Modos de produccion, tratando un aspecto estrictamente económico

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En esta estructura global, una de las estructuras regionales se perfila como dominante de las otras. Contrario al común pensar de las personas, la estructura económica no siempre es la que cumple el papel dominante, pero si cumple un papel determinante en los modos de producción, ya que las condiciones económicas son las que determinan cual será la estructura dominante.

Podemos considerar dominante a la estructura que desempeñe el papel fundamental en la reproducción de un modo de producción determinado, lo que nos lleva a una característica fundamental de todo Modo de Producción, su dinámica. Es decir, la continua reproducción del mismo y de sus condiciones de existencia. Al mismo tiempo que reproduce sus bienes materiales, reproduce sus relaciones de producción; al mismo tiempo que reproduce sus relaciones de producción, reproduce sus condiciones de existencia (condiciones ideológicas y jurídico-políticas).

Anteriormente se mencionó que los modos de producción están históricamente condicionados, ya que “son las relaciones de producción las que confieren su carácter a las principales épocas de la historia de los hombres”. [6]

Modo de Producción PrimitivoEs considerado el primer orden económico de la historia. “En la comunidad primitiva, no existían la explotación ni el saqueo”[7], ya que no existía la plusproducción, los hombres producían lo necesario para poder subsistir, por lo que si alguno hubiera sido despojado de parte de su producto, hubiera muerto rápidamente. Esta etapa se caracterizó por la inexistencia de clases sociales, el bajo nivel de desarrollo de las fuerzas productivas, la propiedad colectiva de los medios de producción, un sistema de trabajo colectivo y la distribución igualitaria de la producción. Este modo de producción fue divido en dos épocas por Morgan y Engels, según su nivel de fuerzas productivas. Estas fueron la época del estado salvaje y la de la barbarie.

La época del estado salvaje es el periodo en el que se crea la primera forma de comunidad. En esta época el hombre dedica todo su tiempo a la búsqueda de su sustento diario, el bien que le permita subsistir. Gracias al desarrollo de las fuerzas productivas, este se logra abastecer cada vez mejor.

La época de la barbarie, se caracteriza por encontrar en la ganadería y la agricultura la principal fuente de subsistencia. Estos descubrimientos, fueron los primeros pasos para que el hombre pasara a tener una producción superior a la que necesitaban para sobrevivir, observándose una aparición gradual de la plusproducción, que libraría a las personas de la necesidad de trabajar y, posteriormente, daría paso al esclavismo.

Época de la Civilización

Engels, agrupa bajo el nombre de “Civilización” a los modos de producción esclavista, feudal y capitalista. “Las fuerzas productivas se desarrollan con tal ímpetu que el hombre produce un plusproducto, crea bienes más allá de lo estrictamente necesario para vivir”[8]. La afirmación anterior contiene el rasgo que caracteriza a estos tres modos, el hecho de que el hombre pueda producir más de lo que necesita para vivir. El hombre es despojado de su excedente productivo por una minoría dominante, poseedora de los medios de producción. Otra característica de esta época y que la diferencia del modo de producción primitivo es que aquí si tienen lugar la explotación, al no ser los trabajadores los propietarios de los medios de producción y tener que estar subordinados a un esclavista, señor feudal o capitalista; y el saqueo, ya que al no haber una distribución igualitaria de los productos, no todos podrán satisfacer sus necesidades y por ende, subsistir.

El modo de producción esclavista fue el primer modo de producción basado en la explotación que aparece en la historia. En este régimen, las relaciones de producción se basaban en la propiedad de los dueños de esclavos sobre los medios de producción y sobre los esclavos.

En esta sociedad se distinguen dos tipos de clases sociales antagonistas: los esclavistas y los esclavos. La esclavitud hizo posible un mayor desarrollo de la producción y, por ende, que se obtenga un plus producto, lo que libera de la necesidad de trabajar a los esclavistas.

Este sistema entro en crisis cuando los esclavos, que eran recompensados únicamente con alimento, se dieron cuenta qué asé trabajaran mucho o poco, igual eran alimentados y no vieron necesidad de trabajar. Esta fue una situación que los esclavistas no pudieron remediar ni con castigos ni con pena de muerte, por lo que el sistema esclavista dejo de ser productivo, volviéndolo inviable.

El modo de producción feudal es un sistema en el que el amo conserva la propiedad de la renta pero exige al trabajador una renta, lo que quiere decir que las relaciones de producción se sustentan en la propiedad privada por parte del señor feudal sobre la tierra, que vendría a ser el medio de producción en ese entonces. Sin embargo, el siervo podía ser propietario de los medios de trabajo que no le fueran encargados por el señor feudal, es decir, las herramientas rudimentarias que este, con su conocimiento técnico, pueda fabricar por el mismo.

La “renta” que el siervo debía pagarle al señor feudal se expresaba en trabajo, productos y dinero, a cambio de conservar una parte minoritaria de las cosechas y una mediana libertad, ya que el señor feudal, a diferencia que con los esclavos, otorgaba libertades a los siervos que para los esclavos serían impensables.

En torno a las clases sociales, se puede decir que en esta etapa surgen tres: el campesinado, los señores feudales y las monarquías.

Podemos señalar como elementos desarticuladores de este sistema a la evolución de las fuerzas productivas, ya que “con la aparición de las maquinas, adquieren un desarrollo tan rápido que las relaciones sociales generales llegan a ser un impedimento”[9], lo que rompió el cuadro de relaciones sociales que existía en ese entonces; y al surgimiento de una nueva clase de ricos: los comerciantes, quienes a través de los burgos y las ferias empiezan a acumular más riqueza que los señores feudales, lo que lleva a la revolución capitalista en su fase comercial.

El modo de producción capitalista está caracterizado por la propiedad privada de los medios de producción. Se logra un desarrollo superior de las fuerzas productivas, debido a la especialización máxima del trabajo y a que eleva su nivel técnico.

Las relaciones de producción están basadas en un sistema de trabajo asalariado, ya que el proletario, al no ser propietario de los medios de producción, vende su fuerza de trabajo para poder conseguir los medios necesarios