“La más antigua de todas las sociedades. Y la única natural es la familia”

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social, familiar, o personas cercanas. Lacan va más lejos de su exhaustivo análisis de Schreber y concluye que el mecanismo típico de esta singular patología está constituido por la denominada forclusión, es decir, la no inscripción de la metáfora paterna.

Ésta estaría formulada a la manera de una substitución significante, en la medida que provenga de una concatenación lógica de sus términos, aunque teniendo en cuenta que la condición será la que cada uno de ellos ajustará en la medida en que pueda desplazar al interior, es decir substituirlo. De esta manera podría afirmarse que en Schreber, se da la metáfora paterna, es decir la que substituye al nombre del padre el lugar de la madre simbolizada. Lo que más impresiona a Lacan es el interés que presta Schreber, a la palabra. Lacan destaca la focalización en los fenómenos de palabra. El psicótico manifiesta una atención por el registro del lenguaje como tal, Schreber, tiene que vérselas permanentemente con fenómenos de palabra, esas palabras nunca cesan, lo invaden, llegan desde todas partes y, sobre todo le conciernen, es decir se dirigen a él

Maurits Katan es un psicoanalista de origen holandés instalado en USA después de la Segunda Guerra Mundial. Nos habla sobre un concepto diacrónico referido a una fase inicial, en la que no se evidencia la sintomatología propia de las psicosis. El periodo prepsicótico, es un periodo de transición, como señala en un texto de 1954 titulado “La importancia de la parte no psicótica de la personalidad en la esquizofrenia”. Antes de que el paciente adquiera síntomas psicóticos tan destacados como delirios, alucinaciones, atraviesa por un periodo que se desvía de la normalidad, pero no es patente la característica principal de una psicosis, es decir la pérdida de contacto con la realidad, Katan considera que la serie de síntomas en el periodo prespsicótico, su imposibilidad de dormir, su ansiedad, sus pensamientos suicidas, etc. constituían una defensa contra la aparición de su tendencia homosexual, su impulso hacia la feminidad, que culminó con la aparición de las poluciones nocturnas.

Resumiendo estas similares posiciones y compatibles encontramos que, en última instancia Freud ve en la paranoia un mecanismo de defensa contra fuertes pulsiones de etiología homosexual mientras que la interpretación lacaniana, estaría dada por el deseo y el significante de la figura del padre. Lacan, encuentra el mecanismo típico de la paranoia, este sería la forclusión, es decir la no-inscripción de la metáfora paterna, y Katan, nos permite distinguir las reacciones neuróticas y las prepsicóticas, es decir nos ayuda a comprender la estructura del delirio y la alucinación.

El delirio, como ya lo dijimos en varias oportunidades, aparece retrospectivamente para dar significación a la falta de sentido inicial, para el paranoico, no se tratará pues sólo de comprender, sino de comprenderlo todo, esta es la única salida que se le ofrece y no ha de cerrarse, el delirio, aun cuando parezca estabilizarse en una construcción precisa y elaborada, continuará siendo una formación imaginaria en equilibrio precario, siempre debe fortalecerse con una certeza.

Bibliografía

• Freud, S.: “Neuropsicosis de defensa”, Obras completas, vol. 11 Buenos Aires, Amorrortu Editores (AE).

• Lacan, J.: “De la psicosis paranoica en sus relaciones con la personalidad, México, Siglo XXI, 1979.