Herramientas para el abordaje de los adolescentes

Herramientas para el abordaje de los adolescentes

¿Cuál es el rol de los adultos frente a los adolescentes? ¿De qué manera podemos

acercarnos y contener sus desbordes emocionales? ¿Cómo comunicarnos con ellos sin

morir en el intento (y sin necesitar un escudo)?

Bien, vayamos por partes.

Como primera consideración, debemos comprender que el proceso de cada sujeto es

distinto, varía en duración e intensidad. Pero como adultos, no podemos olvidar que

debemos tener siempre ojos y oídos alertas, bien abiertos y receptivos. Eso nos

permitirá empatizar con el adolescente con el cual nos vinculamos, y para ello también

es indispensable despojarse de nuestro adolescente interno: ellos no son nosotros,

precisamente son ellos tratando de descubrir quiénes son y qué lugar ocupan en esta

sociedad que los alberga, pero a veces hace lo posible por sacarlos del sistema y

negativizarlos.

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Luego, contemplemos que lo que exigen los adolescentes es libertad, respeto por su

espacio, comprensión de las distancias generacionales, confianza por parte de los

padres y de sus referentes… están intentando, dentro de su grupo de pertenencia e

identificación, afirmarse como seres distintos entre sí.

El mayor reto al que nos enfrentamos los adultos es la aparente “pérdida de autoridad”.

Pero yo me pregunto y los invito a reflexionar: ¿esto es realmente así, o lo que ocurre es

que nosotros fuimos parte de épocas donde el autoritarismo estaba a la orden del día,

entonces no concebimos que si decimos A el adolescente retruque B?

Es por ello que se vuelve necesario que los adultos se enfrenten al reto de la

adolescencia exponiendo sus argumentos, justificándose y promoviendo acuerdos

negociados, porque no es cierto que el adolescente no respete la autoridad; lo

verdadero es que esta debe ganarse, porque en realidad el adolescente cuestiona la

autoridad porque necesita afirmar su personalidad rechazando las normas.