Homicidio Tesina

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solía ser la de muerte, en cuanto a los delitos privados la ofensa era un particular y su persecución dependía del ofendido y de que este la hiciera valer ante los tribunales.

Los delitos privados se dividían según la fuente que los sancionaba ya fueran civiles o delitos pretorios.

Justiniano en sus instituciones menciona los cuasidelitos que son actos ilícitos que el derecho civil no considera como delitos pero que sin embargo se concedía a la víctima una acción en contra del autor del ilícito para obtener un pago de manera pecuniaria.

Con estas dos interrogantes empezaremos a realizar nuestra tesina

¿Qué es muerte?

La muerte es la cesación definitiva e irreversible de la actividad cerebral del ser humano.

¿Qué es homicidio?

Homicidio es la privación de la vida causada a una persona por otra.

Antecedentes históricos nacionales

Durante la etapa prehispánica el homicidio era sancionado a través de la pena de muerte ya que en esta etapa el derecho decía que las personas no estaban facultadas para realizar justicia bajo sus mismos métodos.

En cuanto los aztecas como en casi todos los pueblos de la antigüedad en estas culturas prehispánicas el derecho penal era muy severo, existían delitos y penas que se aplicaban a los delincuentes, uno de los principales delitos era la traición al soberano ya que se daba en contra de la seguridad del imperio en cuanto al homicidio era castigado con la muerte, existiendo la posibilidad de que la viuda de la víctima solicitara la esclavitud del homicida a su favor, así mismo existían diferentes tipos de indemnizaciones para los afectados de los delitos, se tipificaban los delitos de fraude, abuso de confianza, aborto, el cual se castigaba con la pena de muerte para la mujer que lo cometía así como las personas que le ayudaban ya que se consideraban cómplices del delito, de igual forma se distinguía entre los delitos dolosos es decir tenían claramente las agravantes en los delitos castigándolos igual severamente con la pena de muerte.

En cuanto a los delitos culposos a estos se les daba un trato un poco más benévolo ya que los delincuentes eran tratados como cómplices o encubridores otorgando una indemnización a favor de las víctimas. En los casos en que participaba un noble el castigo era más severo que si el delincuente era plebeyo (Historia del derecho mexicano de Pérez de los reyes marco Antonio pp 98-103 editorial Oxford).

Basándonos en el sistema legal las audiencias podían ser públicas o privadas, está decisión estaba en las facultades de los jueces.

Existían cárceles las cuales estaban fabricadas de madera y se les denominaba “telpiloyan” que significaba “lugar de presos” así mismo la pena de muerte se ejecutaba atreves de diversas formas como podrían ser el ahogamiento, ahorcamiento, lapidación, los sujetos del delito eran obligados a realizar trabajos forzados hasta su muerte como podría ser el apaleamiento, degollamiento o desgarramiento del cuerpo, de todo lo anterior se desprende que el pueblo azteca y en general los pueblos de Mesoamérica tenían un alto sentido de la justicia así como severas penas para la comisión de los delitos, el encargado de aplicar las leyes era el estado por lo cual ha sido merecedor de elogios por los diversos estudios del derecho ya que es de admirarse la gran organización que tenían desde aquella época.

Para el Código de 1871 se estableció por primera vez que el homicidio se divida en simple y calificado. El primer Código Penal español es de 1822 y sirvió como base para la elaboración de otros Códigos en América, En México Independiente se empezaron a dar disposiciones en materia penal así como la regulación en cuanto a las prisiones y fue hasta 1871 que se promulgó el Código Penal para el Distrito Federal y territorio de la Baja California sobre delitos de fuero común y para toda la República sobre delitos contra la federación, éste empezó su vigencia en 1872 y se le conoció como el Código Martínez de Castro, fue hasta 1912 que los legisladores se dieron a la tarea para modificar este Código, más estos trabajos quedan concretados hasta 1929 con el nuevo Código Penal para el Distrito y territorios federales.

(Historia del derecho mexicano de Pérez de los reyes marco Antonio pp103-105 editorial Oxford).

El homicidio en México

Mariano Jiménez Huerta nos dice que el homicidio “es el delito típicamente ofensivo de la vida humana e implica la más negra estrella de la constelación penal”, mientras que en la doctrina mexicana se menciona que el tipo penal del homicidio es “un delito meramente objetivo ya que la acción principal es, privar de la vida a un ser humano”.

Mientras que la definición de homicidio para la real academia de la lengua lo considera “la muerte causada a una persona por otra por la común ejecutada ilegítimamente y con violencia”.

Impallomeni, nos dice que consiste en la violación de una norma jurídica, o sea, en la violación de una disposición de la ley, que es necesariamente injusto.

Carrara define el homicidio como la muerte causada por otro, por lo común ejecutada ilegalmente y con violencia.

En la gran mayoría de las culturas el homicidio ha sido calificado como un delito grave dejando claro la posición tanto de los romanos al respecto como el tratamiento que se le daba en la cultura prehispánica en especial los aztecas que lo castigaban con severidad.

Homicidio es el delito de privar o de quitarle la vida a otra persona el cual su definición etimológica “homo” que es hombre y “eidium” que se refiere a matar, para el código penal tiene gran relevancia ya que es uno de los delitos que más impactan a la comunidad, razón por la cual desde las más antiguas culturas se castigado de manera severa, en la actualidad nuestro código penal para el D.F. establece una pena de prisión de 8 a 20 años para este delito y que se puede incrementar si existe alguna de las agravantes que la ley prevé.

En la religión existe una norma de las más importantes, es considerado uno de los principios ético-religioso al igual que se encuentra en todos los códigos penales del mundo, esta máxima es conocida como “no mataras”

Desde la época colonial se le tenía considerado como delito y se regían por las leyes de España en donde se le daba más importancia a la voluntad del sujeto activo es decir si existía