son sueños de gente luchadora de nuestro país.

Bibliografía

Xavier Oliver Conti, E. S. (2013). Marcas que sueñan. Barcelona(España): Libros de cabecera.

Schiffman- Kamuk, E.S (2005). Comportamiento del consumidor. Pearsons