Precios Máximos

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Cuando en un sector específico se limitan los precios que pueden cobrar, a su vez se eliminan los beneficios (entre ellos las ganancias e incluso la recuperación de la inversión, que en algunos casos se hace imposible, al vender a un precio menor del costo de producción), por consiguiente, los empresarios desvían su actividad, abandonando ese sector donde se han establecido precios máximos y se dirigen a otros no intervenidos, donde sea posible obtener más beneficios, agravando aún más el problema de la escasez por la influencia negativa de la fijación de los precios máximos que afectan el espíritu empresarial.

¿CÓMO SOLUCIONAR EL PROBLEMA DE ESCASEZ PROVOCADA POR LA FIJACIÓN DE PRECIOS MÁXIMOS?

En el mercado, se buscan soluciones para el problema de la escasez y todo lo que acarrea (colas, racionamiento, violencia...), dichas soluciones surgen, generalmente, al margen de la Ley y se denominan mercados negros.

Existe experiencia a lo largo de la historia sobre los efectos de la fijación de precios máximos como son:

- La caída del Imperio Romano, donde la inflación, generada por la multiplicación de la moneda, dio paso a la fijación de precios máximos, esto a su vez trajo como consecuencia la escasez generalizada y por ende el descontento de toda la población;

- la economía en la España post-guerra, donde se establecieron tarjetas de racionamiento para la distribución de los bienes;

- la política de las rentas en la Alemania Nazi, y finalmente, la liberación de precios, en el Milagro Económico Alemán.

Haciendo referencia a la lectura La política de rentas en la Alemania Nazi y el milagro de Erhard de Samuel Brittain y Peter Lilley, donde se plantea y analiza la situación vivida en Alemania al finalizar la II Guerra Mundial, en el año 1945, dejando una Alemania destruida, en ruinas, con un saldo de más de 11 millones de fallecidos, ocupada por las potencias ganadoras: Estados Unidos, Inglaterra, Francia y Rusia, en vista de la situación las potencias occidentales consideran el país como “hundido”, por lo cual, deciden establecer un listado de precios máximos para bienes de primera necesidad, resultando en: hambre, escasez y penuria.

Posteriormente, las potencias occidentales nombran a Ludwing Erhard (Economista) como Ministro de Economía, ante la situación Erhard propone eliminar todos los precios máximos y establecer el mercado libre. Muchos no estuvieron de acuerdo con esta idea, ya que no resultaba lógico liberar el mercado en una Alemania destruida.

Sin embargo, se establece un decreto de artículo único, en el cual se anuncia que quedan eliminados todos los precios máximos y son libres en Alemania. Contrario a todo pronóstico, “milagrosamente”, de una Alemania destruida, surgieron mercados improvisados de productos de primera necesidad y había alimentos en abundancia. Éste fue el principio del Milagro Económico Alemán.