El niño no es niño porque sea pequeño; es niño para llegar a ser adulto"

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Ya desde parte experimental se ha llegado a conclusiones tales cómo, que al realizar pruebas de inteligencia con un padre y su hijo se obtienen resultados muy semejantes en rendimiento. Según expresiones de algunos especialistas de la materia > claro está que no podemos sacar de margen el papel que juega el entorno y el tiempo. Se ha observado que de manera gradual va apareciendo un parentesco en el niño adoptado y que su nivel intelectual se va aproximando aún más al de sus padres adoptivos.

Otro punto a tomar en cuenta como relación a lo que influye en la inteligencia de los niños es el nivel social y económico de los padres. De hecho se encuentra mayor número de niños bien dotados en los ambientes económico-sociales elevados que en los bajos y de manera contraria más dificultades cognitivas en los más bajos, se podría argumentar pensando en que en este caso el factor herencia interviene, ya que si los padres tuvieron un nivel alto de educación pueden trasmitir esto a sus hijos, por otro lado podríamos hablar de el entorno y pensar que los niños provenientes de medios socioeconómicos favorecidos demuestran más capacidades cognitivas debido a que sus padres han tenido mayores facilidades que los de ámbitos desfavorables para darles un marco educativo elevado en donde estimulan y aportan al desarrollo de una manera significativa.

¿Qué sucede entonces con los rasgos de carácter? En realidad se halla menos correlaciones en este campo entre padres e hijos, es decir en el ámbito hereditario, en el terreno de la personalidad, del carácter se podría concluir que afecta de manera notable en el entorno. No se hereda la inteligencia, la memoria , el humor, la honestidad o el sentido de los negocios, muchas circunstancias de la vida podrían intervenir en la forma en como el individuo responde ante diversas situaciones.

A pesar de que podemos afirmar que el factor herencia interviene de una manera significativa en diversos campos de los niños, está claro que el entorno en realidad es quien juega un papel realmente importante, su entorno familiar, sus vivencias y sobre todo la educación que recibe determinaran la clase de persona que será en un futuro.Entonces no sería lógico justificar el comportamiento de un niño en registros de antecesores y frenar así el intento por guiarlo e instruirlo correctamente.Son los adultos (padres, cuidadores, familia, educadores) quienes se encargan en realidad de formar al individuo. De ahí la importancia de se generen entornos propicios para el aprendizaje y la formación, de que desde la familia se infundan bases solidas, completarías así con su educación institucional y con sus experiencias.

Claro está, aunque el campo social afecta en la facilidad de brindar una educación íntegra, no significa que quienes hacen parte de los menos favorecidos frenen la educación del menor, son sus propios padres y educadores quienes permitirán a estos tener un optimo desarrollo.