Crónica. Humedal el cortijo(Cali). Medios/Metrocali

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Después de terminado el recorrido y cuando ya el señor Nicolás Orejuela se había marchado, Yamileth Rojas una miembro de la comunidad también se pronunció antes los inconvenientes que tuvieron con los medios de comunicación. En entrevistas pasadas los representantes de la comunidad expresaron su problemática de la mejor forma posible, presentaron argumentos válidos frente al desastre que ocasionaría la intervención en el humedal. Sin embargo, a quienes estaban en contra de la construcción solo les otorgaban cinco minutos en la pantalla mientras que a Nicolás Orejuela le daban un espacio de veinte minutos. Fue así como Yamileth llegó a la conclusión de que son los medios los que desinforman a las demás personas. Para ella hubo una constante manipulación del discurso pues los medios solo mostraban las escenas en las que la comunidad gritaba y peleaba. Me pregunto entonces, el que no sabe ¿a quién le va a hacer caso: al que habla pausado, calmado, que se supone tiene coherencia en lo que dice o, al que está gritando (aunque éste tenga razón)?

Ricardo Rincón, otro vecino del sector, resaltó el pequeño error que algunos medios cometieron. Al decir que los habitantes del Valle del Lili estaban en contra del progreso de Cali solo reiteraron la desinformación o manipulación que tienen los “periodistas” de hoy. Ante esto Ricardo afirmó que la comunidad jamás ha querido tumbar el proyecto de la terminal del sur, lo que ellos pidieron desde un comienzo fue la reubicación. Desafortunadamente varios de los periodistas que estuvieron en el sector son “parceros” de la alcaldía que solo han querido desviar la atención.

La Comunidad sintió que los medios de comunicación con mayor alcance en el Valle no les prestó la ayuda necesaria. Los protestantes van a seguir contando con la manipulación de los medios y de la alcaldía; seguirán escuchando mentiras y enfrentándose a irregularidades.

Pero tengamos fe porque la unión hace la fuerza.

¿Una fuente de vida será inundada por toneladas de cemento? ¿Los árboles serán arrancados de raíces? ¿La madre tierra gritará de dolor mientras su sangre es, una vez más, derramada por culpa de la ambición? La humanidad está ciega y por más que se intenta alumbrar con la llama del amor y la verdad, las almas oscuras y corroídas por la corrupción, se niegan a ver. Sus ojos han sido devorados por el parásito individualista.