Dios existe. La religión y la ciencia

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Teísmo, Ateísmo y Agnosticismo

En términos generales el teísmo significa la creencia en el Dios viviente, que interviene en el curso del mundo y en la vida humana. En este sentido, se dan rasgos teístas en la mayoría de las religiones: en las politeístas, en cuanto que los muchos dioses intervienen en mayor o menor grado en la vida humana; en las religiones panteísta o monista, en la medida en que crean una unión íntima entre el hombre y la divinidad; en las religiones monoteístas sobre todo, por relación a las cuales el teísmo adquiere su significado específico. El que considera ser teísta un creyente en la existencia de Dios mantiene su postura al dar por supuesto que su ideología es defendible, racional y verdadera. Puede decirse que el ateísmo es lo contrario al teísmo, la doctrina de los que sostienen la existencia de una o más divinidades. Es el ateo es quien tiene que demostrar con argumentos válidos y de las razones para sacar una conclusión de tal magnitud sobre la inexistencia de Dios y si así fuese el caso el creyente mantendría igual su postura pues es cuestión de fe.

El considerado ateo expone que todos los argumentos sobre la existencia de Dios son cuestionables, poco probables, inconsistentes y que ninguno de estos garantiza su existencia, apunta a las debilidades de las afirmaciones del teísta al no creerlas suficientes y faltantes de pruebas lógicas o que realmente demuestren el porqué de su creencia hacia a Dios, rechazando la mínima posibilidad de que tales afirmaciones pudiesen ser verdaderas y teniendo la obligación de comprobar lo contrario por así decirlo a demostrar por medio de la ciencia que Dios no existe.

Por consiguiente las afirmaciones tanto religiosas como científicas ocupan posiciones opuestas con respecto a lo que es considerado para ellos real o no, pero si se pudiese encontrar un equilibrio entre estas ideologías y es aquí donde se encuentra la postura de las considerados agnósticos. El agnóstico no afirma ni niega la existencia de Dios su postura se centra en dudar con respecto a su existencia donde declara inaceptable al entendimiento humano todo lo considerado como verdad absoluta. No asume que la ideología por el ateo y el teísta sea verdadera o falsa.El agnosticismo está esencialmente indispuesto a hacer decisiones a favor o en contra de la existencia de Dios. Los teístas creen que Dios existe. Los ateos creen que Dios no existe. Los agnósticos creen que no debemos ni creer ni negar la existencia de Dios porque es imposible probar una u otra cosa.

“Si el agnóstico escoge utilizar su cabeza se convierte en un ateo; si opta por dejarse llevar de su corazón será teísta. Y o advirtiera que no hay razón válida para creer en la existencia de Dios, o decidirá creer en la existencia de Dios sobre base de las razones no válidas”(Hanson, Nelson, & Feyerabend, 1976, pág. 12)Entonces si el agnóstico admitiera que no hay razones suficientes para creer en la existencia de Dios se convertirá en ateo o bien si creyera en la existencia de Dios sin más que solo por fe sin cuestionar nada de esta doctrina se convertiría en teísta, para el agnóstico la razón y la experiencia son igualmente insuficientes para demostrar la existencia de Dios; se mantiene al margen de ello no a favor no en contra y así encontrando lo que llamaremos el equilibrio entre las afirmaciones de los que son creyentes y los no creyentes.Es normal tener dudas. Hay tantas cosas en este mundo que no podemos entender. Con frecuencia la gente duda de la existencia de Dios porque no entienden o están de acuerdo con las cosas que Él hace o permite. Sin embargo, nosotros, como seres humanos, no debemos esperar que estemos capacitados para comprender a un Dios.

Ahora que se ha analizado las posturas de estas tres formas de pensamiento donde la distinción de los considerados teístas, ateos y agnósticos es su contrariedad cuando se plantea la pregunta ¿Dios existe?; el creyente dirá “si” pues para ellos la existencia de Dios no puede ser sometido a observaciones científicas que lo pueda invalidar en cuanto al ateo dirá “no” porque debe haber una explicación científica que lo compruebe si existe o no “Las leyes de la naturaleza suponen un problema para los ateos porque son una voz de la racionalidad escuchada a través de los mecanismos de la materia” (Flew, 2012, pág. 101)y el agnóstico no sabrá o no puede decidir entre “ si o no ” entre lógica o un hecho.

Así cabe señalar que tanto la religión coma la ciencia son fenómenos culturales con sus propios mecanismos de justificación ideológica y nos damos cuenta que cuan maravillosa es la mente humana cuando te conviertes en lo que decides creer y las creencias son un asunto privado y cada uno de nosotros es libre de creer lo que le plazca en la cual se sienta identificado y más acorde a su ser.

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Conclusión

Considerando todos los argumentos ideológicos de la existencia de Dios, así también como la ciencia y religión crean en la sociedad una especie de seguridad o intriga donde creyentes adoptan fielmente la doctrina religiosa sin cuestionar o indagar en sus cimientos, orígenes y fines religiosos sencillamente como un acto de fe. Otros y nos referimos a quienes cuestionan lo establecido por la religión, su método de control social por decirlo de alguna manera aceptable para los no creyentes en cuanto a las creencias y hechos argumentados sin ninguna prueba más que la epístolas escritas en la biblia; La ciencia más que contradecirlos se debe de enfoca en comprobar los hechos y descartar aquellos que resultasen al criterio científico como falsos. En este punto es donde se encuentran las diferentes formas de pensamiento como la teísta, atea y agnóstica.

Una conclusión definitiva de la existencia de Dios sería considerada imperfecta y más aún llegar a excluir las demás formas de pensamiento pues la respuesta de su existencia debe de ser encontrada en nuestro propio ser como nuestra verdad, mentira o duda dejando el tema a criterio de cada persona atreves de sus reflexiones, cuestionamientos y deducciones; Por lo cual se puede atribuir más que como conclusiones los puntos de vista siguientes: 1) La humanidad tiene la necesidad de crear una figura superior buscando la razón de su misma existencia y la explicación de los fenómenos en su entorno. 2) La religión no se interesa en demostrar la existencia de Dios mediante pruebas convencionales asume su existencia como evidente y la fe se apoya en esta razón no surge de un proceso demostrativo como lo trata de explicar la ciencia que busca demostrar