Repensar la libertad para recuperar la Política

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Nuestra capacidad de actuar nos distingue de los animales. Para Arendt actuar y ser libre es lo mismo. “Se es libre cuando se actúa, no antes y no después”. Si entonces recordamos que la política es la acción del hombre, nos queda claro la conexión que mantienen la libertad y la política. Ya decía Aristóteles cuando hablaba de la Polis y del Zoon Polítikon, que el espacio de la política, es decir lo público, es para hombres libres. Ahora nos damos cuenta que el sentido de la política se ha extraviado y con él también el de la libertad.

En el México actual se sigue con la idea de la libertad individual que no es otra cosa que la libertad individual económica. De igual manera sigue en pie el viejo paradigma de que menos Estado, lo que se iguala a menos política, es igual a más libertad. Han logrado que celebremos la libertad de elección, que principalmente es la libertad de escoger qué voy a consumir. Han logrado que asumamos que libertad es algo individual, algo que me aísla de los demás. Han logrado que la flexibilización laboral o las privatizaciones sean vistas como un aumento de libertad para las personas. Y sobre todo han logrado que la Política sea visto como un enemigo de la libertad.

Arendt advierte que el totalitarismo nos ha robado la capacidad de actuar y de usar nuestra espontaneidad. En México el régimen autoritario junto al neoliberalismo ha provocado un alejamiento de la política. Hago un llamado sobre todo a los jóvenes de nuestro país. La única manera de ser libre y recuperar la política, es hacer política. Para romper las cadenas del neoliberalismo que tiene a tantos jóvenes en desesperanza es necesario repensar la política. Recuperar su sentido original. “El sentido de la Política es la libertad, sin libertad la Política no tiene ningún sentido.” (Politik und Freiheit, 1958)

Bibliografía

Hobbes, Thomas. 1999. El Leviatan. Buenos Aires : Alianza, 1999.

Politik und Freiheit. Arendt, Hannah. 1958. Munich : s.n., 1958.