Castigo de Dios.

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Entonces, el padre Peter del televisor comenzó a escribir en la agenda con manos temblorosas. Pero la libreta se le escapó y cayó al suelo en medio de un charco de sangre y agua. Trató de recuperarla en un desesperado intento, pero las fuerzas le fallaron y se golpeó la frente contra el borde del yacusi perdiendo el conocimiento. Su cuerpo cedió y se fue hundiendo en el agua rojiza hasta desaparecer.

La pantalla de la televisión mostró la misma imagen fija durante unos tres minutos, en los que el padre Peter no apartó la vista ni un segundo. Su álter ego al otro lado del plasma no volvió a emerger del agua. Finalmente, la grabación se paró, y una niebla gris, acompañada de un zumbido lo cubrió todo.

Después el padre se tocó la frente ensangrentada, allí donde se había golpeado con el yacusi. Esa herida no había cicatrizado milagrosamente como las de la muñeca, sino que seguía abierta y estaba cubierta de restos de sangre coagulada. Y lo que era mucho más importante e inquietante: ¿por qué no estaba muerto después de todo lo ocurrido?

El padre trataba de entender lo sucedido porque de verdad se encontraba muy confundido, y mucho más después de ver lo que había sucedido en la grabación. Aparentemente había intentado suicidarse contándose las venas, aunque desconocía el motivo. No sabía cómo había llegado a ese lugar y su último recuerdo nítido era el día anterior, o eso creía. Había salido de la reunión del consejo de la universidad en la que había sido elegido para conducir el discurso inaugural. Era una calurosa tarde de finales de agosto y había decidido regresar a casa dando un paseo por el parque. Al llegar, había descansado un rato en el sofá frente a la televisión y había cerrado los ojos. No tenía intención de dormir, pero había trabajado intensamente las últimas noches y el sueño le había vencido mientas veía las noticias.

Bueno, al final de cuentas el padre Peter se adentra en un gran misterio de la universidad, al parecer había sucedido algo execrable en ésta, un asesinato.

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3.- CONCLUSIÓN.

En conclusión el libro “Castigo de Dios” es muy, muy interesante porque la trama es de suspenso y misterio; al ir leyéndolo te vas interesando más sobre el “¿Qué pasará después?”, el libro te atrapa y no permite que dejes de leer, por el simple hecho de su misterio e inquietud sobre la trama. En lo personal me adentré en el libro y no dejaba de leerlo porque la verdad sí está muy interesante y te atrapa por completo. Y más porque el que vivas o veas tu muerte, como que sí está medio loco, sobretodo porque viéndolo desde el punto paranormal… Te saca de onda. Pero es un excelente libro como para recomendar sin duda alguna.

4.- Bibliografía.

García Muños César. García Bautista Nieves. Castigo de Dios. Madrid, España. Smashwords Edition. 2010.

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