Petróleo en México en los ultimos años
Enviado por Sara • 24 de Enero de 2018 • 2.132 Palabras (9 Páginas) • 328 Visitas
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Método y análisis de los datos
Después de analizar la información más actualizada acerca de los cambios que ha experimentado la industria petrolera en los últimos meses y compararla con la de los años anteriores podemos ver un patrón en el que lo único constante es el fortalecimiento de la economía Norteamericana y el desplome en el precio del barril de crudo mexicano, situación que se ha atenuado durante las últimas semanas, ya que así como día a día vemos como centavo a centavo el dólar sube y sube, lo mismo pasa en relación inversa con el precio del petróleo. ¿De qué forma afecta esto la economía mexicana? Las cifras son claras y pareciera que nuestra estabilidad económica no depende del todo de esta industria, La producción y venta de petróleo representa menos del 6% del PIB y solamente el 13% de las exportaciones que realiza México cada año son de barriles de crudo, sin embargo, si analizamos el impacto que tienen estas ganancias en millones de dólares por año y lo que implica que baje un solo peso en su precio, podemos ver que esos porcentajes se perciben de forma distinta, sobre todo porque muchas de las actividades comerciales que se realizan en nuestro país, están directamente ligadas a estas ventas.
Al saber que la economía de la industria petrolera estuvo supuestamente blindada durante el 2015, muchos comerciantes y trabajadores de la industria pudieron relajarse un poco, el hecho de que el dólar suba es muy conveniente para todas aquellas empresas que cobran en dólares, pero para muchos otros (la mayoría de la población) esto solo significa que la gasolina sube sus precios, analizado desde el punto de vista del gobierno, esto los beneficia reduciendo el impacto de la baja del barril, sin embargo para “los simples mortales” solo representa más gasto e inconformidad. La esperanza ahora es que con las reformas energéticas, la producción de hidrocarburos (sector de la industria petrolera) logre fortalecer la economía con la llegada de empresas extranjeras a las que se les permitirá explotar nuestro territorio, esto es un arma de dos filos ya que si no se siguen los lineamientos o estrategias adecuadas al realizar estas nuevas operaciones, nuestra “estabilidad” corre riesgos mucho mayores. La instauración de empresas extranjeras y de magnitudes tan grandes, como son requeridas para esta industria, significa mucho más que la inmigración de extranjeros, todo esto podría traer consigo la pérdida de autoridad dentro de nuestro mismo país, y como lo he experimentado durante las últimas semanas en Campeche y algunas otras regiones del país, el rechazo a la llegada de todas estas personas encargadas de “llevarse nuestro petróleo” como se escucha todos los días en las costas o la pseudo-invasión a nuestro territorio, que ya no es algo que sorprenda debido a que en la misma capital se ve todos los días, un nuevo establecimiento de dueños extranjeros que apenas dominan el idioma pero parecen tener muchas más oportunidades aquí que los mismos mexicanos. No soy una persona etnocentrista pero no hay que analizar profundamente la situación para darnos cuenta de las desventajas que trae consigo día a día la reforma energética, todos estamos en espera de ver el impacto positivo de esta situación.
La disminución en la exportación de crudo, no solo tiene que ver con su disponibilidad, sino con los precios del barril de crudo en el resto del mundo; ya que mientras algunos países pertenecientes a la OPEP tienen sobreoferta, parece que el resto va quedando fuera del juego, durante el último año los barriles de Pemex no fueron tan atractivos para las demás naciones, como lo fueron los de Estados Unidos. Lo que PMI hizo con respecto a esta situación fue maximizar el valor del crudo en medida de los posible y acaparar nuevos mercados para lograr ofrecer un poco más de estabilidad a Pemex.
La falta de maquinaria y tecnología suficiente para explotar los pozos dentro de nuestro territorio ha sido una situación que nos pone en desventaja y nos ha llevado a aceptar acuerdos hasta cierto punto injustos a partir de las reformas energéticas, dejando que otros países hagan el trabajo; por ejemplo en Chicontepec, donde parecía haber un futuro prometedor debido a que representa el 40% de las reservas de petróleo del país, ha habido un lento desarrollo en el proceso de explotación a consecuencia de la lentitud en la perforación de dichas fosas. Similar ha sido el caso en muchos otras regiones en las cuales, se estima que Pemex se podrá encargar de la producción de petróleo por no más de dos décadas. Mientras tanto otros proveedores aprovechan esta desventaja para acaparar a nuestros antiguos clientes y en la OPEP continúa la incertidumbre y desorganización.
Conclusiones y recomendaciones
Es cierto que en nuestro país, las actividades mercantiles de muchos estados giran en torno a la industria petrolera, sobre todo aquellos que están los bordes y que cuentan con grandes pozos para ser explotados, sin embargo creo que no es la única actividad que puede salvar o estabilizar la economía mexicana, como bien lo menciona Enrique Campos Suarez en su más reciente publicación para Radio Fórmula, México tiene un mar de opciones fiscales para ser exploradas, claro que esto incluye un costo político y un reajuste de las balanzas, pero no es imposible de lograr. Cualquiera que sea el plan de “ataque” debe ser proyectado a futuro y entrar en vigencia lo antes posible, si es que se pretende ver resultados en el menor tiempo posible, la situación que no nos ayuda en lo absoluto es que el desplome del precio y las ventas no dependen en su totalidad de lo que pasa dentro del territorio mexicano, en esta ocasión están en manos de todo el mundo, ya que tanto los consumidores como los demás productores juegan un papel importante en nuestra estructura económica.
Lo que queda ahora es suplir el desgaste de nuestra economía causada por la baja demanda de crudo, con las alianzas que se firman cada día con empresas internacionales para entrar al país y encargarse de los hidrocarburos para compensar las pérdidas de la temporada. La esperanza entonces, está completamente en hacer que funcione la reforma energética. En mi opinión si se provechan en su totalidad estas nuevas legislaciones que van entrando en vigor, la economía puede mantenerse hasta cierto punto estable en el 2016, ya que una vez más se ha “blindado” el precio del barril de crudo para el año entrante con fuertes inversiones que supuestamente permitirán su venta a 50 dólares, aunque a comparación de años anteriores sigue siendo muy poco, esto permitirá unos meses de seguridad hasta ver los resultados de la enorme expectativa que la
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