Panorama general: el estado en el mundo Antiguo

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Al mismo tiempo que los Gobiernos teocráticos o despóticos lograban un alto desarrollo cultural en el Oriente Próximo y la parte sur de Asia, otras civilizaciones comenzaron también a florecer en las costas del Mediterráneo –fenicios, griegos y romanos- principalmente hacia el año 1 000 a. C. A diferencia de las civilizaciones agrícolas, donde la agricultura fue el sustento básico, las del Mediterráneo tuvieron en el comercio marítimo la base de su poder económico y político. De hecho, en aquel escenario geográfico, fueron los comerciantes quienes gradualmente lograron apoderarse del mando político en sus respectivos territorios.

A continuación, te presentamos algunas de las primeras civilizaciones en las que surgieron formas estatales.

Civilización: Mesopotamia

Ubicación geográfica: en el actual Medio Oriente, en una franja fértil entre los ríos Tigris y Éufrates.

Periodo: entre los años 5 000 y 2 200 a. C.

Forma de Gobierno: militarista, donde el emperador reunía los poderes teocráticos y militares[pic 2]

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Civilización: Egipto

Ubicación geográfica: noroeste de África, valle del río Nilo.

Periodo: 3 150-31 a. C.

Forma de Gobierno: el faraón era la máxima autoridad, tenía un poder absoluto y era considerado una encarnación de la divinidad.

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Civilización: China

Ubicación geográfica: a orillas del río Huang-He (río Amarillo); se extendió hacia el Sur, más allá del río Yang Tsé-Kiang (río Azul), y al oeste, hasta la cordillera del Himalaya.

Periodo: 2 205 a. C.-1912 d. C.

Forma de Gobierno: monarquías dinásticas, donde el rey era el gobernante supremo.

Civilización: India

Ubicación geográfica: originaria del valle del Indo, actual Pakistán. Se desarrollaron alrededor de los ríos Indo y Ganges.

Periodo: 4 000 a. C.-siglo VI a. C.

Forma de Gobierno: los gobernantes tenían amplios poderes religiosos, políticos y administrativos; se pensaba que surgían del dios Brahma.[pic 5]

Civilización: Fenicia

Ubicación geográfica: franja central de Levante, al oriente del Mediterráneo, actual Líbano.

Periodo: 1 200-539 a. C.

Forma de Gobierno: ciudades-Estado dirigidas inicialmente por una monarquía que, con el tiempo, formó una asamblea dirigida por magistrados.[pic 6]

Justamente a partir de este marco, comenzaron a desarrollarse dos formas de Gobierno similares, donde el poder ya no recaía en una sola persona: la democracia, en Atenas, y la república, en Roma. Cada una, con sus peculiares características, representa parte del núcleo que da origen a la organización de nuestros actuales Gobiernos, pues a partir de entonces, nociones como democracia, asamblea, ciudadanía, república, senado, y muchas más, ingresaron al ámbito del pensamiento, organización y prácticas políticas. Te invitamos a conocer con mayor detalle algo más sobre la democracia ateniense y la República romana en los temas de profundización de esta misma unidad.

TEMAS DE PROFUNDIZACION

La democracia ateniense

El mayor legado de los griegos a la cultura occidental fue la concepción de que la razón es la vía para alcanzar el conocimiento, y que el hombre es un ser libre con capacidad racional y responsable de su propio desarrollo, ya que él crea su propio destino, aún en contra de los deseos de dioses, demonios o la naturaleza.

En el ámbito político, los griegos argumentaron que su vida social y de Gobierno debía organizarse con base en el principio de que las leyes se hacen por el espíritu de libertad de los ciudadanos, y no por voluntad divina o el poder absoluto de los reyes; sin embargo, esto no evitó que los habitantes continuaran rindiendo culto a las deidades y espíritus protectores, a fin de que fueran propicios a sus actos. Cada polis o ciudad-Estado tenía, incluso, un dios protector al cual se le rendía culto para evitar su cólera y lograr que los ayudara en todas sus actividades.

Otro elemento distintivo del legado político griego, en particular de Atenas, fue la instauración de la democracia como forma de Gobierno basada en la participación de todos los ciudadanos en los asuntos públicos, el respeto a la ley, a la justicia, a la igualdad y la libertad de los ciudadanos para elegir a sus gobernantes. Éste fue el resultado de un largo proceso político que tuvo su apogeo en el siglo V a. C., en estrecha relación con el desarrollo económico, social y cultural de la polis.

Surgimiento y características de la polis en la Grecia Antigua

Durante la época que abarca de los siglos XII al VIII a. C., los griegos de la Hélade vivían dispersos en aldeas organizadas en torno a lazos de parentesco y a un Gobierno monárquico, el cual fue desgastándose gradualmente a causa de las invasiones de los pueblos indoeuropeos y las transformaciones que dieron paso al surgimiento de las primeras ciudades-Estado en esa región alrededor del año 750 a. C. Este proceso comenzó a raíz del florecimiento de la industria y el comercio, el aumento de la producción y la riqueza, así como del número de pobladores, además de la generalización del uso del metal (el cobre y el bronce) en las actividades económicas y el renacimiento de la escritura. Las aldeas comenzaron a unificarse y a convertirse en ciudades-Estado, sobre todo en las tierras continentales, en las islas del Egeo y en las costas de Asia Menor, de tal manera que a mediados del siglo VI a. C. había alrededor de 1 500 ciudades, y sólo algunas comunidades se mantenían como pueblos y aldeas que carecían de centro urbano.

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Poleis griegas [ilustración].

Cabe mencionar que la fundación de polis más allá de las tierras continentales se debió a las condiciones que el propio proceso de urbanización generó: la escasez de tierras, la concentración del poder sobre