El efecto de las salvaguardias en el consumo nacional.

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El ecuador no es un país que se pueda mantener con su propia producción ya sea porque aún no está preparado para producir todo lo que su gente necesita, pero es importante evitar la fuga de divisas, al nosotros restringir el consumo de productos de otros países e incentivamos al consumo de los propios, se logra evitar que ese dinero que se gastaría en productos quede en el mercado nacional y no vaya al de otros países, el dinero que a su vez está en constante circulación y a su vez volverá a nosotros de una forma u otra.

Como ya se había dicho para que las empresas puedan satisfacer al mercado ecuatoriano y permanecer en la competencia luego de la salida de las salvaguardias, es necesario que haga una buena inversión y continúe haciéndola para la mejora en la producción, estas inversiones constantes pues la tecnología esta constante mente cambiando.

El ecuatoriano necesita ver para creer, por eso cuando la industria nacional mejore su producción y el ecuatoriano vea, sienta y crea de verdad que nuestro producto es de calidad e inclusive mejor que algunos importados, con precios competitivos. El gobierno ha implementado campañas en donde se busca incentivar el consumo, estas campañas son por ejemplo “Primero Ecuador, Mucho mejor si es Hecho en Ecuador”, etc. Aunque estamos por buen camino a cambiar la mentalidad de consumo, aún falta mucho se necesitan botar las viejas creencias que lo de fuera es mejor y lo nuestro es malo.

Conclusión:

En Ecuador la falsa creencia que lo de afuera es mejor, le ha estado clavando un puñal lentamente en el corazón financiero, mientras las personas importábamos ropa de Estados Unidos o de Europa, nuestras fábricas cerraban o vendían a precios insignificantes para mantenerse a flote, también se podía dar el caso de que nuestras fábricas vendiesen prendas de vestir a empresas internacionales, esas marcas internacionales sedaban el gran trabajo de poner un simple sello y de subir su precio a un 200%, bueno mientras hacemos que economías de otros países crezcan por consumir sus productos y la nuestras permanezca estancada por el poco consumo que le damos, sería un loco si un carnicero compra la carne de otro simplemente porque cree que es mejor, dejando dañar la suya. No tenemos el derecho de quejarnos de la economía del país, somos nosotros los causantes de la misma, es de nuestro derecho desear un mejor país con una economía más estable, pero también es de nuestra obligación trabajar y hacer que esta mejore, uno de los escalones para mejorarnos como ecuatorianos es preferir lo nuestro, consumir lo que nosotros producimos sin permitir que nuestros vegetales se pudran o que nuestra producción de fábrica quede en bodega.

Como dijo Pepe Mujica, “cuando compras algo no lo compras con dinero, lo compras con el tiempo de vida que gastaste para conseguir ese dinero”, entonces nosotros cuando compramos algo importado, estamos exportando nuestro tiempo y trabajo, no podemos dejar de consumir pero es mejor que ese tiempo y trabajo se quede en nuestra tierra.