El experimento chileno en la educacion

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El único fin al parecer del sistema educacional es ser consumidores obedientes, productores de la rutina, se cambia el sujeto crítico y pensante, creador de conocimientos, ingenio y creatividad, reduciéndolo a solo un sujeto de mercado, un numero en una sociedad posmoderna confundida en el vacío de las no-ideologías, de las pertenencias supuestamente apolíticas, refugiadas en el materialismo del objeto, dejando de lado el desarrollo personal.

En análisis completo de sus características se comprueba que no hay interés de un desarrollo integral del individuo en al educación, no funciona el sentido constructivista del conocimiento, del valor de las múltiples inteligencias, solo se pone énfasis en el contenido académico reglado por el SIMCE.

Hemos desnudado los intereses detrás de este sistema, revelando que su forma se convierte más que nada en un mercado educativo, pero aun peor, ¿funciona verdaderamente como mercado educativo? Como un engranaje que ahorre la inversión y mejore la calidad del aprendizaje, la verdad no, en las pruebas se demuestra incluso lo contrario, solo existe mercado en el sentido del negocio, donde los establecimiento educacionales privados con fines de lucro han aumentado en desmedro de la disminución de los municipales, pero dejando de lado la situación económica y la eficacia, esta regla no ha permitido un avance general del aprendizaje (Cox; 2004; OCDE; 2004).

La P.A.A, una medición para entrar a la universidad, al parecer, al igual que el SIMCE importa a la clase baja, ya que en los establecimientos privados de elite saben que no la necesitan por su futuro en sus propias universidades, pero puede funcionar para que la clase dominante disfrute de las peleas infantiles, y competencias que se generan entre la propia clase explotada.

En resumen se determina la falacia teórica de un economicista llamado Milton Friedman de la escuela de chicago, que economista se transformó en supuesto experto educación donde impuso a través de la dictadura sin legitimidad democrática este sistema en base a la educación que forma sus futuros competidores, donde en los futuros gobiernos de la concertación se profundizo en vez de cambiarlo, en que dentro de la evidencia, se nota más mercado en la educación, más negocio y menos desarrollo de lo público.

Se llega al extremo que los padres prefieren ser elegidos por colegios privados, incluso poniendo un aporte compartido, no tanto por el interés de mejor educación, si no por con quien se mescla el hijo, que tipos de personas, por ende como vicio, empezó la cacería de imagen, influida por el simce como índice mercantil de calidad, donde se excluían a los alumnos menos competentes dejándolos en los municipales poco potenciados económicamente por el estado, donde se puso en práctica, la conocida frase “la educación es el examen”, que se impulsaba por las recompensas económicas.

En resumen se movió la rueda del negocio generando más de mil colegios privados en menos de una década regidos por la divinidad del SIMCE, dejando de lado la potencialidad creativa de las clases del profesor, solo regladas por los contenidos de las pruebas estandarizadas.

Concluyendo este análisis se puede ver que al parecer no se cumple lo que nos contaron, tal como en el sistema de pensiones, sistema de salud, el sistema educativo en la publicidad pintaba a la libre elección y un aprendizaje más autónomo, pero en la praxis queda en un fraude, que en la realidad solo está el interés de homogenizar para la productividad y ser capaces de hacer funcionar el engranaje productivista global, a veces si es necesario, eliminando las culturas predominantes en las zonas específicas, con una de las características más notorias, siendo la educación pública, casi llevada al olvido, desplazándose gran población de alumnos a lo privado, con casi 2/3 partes del presupuesto destinado a la subvención privada, con enfoque mercantil.

Este experimento único lo han asumido indolentemente los gobiernos de la concertación siendo que ellos lucharon para derrocar al dictador que impuso este sistema, donde las paradojas no se responden, los fraudes se comprenden.

Una de las soluciones serian la subvención focalizada, pero el problema radicaría en profundizar la perfección del sistema de elección, siendo la discriminación y no la inclusión lo que predomine, por lo tanto lo más factible, de forma gradual, seria eliminar la elección de alumnos en la educación municipal con subvención del estado, para que por lo menos se sea consecuente en el mercado educativo, promoviendo la libre elección y el mito de la igualdad de oportunidades.

Las soluciones son múltiples, nadie acá en este ensayo pretende darlas, solo se abre a la reflexión para que en debate político democrático se tome las riendas verdaderas de una educación que incluya a los sujetos sociales y no los use como meros instrumentos, usando información verdadera sin manipulación con objetivos de acabar con la desigualdad generada y así construir un país más democrático.

Alejandro Urrutia Barceló, Pedagogía en Matemáticas, Competencias Relacionales.