Thomas Hobbes: Filosofía Moral y Política

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Por lo tanto Hobbes vivió en una época de agitación, más cortante que toda Inglaterra se ha conocido desde entonces. Esta agitación tenía muchos aspectos y causas, políticos y religiosos, militares y económicas. Inglaterra quedó dividido contra sí mismo de varias maneras. Los ricos y poderosos estaban divididos en su apoyo al rey, especialmente en relación con los poderes del monarca de los impuestos. Parlamento se divide de manera similar en relación con sus propios poderes vis-à-vis el Rey. La sociedad estaba dividida religiosamente, económicamente, y por región. Las desigualdades en la riqueza eran enormes, y las convulsiones de las guerras civiles vieron la aparición de sectas religiosas y políticas sorprendentemente radicales. (Por ejemplo, "los niveladores" que se trataron mucho mayor igualdad en términos de riqueza y de los derechos políticos; "los cavadores," todavía más radical, lucharon por la abolición del trabajo asalariado.) La guerra civil hizo que el país se dividió militarmente. Y todas estas divisiones atraviesan entre sí: por ejemplo, el ejército del retador republicano, Cromwell, fue la principal casa de los niveladores, sin embargo, Cromwell, a su vez actuaría para destruir su poder dentro de las filas del ejército. Además, la reciente unión de Inglaterra con Escocia era frágil en el mejor, y fue casi destruida por los intentos del rey Carlos I de imponer la consistencia en las prácticas religiosas. Veremos que el mayor temor de Hobbes era un caos social y política - y tuvo una gran oportunidad tanto para observarlo como para padecer sus efectos.

A pesar de la agitación social y política afectó la vida de Hobbes y dio forma a su pensamiento, nunca se ve obstaculizado su desarrollo intelectual. Su posición temprana como tutor le dio el alcance de leer, escribir y publicar (traducción brillante del escritor griego Tucídides apareció en 1629), y lo puso en contacto con los intelectuales ingleses notables como Francis Bacon . Su exilio autoimpuesto en Francia, junto con su emergente reputación como científico y pensador, lo puso en contacto con las principales figuras intelectuales europeos de su tiempo, dando lugar a intercambiar y controversia con figuras como Descartes , Mersenne y Gassendi. Intensamente disputatious, Hobbes envuelto en varias ocasiones a sí mismo en las discusiones prolongadas con clérigos, matemáticos, científicos y filósofos - a veces a costa de su reputación intelectual. (Por ejemplo, argumentó en varias ocasiones que es posible "cuadratura del círculo" - no es casual que la frase es ahora proverbiales por un problema que no puede resolverse) Su escritura fue tan impávido por edad y mala salud como lo fue por el acontecimientos de su época. A pesar de su estado de salud poco a poco no - de unos sesenta años, empezó a sufrir "parálisis temblorosa", probablemente la enfermedad de Parkinson, que constantemente se agravó - incluso en sus años ochenta, continuó a dictar sus pensamientos a una secretaria, y para defender a su cuarto en varias controversias.

Hobbes se ganó una reputación en muchos campos. Era conocido como un científico (especialmente en óptica), como matemático (especialmente en la geometría), como traductor de los clásicos, como escritor en la ley, que un litigante en la metafísica y la epistemología; no menos importante, que se hizo famoso por sus escritos y disputas sobre cuestiones religiosas. Pero es por sus escritos sobre la moral y la política que ha, con razón, ha más recordados. Sin éstos, los eruditos recordarán a Hobbes como intelectual interesante del siglo XVII; pero pocos filósofos siquiera reconocer su nombre.

¿Cuáles son los escritos que obtuvieron Hobbes su fama filosófica? El primero se titulaba los elementos de Derecho (1640); este fue el intento de Hobbes para proporcionar argumentos que apoyan el rey en contra de sus rivales. De Cive [ en el ciudadano ] (1642) tiene mucho en común con los Elementos , y ofrece una declaración clara y concisa de la filosofía moral y política de Hobbes. Su trabajo más famoso es Leviatán , un clásico de la prosa Inglés (1651; un poco alterado edición latina apareció en 1668). Leviatán se expande en el argumento de Cive , sobre todo en términos de su gran segunda mitad que se ocupa de cuestiones de religión. Otros trabajos importantes incluyen: De corpore [ En el cuerpo ] (1655), que se ocupa de cuestiones de la metafísica; De Homine [ En Hombre ] (1657); y Behemoth (publicado 1682, aunque escrita en vez antes), en el que Hobbes da su versión de las guerras civiles de Inglaterra. Pero para comprender lo esencial de las ideas y el sistema de Hobbes, se puede confiar en Cive y Leviatán . También vale la pena señalar que, a pesar de Leviatán es más famoso y más a menudo leer, Cive en realidad le da una cuenta mucho más directa de las ideas de Hobbes. Los lectores cuyo interés principal está en esas ideas pueden desear saltar la próxima sección e ir directamente a la ética y la naturaleza humana .

3. Dos influencias intelectuales

Así como los antecedentes políticos simplemente subrayó, dos influencias son muy marcadas en la obra de Hobbes. El primero es una reacción contra la autoridad religiosa como lo había sido conocido, y especialmente contra la filosofía escolástica que aceptó y defendió dicha autoridad. La segunda es una profunda admiración por (e implicación en) el método científico emergente, junto con una admiración por una disciplina mucho más antigua, la geometría. Ambas influencias afectadas Hobbes cómo expresan sus ideas morales y políticas. En algunas áreas también es claro que afectaron significativamente las ideas mismas.

Menosprecio de Hobbes de la filosofía escolástica no tiene límites. Leviatán y otras obras están llenas de referencias a la "frecuencia de expresión insignificante" en las especulaciones de los escolásticos, con sus combinaciones de la teología cristiana y la metafísica aristotélica. La reacción de Hobbes, además de mucho salvaje y el sarcasmo con gas, es doble. En primer lugar, se hace muy fuertes demandas sobre la relación adecuada entre la religión y la política. Él no era (como muchos han cargado) un ateo, pero él era muy serio al insistir en que las disputas teológicas deben mantenerse fuera de la política. (También adopta una metafísica muy materialistas, que - como sus críticos no tardaron en cobrar - hace que sea difícil dar cuenta de la existencia de Dios como una entidad espiritual.) Para Hobbes, el soberano debe determinar las formas adecuadas de culto religioso, y ciudadanos nunca tienen deberes para con Dios que anulan su deber de obedecer a la autoridad política. En segundo lugar,