Los problemas limítrofes que presenta Venezuela con Guyana se iniciaron hace más de un siglo

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Venezuela busca conquistar todo el territorio en reclamación ya que la mayor propiedad de recursos energéticos le pertenece pese a las diferencias fronterizas con Guyana, proveyó la mitad de su consumo de crudo a través de un acuerdo de PetroCaribe el cual lo integran 17 países más y organismo del cual recibe el 43% de la energía que consume.

Este problema será llevado al Parlasur (Parlamento del Mercosur) en Montevideo, Uruguay, escenario que se usará para presentar acuerdo a favor de la defensa de Venezuela sobre el Esequibo.

Por otra parte, también existen problemas fronterizos y marítimos con Colombia, siendo el más resaltante el desacuerdo limítrofe en el Golfo de Venezuela, pues este no es solamente de carácter diplomático sino también económico por los depósitos petroleros. Gran parte del Golfo pertenece a las aguas territoriales venezolanas, pero existe un pequeño segmento que corresponde a las costas de la Guajira colombiana, de allí parte la discordancia limítrofe entre las dos naciones. Una de las principales causas que mantiene el interés de Colombia en las aguas territoriales, sobre todo en la actualidad es la existencia de grandes reservas petroleras y gasíferas.

Las negociaciones limítrofes entre Venezuela y Colombia quedaron paralizadas desde hace unos seis años. La última declaración relacionada al tema de la situación limítrofe la hizo el ex presidente venezolano Hugo Chávez, quien para entonces había mencionado que la problemática debía ser resuelta lo antes posible. Sin embargo, dichas palabras quedaron a un segundo plano cuando la comisión negociadora venezolana se disolvió en el 2009, quedando entendido que la disputa entre ambas naciones aún permanece abierta.

Muchas palabras han sido pronunciadas acerca de las situaciones presentadas en cuanto a los problemas fronterizos que tiene Venezuela con las naciones hermanas, y hasta tanto no exista un tratado o acuerdo por escrito en el que quede plasmado un convenio amistoso, el problema seguirá vigente en el tiempo, generando disputas entre las partes, las cuales luchan y lucharán más que por territorio, por los recursos naturales que estos espacios ofrecen.