La evolución de la literatura desde la Edad Media hasta el presente.
Enviado por Helena • 18 de Junio de 2018 • 2.531 Palabras (11 Páginas) • 550 Visitas
...
de España lo que ocurría, al igual que el uso de las crónicas, como Naufragios de Álvar Núñez Cabeza de Vaca. Esto evidencia que la literatura no solamente ha evolucionado estéticamente, sino que se comenzó a usar con el propósito de informar además de expresar sentimientos. Por otro lado, la novela y el teatro renacentista llegaron a su punto culminante en el Siglo de Oro, lo cual era un periodo marcado por la transición de la literatura entre el Renacimiento y el Barroco. Adicionalmente, la novela se puede dividir en la novela idealizada y la novela realista. La novela se caracteriza por sus paisajes idealizados, personajes planos y un mundo irreal. Un ejemplo que presenta estas características lo es La Gitanilla, por Miguel de Cervantes. Por otro lado, la novela realista se caracteriza por personajes redondos, lugares reales, paisajes ambientados y tienen finales lógicos. Un ejemplo de esto lo es El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha, también por Miguel de Cervantes, quien se puede considerar como el genio transicional del Renacimiento al Barroco gracias al contenido de su obra. Esto hace que la misma sea una de las obras más representativas de este género literario. Igualmente, otra de las obras más representativas de la novela realista es el Lazarillo de Tormes ya que presenta a una sociedad con personajes más reales. Esto servía como una crítica a la sociedad y por eso es anónimo. Conjuntamente, el teatro del Siglo de Oro tuvo gran importancia en la época, pero esta se ve más en la literatura barroca.
Siguiendo el Renacimiento, el Barroco se caracteriza por el pesimismo y el desengaño que sentían las personas en la sociedad. Esto se debe a la crisis económica, las guerras, las epidemias y entre otros factores que obstaculizan las vidas de las personas de la época haciendo que miren al mundo de manera negativa. Adicionalmente, en la literatura del Siglo de Oro ya hacia el Barroco, como mencionado, el teatro floreció grandemente. La nueva comedia fue el género más innovador de la época y este se hizo sumamente popular gracias a varias características. Estas características incluyen: la mezcla de lo trágico con lo cómico, lo cual hace que reflejen la vida real con mayor exactitud; la ruptura de la regla de las tres unidades, las cuales son tiempo, lugar y acción. También incluían temas de gran importancia para la época: el honor y el amor siendo los más importantes. Estas características están presentes en obras como: Fuenteovejuna, por Lope de Vega; La vida es sueño, por Pedro Calderón de la Barca; y Burlador de Sevilla, por Tirso de Molina. Además del florecimiento del teatro, el Barroco se caracteriza por el culteranismo y el conceptismo. Primero, ambos son dos estilos opuestos en las cuales el Barroco se resume. El culteranismo se centra en la forma de las palabras, busca la belleza absoluta y utiliza en lenguaje culto. Su máximo representante es Luis de Góngora y Argote, su obra cumbre siendo Fábula de Polifemo y Galatea. Mientras tanto, el conceptismo se centra en el concepto o contenido de las palabras, busca lo nuevo y lo extraordinario, y utiliza un lenguaje conciso y breve. Su máximo representante es Francisco de Quevedo y Villegas, uno de los escritores más importantes de España. Concluyendo, el Barroco ocurre como consecuencia a los problemas existentes en la época, teniendo como consecuencia un gran auge en innovación literaria, lo cual evidencia la evolución en la literatura.
Para el tiempo en que el Renacimiento y el Barroco llegan a finalizar, surge un movimiento que busca recobrar e imitar el estilo artístico y literario de la época clásica. Este movimiento se conoce como el Neoclasicismo, que consideraba que las manifestaciones oscuras y difíciles del Barroco eran irracionales. El mismo reacciona contra la literatura barroca y entonces busca claridad y simplicidad en la literatura. Adicionalmente, la literatura neoclásica se caracteriza por su finalidad didáctica, lenguaje claro, personajes simples y el hecho de que todo estaba regido por normas para mantener la forma clásica. Esto se puede ver a través de las fábulas literarias por Tomás de Iriarte y las fábulas morales por Félix María de Samaniego. También se puede ver en las obras teatrales de Leandro Fernández de Moratín, siendo El sí de las niñas un ejemplo. Concluyendo, el cambio del arte por el arte del Renacimiento y del Barroco también evidencian la evolución literaria a través del tiempo.
Asimismo, el Neoclasicismo termina por el surgimiento de un movimiento Romanticismo. Este movimiento reacciona de manera revolucionaria en contra el racionalismo del Neoclasicismo y le da importancia al sentimiento. Este movimiento se caracteriza por el ansia de libertad, la exaltación del “yo” individual, el espíritu de rebeldía y la exaltación de la imaginación. También, a libertad de pensamiento y expresión es otro factor importante en esta época. Asimismo, los temas principales de este movimiento incluyen: la libertad, el amor, la naturaleza, la patria y la muerte. Los factores mencionados se pueden ver a través de las obras de José Zorrilla, Don Juan Tenorio siendo un ejemplo, y del Duque de Rivas, Don Álvaro o la fuerza del sino siendo otro ejemplo, en el Romanticismo español. También se puede ver a través de las obras de José Gautier Benítez y Manuel A. Alonso, siendo El gíbaro su obra más representativa en el Romanticismo puertorriqueño. En fin, el Romanticismo es una evidencia del cambio literario a través del tiempo ya que la literatura cambia a ser de rígida en el Neoclasicismo a más libre en este movimiento.
Siguiendo el Romanticismo, surge un movimiento literario que reacciona contra la subjetividad del Romanticismo para proyectar un retrato preciso de la sociedad. Este movimiento se conoce como el Realismo. Su origen se busca en la literatura medieval y la novela picaresca española. Además, la novela realista se volvió altamente popular gracias a su publicación en los periódicos de la época. Adicionalmente, las características de este movimiento, los cuales se pueden ver en las novelas realistas, son: visión objetiva de la realidad, reproducción fiel del lenguaje popular y de la sociedad mediante la descripción minuciosa, y temas cercanos al lector. Utilizando los temas populares, el autor analiza, reproduce y denuncia los males sociales. Estos temas incluyen: valores tradicionales versus valores modernos, éxodo del campo a la ciudad, la lucha por el ascenso social, adulterio, y lo cotidiano como su tema central. Todos estos factores se pueden ver en a través de las novelas como en: Fortunata y Jacinta de Benito Pérez Galdós, M’hijo el dotor de Florencio Sánchez, e Inocencia de Francisco del Valle Átiles. Estos son los máximos exponentes de España,
...