LA SEGURIDAD SOCIAL CONSTITUCIONALIZADA, PERO INSOSTENIBLE

...

y gas natural (materias primas), por tanto las reservas nacionales han crecido ostensiblemente, hay que reconocer que si la seguridad social fuera cien por ciento estatal, en muy poco tiempo se produciría una crisis de tal magnitud en este componente socio-económico que le causaría a la economía nacional un grave deterioro.

Esta constatación se la hace en el momento que se comprende que la diversidad sociológica y étnica es tan grande que se hace imposible la cobertura de necesidades de muchos estratos y etnias, pero además se multiplican las coberturas.

El aporte patronal que no es cubierto oportunamente por el mayor empleador que es el Estado, hace que se debilite la estructura fundamentalmente económica de la seguridad social del país en la actualidad; con seguridad sería mucho peor si la totalidad de esta seguridad dependiera del estado. Más del 70% de la población económicamente activa no tiene acceso a la seguridad social a corto plazo, es decir asistencia médica, medicación , cobertura de accidentes de trabajo y otras pertenecientes emergentes. Esta realidad contrasta seriamente con el 38% (únicamente) de población de la tercera edad que tiene acceso a las prestaciones a largo plazo, puesto que existen grandes cantidades de adultos mayores que luego de cumplir generalmente con trabajos artesanales no cuenta con una renta de jubilación.

La solidaridad, un principio inaplicable.- Dado que uno de los principales principios de la seguridad social es la SOLIDARIDAD, hay que referirse a la aplicabilidad o no del mismo.

Al hacer una revisión de la historia y la economía del país, se establece que un estado con sus recursos mal distribuidos y con una creciente tasa de envejecimiento de su fuerza de trabajo, amen de la falta de generación de fuentes de trabajo en los últimos diez años; más pronto que tarde se verá en la disyuntiva de cubrir las prestaciones a largo plazo o las prestaciones a corto plazo. Este dilema será producto de la nueva Ley de Pensiones, pues Bolivia jubilará más gente que la que ingresará a ser miembro de las actividades económicamente productivas, de este modo el estado deberá escoger, o una de las coberturas o echar mano de las reservas, lo que provocará graves problemas económicas.

La nueva Ley de Pensiones pretende resolver o prever este problema con el aporte solidario, lo que de por sí está demostrando que será un fracaso sin un colchón económico estatal.

Corolario.- De lo analizado se desprende que definitivamente no sólo se trata de constitucionalizar un derecho como es el que cada boliviano tiene de acceder a la seguridad social por constituir la única forma de evitar una migración de la fuerza de trabajo.

Si se planificara mejor la aplicación de este componente socio-económico de la sociedad en movimientos y cambios cíclicos, se podría controlar el crecimiento de la masa de jubilados y mejorar las prestaciones a corto plazo como la salud y otros, pero fundamentalmente en las actuales condiciones, la total estatización de la seguridad social, la haría insostenioble.