Características individuales de alto o bajo riesgo en los niños y jóvenes

...

Carlos Díaz, es un joven resiliente potencial. Presumiblemente su fondo familiar, particularmente en su vida temprana y su relación con su padre le han dado a su personalidad una fundación de seguro. Sus responsabilidades familiares, aunque interferían de alguna manera en su trabajo en la escuela le han permitido desarrollar un comportamiento importante pro-social y mejoraron su autoconcepto y autoestima. Tan importante es el interés especial que su profesor de estudios sociales ha mostrado en él. Ms. Bassett le interesa y apoya, acompañado con expectativas razonables le provee una relación sólida con un adulto que se preocupa. Más adelante su complacencia para modificar su salón y estilo de enseñanza motive responsabilidad para poder contribuir a su resiliencia. El maestro bilingüe de Carlos también ha ayudado, tal vez suficiente para mitigar el sesgo y actitudes de otros maestros.

Medio familiar: Como hemos visto el entorno familiar es probablemente uno de las más importantes influencias en el desarrollo psicosocial de los jóvenes. Las características de una familia positiva y entorno del hogar incluyen una laguna de hacinamiento físico, constantemente reforzado con reglas estrictas pero supervisión justa, y disciplina bien balanceada. El niño que tiene una buena relación con incluso uno de los cuidadores demuestra una mayor resiliencia. Estos factores indican apoyo adulto e involucración con el niño y son útiles en el desarrollo de la autonomía y autodirección que son cruciales para la resiliencia.

Patrones de sana comunicación también prevalecen en los hogares de resiliencia joven. Los modelos de los padres como habilidades de atender enfoque y orientación sustanciada para las actividades. Enfocado, flexible, bien estructurado, y la comunicación de tareas apropiadas llevan a la competencia académica y social en los jóvenes los niños en familias que acuerdan interacciones “activadas” (esos que dan coraje y apoyan la expresión del pensamiento independiente y permiten comunicación en un estilo dar y recibir entre los padres y los niños) tienden a exhibir competencia psicosocial. La familia también contribuye a la resiliencia de forma indirecta atraves de su influencia en los niños por las redes de apoyo. Algunos padres, por ejemplo, frecuente y selectivamente exponen a sus hijos alguna iglesia religiosa u organizaciones como chicos scout o chicas scout o club de 4H. Adultos en esas organizaciones dan apoyo útil que crea resiliencia.

Christie Carrer, a quien conocimos en el capítulo 3, puede ser resiliente. Ella emerge del estudio de caso como una remilgada, pedante y ligeramente desagradable chica. Su rol de Ángel en la familia lleva a Jason a tomar el rol de diablo, pero tal vez su adopción de este rol es lo que la va a salvar. Ella recibe un gran trato de atención, apoyo y refuerzo de parte de ambos padres. La seguridad que este apoyo provee puede ser insuficiente para protegerla en contra de la disfunción en la familia y prevenirla de desarrollar características que podrían ponerla en riesgo.

Características de personalidad: Los niños resilientes parecen tener ciertas características personales como habilidades en común, mejor comunicación verbal y habilidad social, un lugar interno de control, impulso de control y reflexión, alta autoestima y positiva auto consideración todo asociado con la resiliencia. Los niños resilientes también demuestran un buen desarrollo en el sentido del humor, una habilidad para transmitir gratificación, y una habilidad para mantener una orientación hacia el futuro. Presumiblemente estas habilidades reciben refortalecimiento para el desarrollo de resiliencia en un futuro. Ellos reciben reacciones positivas por parte de los miembros de la familia al igual que por extraños. Esta orientación social, autonomía, y auto dependencia, acompañado con una habilidad para buscar asistencia de los adultos cuando es necesario, reforzar y motivar el desarrollo a futuro de las habilidades que les permitirán tener éxito.

Denise Baker, quien conocimos en el capitulo 2, tiene una relación especial con su madre. Aparentemente ella ha desarrollado buenas habilidades de comunicación y tiene la habilidad de dar a conocer sus necesidades. Su dulce y calmado temperamento obtienen relaciones positivas por parte de su madre y de otros. Al mismo tiempo ha asumido el cuidado de su hermano menor. Esta responsabilidad a veces le frustra, esto mejora su autoestima. Estos factores de responsabilidad contribuyen a su resiliencia y pueden mitigar los efectos de su entorno en riesgo.

CARACTERÍSTICAS COMUNES DE LOS JÓVENES RESILIENTES.

Puntos de investigación para cuatro características de los niños resilientes expresan:

- Una proximidad activa a problemas de vida, que habilitan al niño a negociar experiencias emocionales peligrosas.

- Una tendencia para percibir dolor, frustración y otras experiencias constructivamente desestresantes

- La habilidad para ganar atención positiva por parte de otros

- Una fuerte fe que mantiene la visión de positividad y significado de la vida.

Garmezy añade una quinta característica: competencia social, en las escuelas y áreas cognitivas. Aparentemente estas características actúan como escudo protectores que permiten a los jóvenes evitar, regular, o lidiar con entornos adversos o condiciones de desarrollo.

Carlos Díaz, Christie Carter y Denise Baker son jóvenes potencialmente resilientes. Todos ellos tienen características personales que reflejan influencias de su entorno social y medio familiar pueden protegerlos del estrés, de las situaciones actuales y ayudarlos a evitar dificultades en un futuro. Interesantemente estas características de invulnerabilidad o resiliencia corresponden a habilidades específicas que distingue a los jóvenes de bajo riesgo de los de alto.

LAS HABILIDADES QUE CARACTERIZAN A ALTO RIESGO FRENTE A LA JUVENTUD DE BAJO RIESGO

Como resultado de nuestro trabajo en la enseñanza y el asesoramiento en riesgo los niños y adolescentes, en nuestras conversaciones con otros profesionales, y una extensa revisión de la investigación sobre los niños y jóvenes en situación de riesgo, se han aislado cinco fuerzas básicas o déficits que marcan la diferencia entre de bajo riesgo y jóvenes de alto riesgo. Llamamos a estas características el "cinco Cs de competencia":

1) Competencias escolares críticas

2)