Dictadores del siglo XIX
Enviado por tolero • 12 de Diciembre de 2018 • 3.587 Palabras (15 Páginas) • 303 Visitas
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Crueldad y masacres de Santana
El dictador a su llegada a la presidencia exigió la inclusión del artículo 210, una monstruosidad jurídica que lo facultaba para no rendir cuentas de sus actos. Legalmente, el artículo 210 lo hacía un dictador, y Santana con frecuencia se amparó en él para ejecutar a quienes se atrevieran a desafiar el orden.
El primer episodio de este género se produjo después de la proclamación de la constitución que dispuso el establecimiento de tribunales especiales, uno de los cuales condenó a muerte a María 'Trinidad Sánchez, tía de Francisco del Rosario Sánchez, a un hermano de éste y a dos personas más, todos ellos ejecutados el 27 de febrero de 1845, en conmemoración macabra del aniversario de la independencia, acusados de conspiración contra Santana. Años más tarde se descubrió una nueva conspiración encabezada por el secretario de Interior, Joaquín Puello. De nuevo se pusieron en movimiento los trámites judiciales extraordinarios, y Puello, su hermano Gabino y otras personas fueron fusilados. Incluso el robo a pequeña escala cayó como en esta prescripción y como advertencia, el anciano Bonifacio Paredes fue fusilado en El Seibo acusado de haber robado un racimo de plátanos.
El dictador se enfrentó incluso a la Iglesia, al rechazar peticiones de que se le devolvieran los bienes que le habían sido confiscados por los haitianos.
No obstante el liderazgo que mantenía el dictador, los baecistas se dedicaron a conspirar, dificultando las actuaciones gubernamentales de Santana. En una de las conspiraciones participó el general Antonio Duvergé, quien fue juzgado en El Seibo y fusilado junto a su hijo, un acto que estremeció la conciencia del país a causa de la importancia que había tenido Duvergé en las campañas contra los haitianos. Particularmente en la ciudad de Santo Domingo se creó un ambiente hostil contra Santana.
Al regresar nuevamente al poder encontró el país en condiciones críticas, y Santana y sus ayudantes concibieron la anexión a España. Hasta entonces Santana había sido partidario de la anexión a Estados Unidos, por cuanto percibía que esta potencia tenía más futuro en la región. Ahora bien, las tentativas que había esbozado a favor de Estados Unidos habían fracasado por la intervención de los cónsules europeos. Santana nunca había abandonado su concepción anexionista, pues no creía en la posibilidad de que el país marchara por su cuenta y carecía de un concepto de nación. España era en verdad la solución ideal porque nunca dejó de considerarse un español. Más adelante se firmaron acuerdos entre Santa y España y se consumó la anexión a finales 1860, quedando Santana al frente de la administración local con el titulo de capitán general.
Finales de la dictadura de Santana
Algunos de los funcionarios españoles mostraron oposición ante la dureza de Santana y desaprobaron los fusilamientos, lo que introdujo un primer factor de malestar en el flamante capitán general dominicano. A los pocos días del régimen anexionista santana tuvo conflictos con los burócratas españoles y el gobierno español mantuvo prerrogativas autocráticas y ahora el antiguo dictador, acostumbrado a detentar poderes absolutos, se encontraba en una posición de virtual prisionero de la maquinaria de funcionarios españoles. Como no pudo obtener nuevamente el poder presentó su renuncia con la escusa de que estaba enfermo. Humillado y decepcionado, retornó a El Prado, el lugar de sus ensueños.
Pocos días después de haber llegado a la ciudad, el 14 de junio de 1864, Santana falleció repentinamente.
Dictadura de Buenaventura Báez
La riqueza de su padre y su talento le facilitaron una temprana incursión en la política haitiana como representante de la región de Azua. Además de la afición por la política, Báez mostró interés por los negocios, al igual que su padre. Gracias a sus dotes e influencia, a inicios de 1843 Buenaventura Báez fue electo representante de Azua a la asamblea constituyente. La propuesta más osada que presentó Báez en esa ocasión fue que se derogara la cláusula constitucional que estipulaba que ningún blanco podría ser propietario de bienes en territorio haitiano.
Los trinitarios dirigidos por Francisco del Rosario Sánchez establecieron una alianza con un sector de los conservadores encabezado por Tomás Bobadilla, La progresión de los trabajos del grupo de Báez. Al saber de las gestiones de los trinitarios, Báez, quien tenía buenas relaciones con los funcionarios haitianos, denunció a Gabino Puello, cuando éste llegó a Azua con el manifiesto del 16 de enero. Intentó oponerse a ella en Azua, razón por la cual fue apresado y enviado a Santo Domingo. Aliado de su jefe Pedro Santana, con quien estableció buenas relaciones.
Báez fue electo para la asamblea que sesionó en San Cristóbal y aprobó la primera constitución de la República Dominicana, el 6 de noviembre de 1844. Báez se inspiró sobre todo en la Constitución de Estados Unidos, aunque tomó en cuenta también la Constitución haitiana. El documento aprobado todavía no tenía un carácter exactamente liberal-por ejemplo, estatuía restricciones al derecho de elegir y ser elegido.
Presidencia de Báez
Báez fue el primer presidente que cumplió el periodo para el que fue nombrado, algo que, en el siglo XIX, solo pudieron volver a lograr él, en una ocasión, y los presidentes posteriores a 1880, Respetó la libertad de prensa y disminuyeron los rencores que había dejado la gestión dictatorial de Santana. A pesar de la escasez de recursos, se preocupó por el desarrollo de la educación, se fundó el Colegio San Buenaventura que, aunque no tenía nivel universitario, reunió a los espíritus más selectos del país y contribuyó a formar la generación de intelectuales jóvenes que siguió al nacimiento de la República. . Primeramente, ofreció al clero compensaciones y un trato distinto del que le había estado dispensando Santana. En segundo lugar, procuró obtener el apoyo de los cónsules europeos, con el fin de cuestionar la posición pronorteamericana de Santana. Adicionalmente, atrajo el apoyo de la juventud liberal y culta de la ciudad de Santo Domingo, que abominaba el absolutismo de Santana.
Durante el período de cosecha, la cotización del papel moneda se revalorizaba porque aumentaba la cantidad de oro en circulación a causa de los envíos que realizaban los comerciantes extranjeros. Báez dispuso una emisión de pesos nacionales en papel con el fin declarado de
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