Diego Portales, ¿Héroe o Villano?

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Con esta victoria, Chile se transformaba en una potencia militar a nivel latinoamericano, se creó un sentimiento nacionalista y se disolvió la Confederación Perú-Boliviana, logrando todos los puntos que buscaba el ex-Ministro del Interior.

Gonzalo Vial se refiere a Portales como un hombre que “creó una política enteramente nueva y original, que llamamos “portaliana”… ésta sería la base de la estabilidad y el progreso de Chile, en plenitud hasta el 1861.” Además menciona que: “El gobierno debía estar anclado en principios, no en personas. Y el mejor ejemplo de impersonalidad lo dio el propio Portales, con su desinterés absoluto por los honores y los cargos, que abandonaba tan pronto como podía hacerlo.”4

En el párrafo anterior Gonzalo Vial muestra a Portales como un verdadero líder de la República, un organizador de ésta. Una persona que no le interesaba que su persona trascendiera en la historia, al contrario todo lo hizo por amor a la patria, patria por la cual lucho de manera política.

Cabe destacar que Portales fue un hombre líder, con el carácter que necesitaba un país que estaba a puertas de su deseada independencia. Luchó a pesar las consecuencias y que las circunstancias no fueran las adecuadas, a pesar del poco conocimiento que se tenía en general sobre como formar una republica, él no descanso hasta lograr formar un República.

Como bien indica Benjamín Vicuña Mackenna en su libro “Don Diego Portales: juicio histórico; Portales y su juicio”: “Portales tenía carácter y prendas para ser el jefe y representante de la reacción colonial que se inauguraba entonces contra la revolución de la independencia, la que había llegado en 1828 a sus últimos resultados en Chile, planteando la República democrática que comenzaba a ensayarse, para llegar más tarde a convertirse en realidad”[3]

En la cita anterior, se explica que Portales era el hombre indicado, en el lugar indicado y en el momento indicado cuando se le necesitaba. Se necesitaba un jefe y ahí apareció, haciendo la realidad que era añorada por muchos, una República Democrática.

Concluyendo, Diego Portales, fue un político autoritario, pero no lo hizo para demostrar que tenía más poder que el otro o con otro objetivo. Su único objetivo fue su país, dejarlo con lo mejor que él podía brindarle y así lo hizo, con el ejemplo del Estado de Derecho, creación portaliana, utilizada hasta el día de hoy, según lo indica Gonzalo Vial.[4]

Finalmente, se puede dar respuesta a la pregunta del principio, portales, ¿Un organizador de la República de Chile o un político autoritario e impositivo? Según todo lo investigado, escrito y citado, se puede responder que Diego Portales fue un organizador de la República de Chile, un hombre que dio la vida por su patria.

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