La relación de Dios, el hombre y el mundo

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Cualquier otro tipo de conciencia, que no este relacionada con la producción o consumo de bienes materiales es estigmatizada en nuestra sociedad actual.

El hombre debe darse cuenta que el consumo, el materialismo y la racionalidad, son ingredientes que nos alejan de la tranquilidad y la felicidad que todos buscamos. La espiritualidad, es decir el cultivo del espíritu, es un elemento fundamental en la vida de millones. Esto permite armonizar y complementar la existencia, dotándola de un sentido más trascendental, menos inmediatista y sobre todo menos egoísta, De esta manera formamos una conexión real con Dios, que se encuentra dentro de cada uno de nosotros.

Algunos nueroteologos han sugerido que el alma humana o la conciencia utiliza la glandula pineal (también conocida como el 3er ojo) como canal espiritual y a la molecula psicodélica DMT (que irónicamente es ilegal pero se encuentra presente en todos los organismos vivos) como un catalizador para ese mismo fin.

Pese a que se fortalezcan las teorías sobre la influencia de la glándula pineal para la experimentación teológica, aún quedan dudas por resolver como, por ejemplo, ¿por qué existen casos enfocados en la charla con un Dios que busca la redención y otros en que sólo marca el paso a través de la trascendencia espiritual?

Tal vez adentrándonos en el estudio del espíritu podremos responder estas preguntas.

Las posibles actitudes ante Dios, como explicación última del Universo, son básicamente cinco: el ateísmo (no Dios) y el agnosticismo (No creencia en lo divino, pero tampoco niega su existencia), el panteísmo (Dios igual a la Naturaleza), el deísmo (Dios relojero) y el teísmo (Dios judeo-cristiano)

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