LOS INGRESOS PROPIOS DE LA UAS. ¿UNA ALTERNATIVA DE SOLUCIÓN A SU PROBLEMÁTICA FINANCIERA?

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En cambio, el subsidio Extraordinario es el asignado de manera extraordinaria a las Instituciones Públicas de Educación Superior, para cubrir algún gasto justificable pero no previsto en el presupuesto ordinario. Se trata de recursos que anualmente se determinan y asignan sin formar parte del subsidio regularizable ordinario y están sujetos a reglas de operación específicas para su autorización, administración, ejercicio, control y rendición de cuentas

En nuestro país, tradicionalmente la única fuente de los recursos de las universidades públicas ha sido el financiamiento por parte del Estado, sin embargo queda demostrado que esto no es suficiente, ya que cada año se dimensiona más el déficit financiero con el que operan la mayoría de las UPES en el país. Y la razón de esto, es que los recursos proporcionados por el Estado, no son suficientes para brindar todos los servicios requeridos.

Sobra decir que, muchas de las tensiones que presentan hoy en día las instituciones de educación superior son generadas por las presiones y exigencias a causa de la falta de financiamiento. Vélez (2003). Además que la rendición de cuentas, es en la actualidad, el requisito y el reto que enfrentan todas las instituciones de educación superior, tanto privadas como públicas, para lograr su supervivencia. Alcázar y Lozano (2012).

De acuerdo con Pérez Rojas (2000), Las universidades públicas tienen la necesidad de diversificar sus fuentes de financiamiento e incrementar la proporción en que participan tanto el sector productivo como los propios actores de la actividad universitaria, por medio de la venta de sus productos y servicios, es decir, mejorar los ingresos propios.

Según Russell Group (2010), citado por Terán (2014), la diversificación de las fuentes de financiación que refuerzan la autonomía de las instituciones y producen cambios en los mecanismos de la toma de decisiones, son:

- La colaboración de las universidades con las empresas.

- La búsqueda de financiación directa mediante consultorías o venta de servicios.

- La ampliación de la participación de los estudiantes en la financiación.

- La búsqueda de financiación a través de donaciones.

De acuerdo con Terán (2014), la planeación estratégica, es considerada como una herramienta que permite identificar los factores que inciden en la consecución de una meta y proporciona la información necesaria para la toma de decisiones en el presente, con el fin de alcanzar las metas y los objetivos organizacionales. “la supervivencia de una organización dependerá de su capacidad en convertir sus recursos y procesos en fortalezas y no en debilidades y vulnerabilidades”. Muñoz (2003)

Panorama Local.

En el caso que nos ocupa, la Universidad Autónoma de Sinaloa, por definición de su propia Ley Orgánica, es una institución de educación pública descentralizada del estado que, con base en el régimen de autonomía que consagra el artículo 3° constitucional, cuenta con personalidad jurídica propia y capacidad para adquirir y administrar bienes integrantes de su patrimonio, teniendo como objetivo impartir educación en los niveles medio superior, subprofesional, superior y posgrado.

Entre los hallazgos más relevantes encontrados recientemente en una investigación sobre el tema de ingresos propios de UAS, llevada a cabo por Terán (2014). Figura el hecho de que no existen lineamientos para promover servicios externos, que no se cuenta con una oficina encargada para llevar a cabo estas actividades y por si esto fuera poco, no existe por parte de la planta docente, la actitud, la disponibilidad ni la capacidad necesarias para el ofrecimiento de los servicios para la generación de ingresos propios en la universidad.

Por lo que concluye que, es imperante la creación, promoción y difusión de un catálogo de servicios externos, el cual sea distribuido por las principales vías de comunicación, como la WEB, en pro de cubrir necesidades con estos ingresos, gestionados a través de los servicios externos. Terán (2014). Esto no significa que en la actualidad, la institución no cuente con un catálogo de dichos servicios, ya tiene, pero hace falta una mejora en su planeación estratégica.

Como es bien sabido desde la década de los ochenta, la UAS se enfrenta a un impresionante crecimiento de matrícula estudiantil, derivado del aumento en la oferta educativa, lo cual ha conllevado a una acelerada expansión en términos de personal, tanto académico como administrativo, el cual no ha sido reconocido ni financiado por la SEP en su totalidad. Por lo que el comportamiento de los subsidios federal y estatal, no han crecido en la misma proporción, lo cual ha impactado a la institución en su capacidad financiera para atender los gastos de funcionamiento vía recursos ordinarios, ya que éstos resultan insuficientes; lo que ha desencadenado que, año tras año, la institución cierre su ciclo fiscal con un elevado y creciente déficit financiero.

En busca de alternativas de solución a esta problemática; en el año 2011, el rector en turno, Corrales Burgueño, declaró que los recursos que ingresan a la institución a manera de subsidio, no son suficientes para cubrir con lo que se está contractualmente obligado, al menos en términos de salario, por lo que se han empleado diversas estrategias, entre ellas el Catálogo de Servicios de la UAS, con el que se pretende ingresar recursos propios a través de estos servicios.

Este catálogo de servicios con que cuenta la UAS, ofrece servicios externos a través de las dependencias administrativas, unidades académicas, cuerpos académicos y docentes e investigadores de la universidad. Dichos servicios están relacionados con la capacidad y el desarrollo de recursos humanos, contratados por empresas, instituciones o personas externas, los cuales incluyen cursos, diplomados, seminarios, talleres de entrenamiento y capacitación, servicios profesionales, como; asesorías, consultorías, estudios, proyectos técnicos, ingeniería básica, pruebas de materiales, asistencias en el diseño, construcción de plantas industriales y edificios en general, servicios de laboratorio, investigación aplicada y pruebas piloto.

También se ofrece el uso y aprovechamiento de instalaciones, infraestructura técnica y servicios con que cuenta la universidad para realizar actividades académicas, de investigación y desarrollo tecnológico. Se ofrece al igual la trasferencia de tecnología, donde están consideradas las actividades destinadas al desarrollo tecnológico,