PROGRAMA DE DESARROLLO MOTIVACIÓNAL CON ESTUDIANTES DE PRIMER SEMESTRE DE DERECHO DE LA UNIVERSIDAD SIMÓN BOLÍVAR.

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Por lo planteado anteriormente, desde Bienestar Universitario, se hace importante la consigna que tiene la Universidad Simón Bolívar (….) sobre fortalecer y promover el desarrollo humano, contribuyendo en los procesos de formación integral, calidad de vida, y con una mención especial, la consolidación de la comunidad universitaria. Pues la consolidación de los estudiantes dentro de las instituciones de educación superior es una forma de enfrentar el fenómeno de la deserción.

La deserción de la educación es un fenómeno que ha sido estudiado desde diferentes perspectivas y áreas del conocimiento, como la sociología, la economía y la psicología entre otras (Ministerio de Educación Nacional, 2016). Para la psicología la deserción estudiantil es relativamente un objeto de estudio nuevo, en el cual se hace necesario seguir investigando, pues el primer modelo eminentemente psicológico en estudiar este fenómeno fue construido por Fishbein y Ajzen en la década de los 70 (Himmel, 2002), quienes plantearon que las creencias, las conductas previas, las actitudes sobre la deserción o persistencia y las normas subjetivas inciden en la deserción.

El presente plan de acción se convierte en una herramienta que busca aportar a la permanencia de la población estudiantil dentro del sistema educativo de la Universidad Simón Bolívar Sede Cúcuta, evitando el proceso de abandono, voluntario o forzoso, por parte del estudiante, bien sea por problemas económicos o dificultades académicas (Restrepo, 2011).

Objetivos

Objetivo General

Desarrollar un programa motivacional con los estudiantes de primer semestre del programa académico de derecho por medio de técnicas humanistas para el mejoramiento del desempeño académico y personal.

Objetivos Específicos

Favorecer la motivación intrínseca y extrínseca en los estudiantes mediante talleres vivenciales para el reconocimiento y valoración personal.

Aplicar mecanismos de motivación en los estudiantes por medio de talleres vivenciales para el favorecimiento del rendimiento académico y satisfacción personal.

Promover los procesos de esfuerzo - autonomía, asistencia - participación en las actividades académicas a través de talleres educativos para el mejoramiento académico y personal.

Marco Referencial

Marco Teórico

La educación actual muestra una gran desmotivación por parte de los estudiantes porque numerosos factores externos alteran en gran medida concluir con la formación, transcendiendo en su nivel de rendimiento académico, y viceversa (Ramos, 2014). De ahí que para el estudio de este fenómeno se cuente con el análisis de dos temas muy importantes, como son la motivación y el rendimiento académico, la explicación del término motivación se hace a partir de la jerarquía de las necesidades humanas de Maslow y la teoría de las necesidades de McClelland. Seguidamente, se aporta desde la teoría del aprendizaje autoregulado de Pintrich un análisis sobre el rendimiento académico.

Jerarquía de las necesidades humanas de Maslow

Al hablar de la jerarquía de las necesidades humanas, también se hace referencia al enfoque humanista, quien aborda la motivación desde diferentes perspectivas teóricas, gran parte de ellas fundamentadas desde las necesidades básicas planteadas por Maslow. La psicología humanista aspira a la trascendencia de las intervenciones clínicas y llegar al conocimiento del ser humano como un individuo dinámico y merecedor de sus méritos. En este sentido, el humanismo busca explicar y comprender apropiadamente a la persona, donde esta debe ser estudiada en su contexto interpersonal y social (Hernández Rojas, 1998, p. 102).

Referente a la evolución histórica de la motivación, Naranjo (2009) enfatiza en la capacidad que tiene el ser humano para reconocer y fortalecer sus características favorables, siendo la necesidad un vehículo que lo oriente al accionar, es decir, un motor motivacional que prioriza según la satisfacción. Asimismo Trechera (2005) afirma que la tendencia del ser humano a la autorrealización es una característica propia de los individuos por mantenerse vivos, esto desde la realidad de cara al deseo; es decir que por el hecho de estar vivos, se está dirigiendo constantemente hacia la búsqueda de supervivencia y satisfacción.

Una de las teorías más conocidas sobre motivación es la jerarquía de las necesidades propuesta por Abraham Maslow, quien resolvió que las necesidades humanas son una jerarquía en las que unas son prioritarias y las otras se satisfacen solo cuando estás están cubiertas, en otras palabras, la motivación surge a partir de necesidades que se establecen jerárquicamente relacionadas con el ser humano, como ser biológico, que asegura su sobrevivencia, como ser social digno de valoración y estima orientado a la autonomía, la independencia y el autocontrol (Maslow, 1943).

La insatisfacción de las necesidades planteadas por Maslow (1943) genera un robusto impacto emocional, pues suplir estas necesidades permite el desarrollo de nuevas posibilidades y, en consecuencia, mantiene viva la tendencia orientada al deseo de la autorrealización del ser humano, es por esto que las necesidades se clasifican en forma de pirámide invertida, y estas requieren de un orden base que lleva a la satisfacción de necesidades más altas, esto dependiendo del potencial. La jerarquía de necesidades propuesta por Maslow (1943) es la siguiente:

Necesidades Fisiológicas.

Maslow (1943) afirma que las necesidades fisiológicas son aquellas de origen biológico que necesitan de un mínimo vital para funcionar y que se orientan hacia la supervivencia del hombre; son consideradas como las necesidades básicas e incluyen hábitos esenciales como: necesidad de respirar, de beber agua, de dormir, de comer, de sexo, de refugio.

Apoyando el postulado de Maslow, Elizalde, Martí y Martínez (2006) hacen una aproximación del término necesidad hacía la intencionalidad, la emotividad y la racionalidad del ser humano, siendo las necesidades fisiológicas un reconocimiento de características físicas de carácter circular, por lo que aseguran que estas necesidades son de alimento, descanso, abrigo, pero desprestigia la respiración como en algún momento se planteó, siendo este un acto involuntario del ser humano y no exige una necesidad de movernos hacia determinada saciedad.