El Programa de Desarrollo Humano Oportunidades y la Nueva Gestión Pública

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La cuarta generación empieza en el año 2001 cuando el PROGRESA cambia de nombre a Programa de Desarrollo Humano Oportunidades, con la incorporación de un componente adicional a los tres que ya existían, Jóvenes con Oportunidades enfocado a evitar la deserción escolar en el traslado de la educación media superior al nivel superior.

2.- El Programa de Desarrollo Humano Oportunidades[1]

A fin de dar una mejor idea de las líneas de atención y con base en las reglas de operación del programa 2008 se describen sus principales componentes.

El componente de alimentación se integra por complementos alimenticios con contenidos vitamínicos básicos en la etapa de crecimiento en la niñez, elaboradas por la Secretaría de Salud. La distribución se realiza a través de la cadena de tiendas rurales y urbanas con que cuenta DICONSA (empresa de participación pública mayoritaria) en el territorio nacional, desde éstas se entrega a las unidades médicas para que se repartan a cada familia beneficiaria, con la tarea de que cada madre de familia suministre estas papillas a los niños. Adicional a estos complementos alimenticios se entregan apoyos monetarios bimestrales dirigidos a la obtención de alimentos frescos y nutritivos para garantizar la alimentación sana de la familia. La entrega de estos recursos se realiza en efectivo mediante la red de sucursales y cajeros automáticos del Banco del Ahorro Nacional y Servicios Financieros (BANSEFI) y a través de las oficinas de Telecomunicaciones de México (TELECOMM). Por su parte la Secretaría de Salud en uso del componente de salud, que abordaremos más adelante, imparte talleres de nutrición a las madres de familia beneficiarias induciendo en ellas la sana alimentación como un elemento sustantivo en el desarrollo de los hijos.

El componente educación está en consonancia con el artículo tercero de la Constitución de los Estados Unidos Mexicanos que garantiza el acceso y gratuidad de la educación básica. Los elementos de los que se sirve son las becas educativas, que se otorgan a niñas y niños que vivan en familias en situación de pobreza extrema, que estén inscritos cuando menos al tercer grado de primaria o en grados subsecuentes hasta la secundaria. Los apoyos son entregados hasta por un máximo de tres hijos por familia, no importando los grados que cursen siempre y cuando se mantengan estudiando. Esta beca es entregada a la madre de familia en efectivo a través de la red de instituciones financieras y de telecomunicaciones que ya se mencionaron en el párrafo anterior. Este componente tiene un enfoque de género ya que las becas son más altas para niñas que para los niños, con la intención de contrarrestar la deserción escolar histórica que se observa en las niñas al entrar a la adolescencia. El componente educativo es compartido por la Secretaría de Educación, el Consejo Nacional de Fomento Educativo y con los gobiernos de los estados a través de los servicios educativos descentralizados o propios de los gobiernos de los estados. Como complemento a la beca se entrega un apoyo ya sea económico o en especie para la adquisición de útiles escolares al inicio de cada ciclo escolar, dependiendo de la entidad educativa que atienda a los niños beneficiarios.

El componente salud consiste en proporcionar de manera gratuita el paquete básico de salud que se apoya en la cartilla de atención que posee cada persona en donde se lleva el control de acciones individuales; se imparten talleres de prevención, priorizando la nutrición, la promoción de la salud y la prevención de enfermedades, dirigidos a las madres de familia, niños y jóvenes estudiantes. Las instituciones que garantizan la prestación de estos servicios son la Secretaría de Salud (SS), quien diseña los complementos vitamínicos ya mencionados en el componente alimentario, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y las autoridades de salud en los estados, para lo cual cuentan con presupuesto propio y etiquetado para ser ejercido en este programa.

El cuarto componente integrado al modificarse el programa en el año 2001 es Jóvenes con Oportunidades que viene a ampliar la cobertura al llegar a estudiantes del nivel medio superior, que ya son beneficiarios del programa desde el nivel básico y se mantienen por debajo del umbral de pobreza extrema. Incorpora un beneficio adicional a los que ya se mencionaron anteriormente, la creación de un fideicomiso con una cantidad determinada de dinero que se incrementa por año avanzado en la preparatoria o bachillerato y se activa al terminar estos estudios. Los objetivos que busca este componente son que el joven cuente con dinero para matricularse en la universidad y apoyar sus gastos, tener un monto mínimo para iniciar un negocio o para inversión inicial en la adquisición de una vivienda.

El componente energético incorporado al programa en el año 2007 consiste en entregar de manera bimestral un apoyo monetario mensual a las familias beneficiarias, para compensar los gastos realizados en el consumo de fuentes de energía (luz, gas, carbón, leña, combustible, o velas, entre otros).

El componente para adultos mayores recientemente incorporado se entrega bimestralmente a los adultos mayores, integrantes de las familias beneficiarias, con una edad de 70 años o más, que viven en localidades de más de 2,500 habitantes, para mejorar sus condiciones de vida.

Oportunidades como programa de combate a la pobreza extrema ha tenido impactos indirectos que fortalecen la posición de la mujer, ya que en la mayoría de los casos la madre de familia es la titular de los beneficios que recibe y es sujeto de ciertos tratamientos. La información que reciben en las pláticas de salud y nutrición permiten que se concientice del autocuidado y de las prácticas que pueden afectar negativamente su salud, al mismo tiempo la coloca como el referente de los cuidados y alimentación familiares, circunstancia que incentiva su capacidad de tomar decisiones que inciden en el resto de la familia.

Los titulares de las Secretarías de Desarrollo Social (SEDESOL), Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Secretaría de Salud (SS), Secretaría de Educación Pública (SEP) y el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) integran el consejo nacional del Programa Oportunidades y son el máximo órgano deliberativo y de dirección del programa. Estas dependencias son integrantes del poder ejecutivo.

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Fuente: Elaboración propia

3.- El programa Oportunidades y la Nueva Gestión Pública

Este programa que nace con el nombre de Progresa, ideado