TRABAJO FINAL DE PUBLICIDAD 1

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La administración de este se refiere a analizar nuestro uso de este recurso en forma regular, para comprender la forma más adecuada de usarlo en forma efectiva.

A veces, especialmente cuando estamos apurados de tiempo, desearíamos que este fuese elástico y poder estirarlo, encoger a nuestro antojo. En este trabajo les presentamos las herramientas que le permitieran administrarse de una forma más adecuada.

Objetivo General

Con este material, el lector identificará y valorará la importancia del buen empleo del tiempo de forma productiva y racional.

Objetivo Específicos

El lector será capaz de

- Aprender a gestionar eficazmente el tiempo, cómo un recurso limitado pero muy valioso.

- Reflexionar sobre los momentos en los que da un mal empleo a su tiempo.

- Conocer que elementos, actividades y circunstancias son los causantes de robarnos el tiempo.

- Planificar la distribución de su accionar.

- Saber priorizar entre lo importante y lo urgente.

- Analizar y evaluar como emplearan su tiempo en acciones futuras para emprender las acciones necesarias.

Desarrollo del tema

El tiempo es la dimensión del cambio, si nada cambiara no habría tiempo. La Administración del tiempo consiste en la forma en que nos conducirnos nosotros mismos, para optimizar el tiempo con el que contemos. Tiempo significa conducir nuestras cuestiones dentro del tiempo disponible, para que podamos lograr resultados más eficaces, teniendo presente siempre que la meta debe ser el logro de nuestros objetivos.

Como alcanzar nuestras metas:

- Lo primero es especificar nuestra meta.

- Divide tus metas en pequeñas partes.

- Identifica claramente los pasos a seguir.

La sociedad hoy parece resaltar la idea que no tenemos tiempo suficiente, sin embargo, tenemos todo el tiempo de nuestra existencia. Cuando se trabajar más rápido y más horas la estrategia que estamos implementando para administrarnos es pobre. El tiempo es una contradicción. No importa lo que hagamos, siempre hay opciones interminables para invertir el tiempo. La solución, es enfocarse primero en las cosas más importantes, en con la seguridad de que siempre habrá tiempo suficiente, para las cosas que realmente es necesario hacer.

Como un recurso, el tiempo nos presenta otra paradoja: si no lo usamos, desaparece de todas maneras. En efecto, la calidad de este recurso depende de la forma en que lo empleemos. El conocimiento de que estamos desperdiciando este recurso tan personal cuando no lo usamos debidamente, debería ser suficiente para decidirnos a invertir el tiempo de mejor manera, Tu tiempo es tuyo y no pertenece a nadie más. Sólo tú puedes mejorar la calidad de tu tiempo.

La eficiencia y eficacia

¿EFICIENCIA O EFICACIA? La eficiencia es hacer bien lo que se hace; con el menor costo posible (de dinero, de tiempo). Esta es positiva, pero no garantiza resultados. Se limita a hacer bien lo que se hace. La persona eficaz, es aquella que, hace lo que debe hacer. Tiene en su mente siempre presente los resultados que desea alcanzar, lo que le facilita el acercarse a ellos. La eficiencia se centra en el método, en el cómo. La eficacia, en el fin.

La eficiencia se refiere a hacer las cosas bien, es obtener el mejor o máximo rendimiento utilizando un mínimo de recursos. La eficacia, por otra parte, es hacer las cosas de la manera correcta y de esta manera alcanzar el resultado deseado. En cambio, con la eficiencia se piensa cómo puede ser el futuro dependiendo de la adición o eliminación de ciertos recursos. Para ser eficiente se requiere de una disciplina rigurosa. Esto puede conllevar a que las personas se vuelvan muy metódicas, calculadoras o que sean un tanto rígidas.

Ya que la eficiencia se trata de hacer las cosas bien, exige documentación y repetición de ciertos pasos. Pero hacer lo mismo una y otra vez puede desalentar o ir en contra de la innovación. Contrario a la eficacia, en la cual se fomenta la innovación, ya que se exige que la persona sea crítica y piense por sí misma; para de este modo poder lograr su mayor objetivo.

Es decir, entre eficiencia y eficacia existe una relación unidireccional. Mientras una persona es eficiente esta al mismo tiempo es eficaz, la relación contraria no se da. Es decir, el estudiante eficiente, al igual que el estudiante eficaz, consigue alcanzar sus objetivos. Sin embargo, un trabajador eficaz podría optimizar su desempeño en términos de recursos utilizados.

La gestión del tiempo

En esta está contenida la clave del éxito de cómo puedo ser más eficaz, todo depende del modo en que las personas administren su tiempo. Porque lo que acaba contando no es lo mucho que se ha trabajado, sino lo que se ha terminado, lo que ha dado lugar a resultados concretos. Son estos resultados lo importante, no las actividades que se desarrollen para alcanzarlos. La eficacia sólo se puede alcanzar mediante una correcta administración del tiempo del que se dispone. Cuando empleamos mal nuestro tiempo nos olvidamos de nuestros objetivos, de nuestras prioridades, cuando no nos planificamos, o porque no hemos respetado las previsiones establecidas.

¿Qué es perder tiempo?

Es hacer algo que es de menor importancia que otra cosa que se pudiera hacer en su lugar. La importancia va a estar determinada en función de los objetivos. Controlar el tiempo es responder continuamente a la pregunta ¿cuál es la mejor manera de aprovechar este minuto? Para ello es preciso tener en mente lo que se está tratando de llevar a cabo. Hay que definir los objetivos, analizar las actividades y programar el tiempo. Y realizar luego, lo que se ha previsto hacer, o algo más importante todavía. Gestionar el tiempo requiere, planificar, establecer objetivos, priorizar acciones. El tiempo es un recurso escaso y además es absolutamente diferente de todos los que estamos habituados a manejar.

Dentro de las características que este posee son; insustituible, inelástico, indispensable, igualitario.

Hacer bien