El Milagro Mexicano ensayo

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Para esta urbanización se tenía que tomar en cuenta las actividades agrarias, de aquí surge una pregunta “¿Cómo alimentar a las grandes poblaciones concentradas en regiones geográficas tan pequeñas?”, dado esto, en el norte del país se aumentó la producción (principalmente de algodón destinado a la exportación) y así dar la posibilidad de adquirir maquinaria e insumos industriales para la mejora agraria. A pesar de la sequía suscitada en los años 1949-1958, el norte del país logro un crecimiento agrario logrando para los años 60’s una casi autosuficiencia alimentaria en el país, el cual se vio afectado por el descontento social debido a que los beneficios del crecimiento económico solo se veían reflejados en las grandes urbes.

Comparando el crecimiento económico de México con otras naciones en ese lapso de tiempo se puede notar que, el llamado “milagro mexicano” no fue muy notorio, además de ser un sistema financiero muy difícil de mantener (lo cual se notaría a inicios de los años setentas). Se podría bien comparar la economía mexicana de los años sesenta con otras naciones y se notaría que México logro un despunte y una separación de lo que fue anteriormente afirma Carlos Elizondo; “si podemos hablar de un milagro es más con respecto a nuestro pasado que frente a lo que otros países hicieron en la misma época”1 (Elizondo, 2013, pág. 104)

Ya hacia el año de 1965, comenzaban a salir a flote las notorias inconformidades sociales que dejaba a su paso el ya tan nombrado “milagro mexicano”, inconformidades que venían de cara a un México más urbano, industrializado y en ciertos aspectos, mal administrado, después de una devaluación del peso frente al dólar y la constante inflación se dejaba ver que el sistema económico era insostenible. El descontento social, que se notaba con las revueltas sociales. Tal descontento social se dio a notar en el año de 1968 con el movimiento estudiantil, que tendría su punto cumbre con la matanza de Tlatelolco en día 3 de octubre de 1968.

De igual forma se añade otro factor que propicio el deterioro del sistema económico, las empresas privadas tendrían que verse forzadas a ajustarse a los intereses políticos de la época, los cuales siempre estarían en primera instancia. Quien no se apegará a tales intereses perdería privilegios, prestaciones y demás facilidades que el gobierno Estatal pudo haber dado en un pasado.

Este deterioro político y económico tuvo su cenit a inicios de los años setentas, tiempo en el cual se detendría el constante crecimiento económico iniciado en los años 40’s. Esta industrialización acelerada, el crecimiento en los salarios, los aumentos de la población en urbes centralizadas solo desenmascararían la verdadera problemática mexicana, el poco conocimiento del estado mexicano para administrar la riqueza nacional.

A diferencia de otros países ya modernizados de esa época, México tenía una problemática bastante significante, su producción de bienes resultaba cara de mantener, añadiendo que tales bienes eran de precios elevados y de mala calidad por la aceleración de crecimiento, la cual causo un descuido en la calidad de tales productos.

A esto debe añadirse que, paradójicamente, el aumento del precio del petróleo (del cual la economía mexicana siempre a dependido en su mayoría) causaría un endeudamiento externo debido a que se esperaba un constante aumento en el precio del crudo, siendo todo lo contrario, ya que a la baja del precio del petróleo se comenzó a dar un alza en las tasas de interés desembocando esto en una fuerte crisis financiera (febrero de 1982).

Conclusión:

El “milagro mexicano” debe de verse de distintos puntos de vista (económico, político y social), para entenderse de una forma más sintetizada, a lo largos de los años cincuenta y sesenta se pudo observar un despunte importante de la economía y sociedad mexicana, que, ayudo a la modernización del país. Tristemente también puede observarse como el poder político ha llevado una línea horizontal en cuanto a su forma de gobernar, dando a notar siempre que la prioridad del estado es el beneficio de el mismo, no de la sociedad.

Debido a la apuración estatal de fijar una base industrial firme para la modernización se descuidó el sector social, el cual entraba en una nueva era, siendo este el pilar de toda transformación económica que pudiera tener el país.

Bajo mis argumentos, podría mal entenderse como el “milagro mexicano” como un simple acelerón económico que se dio debido a las condiciones externas y los sucesos históricos que se daban en esa época, más bien podría ser descrito como el paso de la sociedad mexicana al futuro y a lo que es hoy, ya que podría entenderse a la sociedad y política actual conforme vemos nuestro pasado.

Bibliografía

- Aguilar Alonso M. El milagro mexicano, México: Nuestro tiempo, 1970

- Aguilar Aboites Luis, Nueva historia mínima de México, El ultimo tramo, México, El Colegio de México, 2015