Minirevisión de literatura sobre el rol del auditor financiero frente al fraude

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Derivado del anterior para una mejor ocultación de los documentos e información, se da el fraude de colusión en el cual hacen parte más de dos o tres personas. Dichas personas pertenecen a diferentes lugares de la entidad para hacer un cubrimiento total. Así en muchas de las ocasiones se crean convenios con agentes externos para que a la hora de corroborar la información ellos den los datos alterados (Galleta, 2015; Silver, Fleming & Riley Jr, 2008). Todos estando de acuerdo en que al cubrir diferentes perspectivas de la entidad y utilizando partes externas, se vuelve más compleja la detención de este fraude, ya que son diferentes los favorecidos del delito y que lo ocultaran todo el tiempo que se pueda porque el beneficio recibido debe ser muy alto (Acorde con el castigo que este puede recibir si se descubriera el fraude.)

Otro fraude que se conoce es el de malversación de activos en el cual se ven afectados partes del rubro de los activos ya sean tangibles e intangibles y que estos son cubiertos a través de los registros contables que se hacen con ventas, compras y hasta transferencias, estos se dan con gran frecuencia por las oportunidades que cada persona percibe para ejecutarlo (Galleta, 2015; Silver, Fleming & Riley Jr. 2008; Dorminey, Fleming, Kranacher, & Riley Jr, 2010). Galleta menciona que se debe tener presente que al ser ocultados a través de registros la mayoría de ocasiones no se hacen, y estando de acuerdo con los demás en que si estos se realizan lo que se está haciendo es inflando los valores para así resguardar lo adquirido de la entidad.

Otro nombrado frecuentemente, es el fraude de estados financieros en los cuales hay una manipulación premeditada de los valores registrados allí, y están proporcionando valores fraudulentos al mercado con el cual está inflando los precios que la entidad maneja en sus diferentes rubros (Galleta, 2015; Albrecht & Hoopes, 2014; Silver, Fleming, & Riley Jr, 2008). Esto afectando en gran medida a la organización y además a terceros como inversionistas o acreedores y demás. Este fraude ya ha burlado, por decirlo, la mayoría de los controles que pueden estar implementados en la entidad, así que se pide que la supervisión que se debe realizar a los estados financieros se den por auditores externos para recibir una seguridad razonable de ellos ante el mercado, en esto están de acuerdo todos los autores, y además que se debe tener en cuenta que para este fraudé se debe tener un nivel alto de las competencias y habilidades de los auditores, así como su escepticismo profesional para la revisión de los diferentes rubros que los componen.

Todo lo mencionado anteriormente tiene cabida por la presión que se tiene de cubrir una necesidad o de enmendar algún error, pero también está influenciado por las oportunidades que se pueden presentar a las personas y por la moralidad o racionalización con la que se decide actuar para ejecutar el fraude ya que pueden tener la circunstancia para ejecutarlo pero si no actúa diligentemente el delito será fácilmente detectado. (Dorminey, Fleming, Kranacher, & Riley Jr, 2010; Albrecht, & Hoopes, 2014). Todos estando de acuerdo en que es necesario que el auditor actué con unas competencias y unas habilidades especificas según la organización para detectar fácilmente estos casos, y además, para esto es necesario las diferentes capacitaciones a los auditores sobre los temas específicos que manejan las empresas, así el tendrá los conocimientos obligatorios para entender en que momento no están realizando los trabajos correctos o no se está dando la información correspondiente según el dinamismo de la organización.

Por lo demás es necesario que el auditor conozca los diferentes casos de fraude para poderse enfrentar de mejor manera dentro de una organización y este permanecer más precavido a los delitos que pueden haber ocurrido o que pueden estar por suceder ante su trabajo. Él auditor debe ser perspicaz para entender las diferentes perspectivas en que se puede dar el fraude en las organizaciones y diligente con el descubrimiento de la realización incorrecta de actividades, las actualizaciones que haga el auditor deben ser continuamente ya que los cambios en la realidad del mundo se van dando a diario y siempre se hacen nuevas implementaciones para la ocultación de todos los tipos de fraude.

Cualidades de un auditor financiero

Según Ardelean (2015) si el público percibe o no, que determinado trabajo de aseguramiento es de alta calidad, es directamente proporcional con la credibilidad y buena reputación que demuestre el auditor. Esta reputación debe estar sustentada en el mayor o menor grado de profundidad de la investigación sobre los procesos de las organizaciones para que sus conclusiones sean aprovechadas por todos los miembros de la junta directiva. Por el motivo de que la información que es presentada por los auditores le permite proponer a la administración unas sugerencias para superar sus debilidades y mejorar sus fortalezas.

Este argumento también es respaldado por Chong (2013) quien además señala que los stakeholders presionan cada vez en mayor medida a los auditores para incluir la detección de fraude en sus programas de aseguramiento. Como podemos ver este delito es cada vez más usual en las organizaciones, pero de igual manera la complejidad para su descubrimiento también ha incrementado. Para ello se requiere de un profesional en aseguramiento con agudeza mental, quien busque más y mejor información, ya que de existir actividades ilícitas por pequeñas que sean van a alterar la estabilidad financiera de la organización.

En relación con lo anterior, este fenómeno también es analizado por García y Martínez (2003) quienes nos explican que actualmente el trabajo de los auditores es cada vez más relevante en relación a la detección del fraude, esto porque nos encontramos dentro de un entorno globalizado y con tendencia a un incremento en la manipulación ilegal de bienes. En síntesis, estos tres autores llegan a la premisa de que el trabajo de los auditores es esencial, por el motivo que como nos encontramos en un mundo con tendencia a mayores delitos financieros e informáticos, que requieren un trabajo de aseguramiento de calidad, para que los stakeholders reciban información transparente.

Para que esto pueda ser posible el auditor necesita poseer unas características principales, las cuales van más allá de las exigidas por las entidades que rigen la profesión. Estas características son subjetivas de cada uno de los auditores financieros, y es netamente responsabilidad de estos implementarlas en su vida profesional. A continuación nos permitimos presentar algunos aspectos relevantes