CARRERA DE ADMINISTRACION DE EMPRESAS NEGOCIACIÓN Y MEDIACIÓN

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V. COMPETENCIAS / OBJETIVOS ESPECÍFICOS

Al terminar el curso el alumno habrá desarrollado competencia personales y profesionales en negociación y mediación, para afrontar un conflicto con asertividad, asumiendo un rol activo en su solución que es la manera más equilibrada y armónica de actuar; expresando sentimientos y emociones de manera adecuada, sin herir al otro y considerando sus planteamientos y emociones.

Desarrollando cualidades para dar y recibir una retroalimentación honesta y rechazar una petición no adecuada; equilibrando la tendencia a reprimir sus sentimientos o, por el contrario, dejarse llevar por la irritación y actuar con agresividad.

El estudiante estará en capacidad de lograr una orientación para negociar y mediar un conflicto interpersonal o intergrupal que se presente en su vida profesional.

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VI. DESARROLLO DE LAS UNIDADES

UNIDAD 1

COMPRENDIENDO EL CONFLICTO

Objetivos Específicos:

Al finalizar este módulo el alumno:

- Habrá comprendido básicamente el conflicto, su naturaleza y sus dinámicas.

- Se habrá familiarizado con la terminología del conflicto, la paz y sus definiciones.

- Habrá comprendido las causas del conflicto, su progreso y actores involucrados.

- Se habrá interiorizado de los aspectos específicos del conflicto

1.1.- INTRODUCCIÓN

Algunos seres humanos vivimos en un contexto en el cual el conflicto se manifiesta en su forma más violenta. Otros viven en un mundo donde la violencia se proyecta a través de los medios de comunicación masiva. Muchos de nosotros experimentamos conflictos en nuestro entorno todos los días, por ejemplo, se presentan conflictos en nuestras organizaciones, comunidades y dentro de nosotros mismos.

Diferentes conflictos ocurren en nuestro medio más inmediato y en el más distante y para buscar su solución debemos respondernos. ¿Qué es el conflicto? ¿Cómo podemos comprender estos conflictos en los diferentes niveles? ¿Cuándo y cómo ocurren y qué significa transformarlos?, preguntas que se analizará en esta unidad.

1.2.- EL CONFLICTO COMO CATEGORÍA SOCIOLÓGICA

El conflicto proveniente del campo de la ciencia política y de las relaciones Internacionales[2] y con la pretensión de llegar a constituir una nueva disciplina, hizo irrupción con bastante fuerza en el concierto mundial y principalmente tercermundista, durante el último cuarto del siglo XX, la conflictología y la resolución de conflictos o de disputas, disciplina que enfatiza en la generación de herramientas y habilidades para entender los conflictos, las crisis y los problemas (Vinyamata, 2000:3) aunque precisando que no existen fórmulas mágicas.

Diversos contextos se constituyeron en los escenarios que reclamaban tal presencia: los grandes conflictos internacionales, las continuas y continuadas guerras internas[3], el ecologismo, los conflictos entre el capital y el trabajo, los conflictos de pareja, el feminismo, etc. Es decir, se abría un “nuevo- viejo” campo en el estudio de las formas de reracionamiento de los individuos en cuanto seres sociales. Es el paso que da sentido a las relaciones de individuos y colectividades o, dicho de otro modo, es el paso del análisis del individuo al de la dinámica del sistema de relaciones dentro del cual tiene que actuar.

Los conflictos son inevitables en la interacción social y ocurren a todos los niveles, desde el interpersonal hasta el internacional, pasando por el organizacional e intergrupal, aunque, por supuesto, difieren en grado y forma de expresión. Por lo tanto, los conflictos no se deben clasificar en buenos y malos, sino que simplemente existen.

El mundo actual ha vigorizado como nunca antes los temas de la diplomacia, la prevención de conflictos, la negociación de conflictos, la mediación y la conciliación. Es decir, de un lado ha reconocido el conflicto como aspecto medular de las formas de interacción entre sujetos y grupos; y del otro expresa la preocupación por la búsqueda de salidas pacíficas a los mismos.

De hecho, hay que reconocer el carácter procesal del conflicto, lo que significa que surge, tiene un desarrollo escalar y transformativo, puede desaparecer o permanecer “estacionario”. En la comprensión de estos patrones de interacción de orden conflictivo recurrimos a algunos fundamentos históricos - sociológicos que se pueden enunciar de la siguiente manera:

- El conflicto es endémico, es una forma inevitable de la existencia social e individual.

- El conflicto no debe ser entendido como una manifestación, en sí misma, intrínsecamente negativa.

- La distinción entre el yo y el otro, o lo que significa lo mismo, entre el nosotros y el ellos, por efecto de la vida social es la distinción más fundamental: el reconocimiento mutuo de los actores.

- En el conflicto existen tantas percepciones como partes estén involucradas. Por ello, cada parte “habla” desde su propia verdad.

- La diferencia convoca a las relaciones y al conflicto. La diferencia es causa necesaria, pero no suficiente para la irrupción del conflicto.

- En síntesis: el objetivo no es la eliminación del conflicto, sino, la de transformar la forma como nosotros asumimos y manejamos las situaciones conflictivas.

Es común encontrar en la terminología de las ciencias administrativas la expresión “resolución de problemas”, y extender su uso al reconocimiento del conflicto como problema. Pensamos que estas expresiones corresponden a “premisas distintas” (Groom, 1997:1) y que solo por extensión se pueden asimilar.

La resolución de problemas es una técnica que se utiliza en todos los niveles y que consta de los siguientes pasos:

- Defina el problema;

- Analice las causas potenciales del problema y determinen lo fundamental (relación causa – efecto);

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