La comunicación en las empresas inteligentes.

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Hoy día, existen millones de forma de comunicarse. Anteriormente, la comunicación era un poco más costosa y difícil porque no se contaba con todos los avances tecnológicos que se tienen en la actualidad. Un correo de buzón que podría perderse por haber copiado mal la dirección o por cualquier otra razón desconocida, ha sido suplantado por el correo electrónico, las llamadas por Skype y por un sin fin de recursos mediante los cuales la comunicación se hace presente. Todos estos grandes e ingeniosos avances tecnológicos son los que han permitido principalmente el éxito que tienen hoy día las conocidas empresas inteligentes y es por la rapidez y gran acceso que tienen todas las personas hacia estos, que la comunicación se hace más factible. Sin embargo, la comunicación no solo se basa en correos electrónico o videoconferencias. Esto, si bien es parte de la comunicación, no lo es a su totalidad. Se trata de darle solución a algún problema o simplemente comprender las necesidades de cierto público y llegar a un acuerdo entre las partes mediante el canal más adecuado aunque lo más rápidos y que mayormente suelen utilizarse son el teléfono y las reuniones debido al corto plazo de tiempo con los que estos medios cuentan. La comunicación escrita, por su parte, es mucho más formal y se usa cuando la cantidad de información es mayor, detallada y completa.

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Si bien en toda organización hay diferentes tipos de jerarquía, no significa que a la hora de tomar decisiones se implemente el mismo modo operativo oyendo a una sola voz que indique lo que se debe o no hacer. Aunque eso depende también del manejo que tenga cada empresa, ya que por ejemplo en algunas compañías se utiliza la comunicación jerárquica que se establece en una organización con una estructura vertical, en donde ciertas personas tienen más autoridad que otras creando ciertas desigualdades. No obstante, el éxito de toda compañía depende de una buena comunicación, es por ello que cada empresa debe evaluar cuál es la que más convenga para alcanzar los objetivos esperados y proyectar una buena imagen corporativa al exterior.

Hay diferentes tipos de comunicación, como lo son, entre las más conocidas: la comunicación horizontal, que no establece distinción de rango, la vertical, que si tiene jerarquía, la oblicua, la formal, la informal, entre otras.

La comunicación horizontal indica que no hay una distinción de jerarquía y, por ende, debería ser la más apropiada. Claramente, en toda organización cada trabajador ocupa un cargo en especifico, pero al momento de tomar decisiones para la resolución de conflictos es importante escuchar y tener en cuenta las opiniones planteadas por cada uno de los integrantes del colectivo operacional y con base a ello tomar la decisión que resulte más favorable para la organización.

Por otro lado, la comunicación vertical, como se mencionó anteriormente, es aquella que marca una jerarquía. Sin embargo, se divide en dos categorías: ascendente y descendente.

Se habla de ascendente, cuando la información proviene de abajo, es decir, de los empleados hasta los cargos de mayor rango (gerentes, directores, etc). Y se entiende por comunicación vertical descendente, cuando la información procede primeramente desde los cargos de mando hacia abajo, como por ejemplo los manuales, folletos, entre otros.

La comunicación oblicua, es aquella que puede realizarse entre un gerente del departamento de comercio y un empleado pero que está prevista dentro del ámbito organizacional.

Otro tipo de comunicación y que se consideraría importante es la no verbal, que hace referencia no solo al lenguaje de señas, sino también de símbolos, y que pueden acentuar o reforzar lo que un mensaje realmente quiere llegar a decir. En el ámbito de una empresa se refiere a lo que busca transmitir ésta, es decir, su apariencia.

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Las empresas inteligentes han sabido establecerse y aprovechar el gran boom ocasionado por el desarrollo de las tecnologías. He ahí el porque de su éxito ya que, debido a esto último, ha venido dándose la competitividad entre dichas empresas y es allí donde nace la búsqueda de factores que logren un desarrollo a largo plazo basándose en la productividad y utilizando todos los medios adecuados para mantenerse dentro de ese mercado, incluyendo el ingenio del capital humano para adaptarse a situaciones y lidiar con ellas poniendo en marcha nuevos proyectos e iniciativas que permitan que la competitividad mencionada anteriormente pueda establecerse cumpliendo con las necesidades y gustos de los consumidores.

En las organizaciones el uso de las tecnología de información y las innovaciones tecnológicas son de vital importancia, porque si bien representan la evolución de capital, también están reflejando el interés de las personas por tener acceso de manera más rápida y una solución mejorada ante cualquier tipo de situación con tal de facilitar el trabajo humano.

El uso de la tecnología es muy común hoy en día y es algo que ha marcado, sin duda alguna, la vida de todo ser humano modificando sus costumbres y la manera en cómo se relaciona y comunica ante la sociedad, pero adoptando nuevas maneras más fáciles tanto de ver y comprender lo que ocurre a su al rededor. Este sentimiento innovador del ser humano de satisfacer sus necesidades es lo que ha hecho que toda esta revolución tecnológica sea posible dejando, incluso, el analfabetismo atrás creando nuevas formas de integración en todo sentido determinando así, el avance que puede apreciarse en la humanidad actualmente.

Este desarrollo tecnológico es lo que permite que haya competitividad, crecimiento económico al saber mantenerse en un mercado incierto debido a que cada día hay una innovación nueva pero, sobre todo, el gran uso que se les da para poder tener una comunicación más rápida y que implique menos costo.

En fin, la comunicación es un término que hace referencia al intercambio de ideas. Todas las personas tienen y poseen creencias e información totalmente distintas, por ello cuando se está en presencia de una empresa, es decir, de una organización inteligente se busca y establece el trabajo en equipo, donde todo el capital humano deberá trabajar buscando siempre las mejores opciones que favorezcan a la organización, dejando atrás intereses particulares y medidas que resulten subjetivas.

Hay que tomar en cuenta también que para que cada trabajador de la organización se identifique con la empresa, el ambiente debe ser el esperado por todas y cada unas de las personas que estén relacionadas con ella, directa o indirectamente.