DERECHO “REPORTE MUSEO” El Magonismo y el programa del partido liberal

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Francisco I. Madero un hombre de familia hacendada del norte del país formado en Europa tomó muy en serio las palabras de Díaz por lo que dio inicio a toda una campaña a nivel nacional para buscar apoyos y poder contender a la presidencia de la república.

El grupo de Bernardo Reyes que había sido desplazado como el grupo favorito de Díaz empezó a dar su apoyo a Madero, la experiencia de estos grupos en la administración pública y en la organización fue fundamental para que el movimiento de Madero empezara a crecer.

“Porfirio Díaz en el balcón presidencial” [pic 4]

Gobierno de Victoriano Huerta

En 1907 Huerta recibió el grado de general, la Medalla al Mérito y fue nombrado miembro de la Suprema Corte Militar de la Nación; todo esto gracias a su amigo el general Bernardo Reyes. Al estallar la revolución convocada por Francisco I. Madero, Huerta solicito regresar al ejército por lo que fue el encargado de llevar el convoy presidencial al puerto de Veracruz. Cuando Madero asumió la presidencia despidió a las fuerzas armadas pero tras la rebelión de Pascual Orozco reconsidero su decisión y puso a Huerta al mando de las tropas del gobierno federal, tuvo un altercado con el comandante Francisco Villa.

Al morir su amigo Reyes, volvió a ofrecer sus servicios a Madero quien lo volvió a poner al mando del ejército. Huerta se unió a los sublevados pero fue descubierto por uno de los hermanos de Madero, por lo que lo arrestaron y lo llevaron ante el presiente; como Huerta siempre se había mostrado fiel con él pues no creyó lo que le estaban diciendo, así que lo volvió a poner en libertad. Dos días después Madero se dio cuenta de que si era cierto de que lo había traicionado con Aureliano Blanquet, obligándolo a renunciar. Huerta y Félix Díaz estaban aliados con Henry Lane Wilson firmando el Pacto de la Ciudadela. En el cual se establecía que al triunfar, la rebelión Díaz se haría cargo de la presidencia pero Huerta lo convenció de que lo dejara a él gobernar para poner la paz entre los maderistas.

El 22 de febrero de 1913 Madero y el vicepresidente José María Pino Suárez fueron ejecutados. Tras esa tragedia Huerta asumió el poder instalando una dictadura militar que termino separando el Congreso de la Unión. Pocos días después de que Huerta llego a la presidencia Venustiano Carranza en ese entonces gobernador de Coahuila lo desconoció y formo su propio Ejército Constitucionalista, el cual es derrotado el 13 de agosto de 1914.

El gobierno de Huerta enfrento varios levantamientos en varias regiones puesto que había comenzado la Revolución Constitucionalista. El nuevo presidente de EE.UU. Woodrow Wilson, ignoro su gobierno y el 21 de abril de 1914 la marina estadounidense ocupo Veracruz.

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Huerta abandono su patria dirigiéndose a Kingston, Jamaica; de ahí se dirigió a Gran Bretaña, después a España y por ultimo a Estados Unidos en abril de 1915. Lo que él quería era que el Imperio Alemán le restituyera el poder. Franz von Rintelen un oficial naval del espionaje alemán quien le ofreció dinero y armas para llevar a cabo un golpe de estado en México con la finalidad de que luego el régimen de Huerta iniciará una guerra contra Estados Unidos. Para llevar a cabo su conspiración contactó a su antes rival Pascual Orozco.

Huerta junto con Pascual Orozco fueron detenidos en una estación de tren de Newman, Nuevo México el 27 de junio de 1915, siendo acusados de violar las leyes por intentar conspirar junto con una potencia beligerante. Huerta quedo encarcelado inicialmente en la prisión militar de Fort Bliss en Texas, pero pago una fianza que le permitía salir de la prisión militar y pasar a un arresto domiciliario debido a su estado de salud, pero al intentar regresar a México fue encarcelado nuevamente por las autoridades estadounidenses. Murió en la prisión El paso el 13 de enero de 1916 a causa del exceso del consumo de bebidas alcohólicas.[pic 5]

“VICTORIANO HUERTA “

El ejército constitucionalista y el ejército convencionista

El Ejército Constitucionalista fue uno de los múltiples ejércitos mexicanos que surgieron durante la Revolución Mexicana. Este ejército fue dirigido por Venustiano Carranza en 1914. Con el propósito de mantener el orden constitucional del país y de derrocar al gobierno federal que en ese entonces estaba al mando de Victoriano Huerta. El Plan de Guadalupe fue lo que inspiro para que surgiera este ejército de manera formal, en ese Plan se organizaban y unificaban los movimientos insurgentes. La lucha de este ejército permitió la promulgación de la constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos de 1917.

Desde la primavera y verano de 1913 se consolidaron tres grandes ejércitos revolucionaron que conformaron las principales columnas del constitucionalismo: la División del Norte, el Ejército del Noroeste y el Ejército del Noreste comandados por Francisco Villa, Álvaro Obregón y Pablo González. Los Ejércitos el Noroeste y Noreste fueron los pilares militares y políticos del movimiento. En el centro y sur del país también surgieron grupos menos importantes que contribuyeron a la caída del poder huertista.

El Ejército del Noreste se integró en Coahuila, en 1913 a partir de los cuerpos militares irregulares formados por Carranza en 1911 y 1912 y con los ciudadanos armados del maderismo. Casi todos sus jefes compartían el proyecto liberal y modernizador de Carranza ya que fueron los primeros en apoyarlo. Este Ejército realizo una importante campaña militar en los estados de Coahuila, Nuevo León, Tamaulipas y San Luis Potosí.

El movimiento sonorense tuvo una evolución propia que al aliarse con el carrancismo le dio una gran fuerza a la revolución constitucionalista. Los sonorenses no solo aportaron una base geográfica y económica sino algo mucho más importante que fue un ejército exitoso y una tradición política que tiempo después sería decisiva.

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Las tropas del Ejército Libertador del Sur y de la División del Norte desfilan por la Ciudad de México. Francisco Villa y Emiliano Zapata asisten a una comida que ofrece el presidente de la Convención Revolucionaria, Eulalio Gutiérrez, en el Palacio Nacional. Fue en ese momento cuando el general Villa se sentó en la silla presidencial y el Ejército Convencionalista entra a la Ciudad de México.

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