Principios del Derecho Internaiconal.

...

Al analizar el caso anteriormente descrito, quedan algunos interrogantes, por cuanto la Organización de las Naciones Unidas expone que ante litigios de Países deben buscar el resolverlos a través de vías diplomáticas o a través de terceros que puedan dirimir sus diferencias, buscando el bien común para los Pueblos. ¿Pero que sucede en el caso que se acepte de una u otra manera la intervención como por ejemplo una corte internacional en el conflicto y al final no se acepte su decisión por cuanto no favorece los intereses nacionales?, ¿Qué sucedería en el caso de aceptar una decisión de un tercero, pero el Pueblo involucrado, quien se va a ver afectado directamente no lo acepta? Y qué hacer con un País que busca afanosamente y en aras de su beneficio económico expandir sus fronteras, desconociendo vías diplomáticas, acuerdos, pactos y tratados.

Para entender un poco lo anterior, debemos regresarnos y entender que para solucionar un conflicto, lo principal es que debe haber el deseo imperativo de solucionarlo por ambas partes, que deben tener la disposición y el valor de asumir las decisiones tomadas.

A la luz de la reglamentación de la Organización de las Naciones Unidas, en la cual dispone que los Países en conflicto, deben buscar la forma de solucionar sus conflictos de una manera pacífica y para lo cual entrega varias herramientas, pero si observamos lo que ocurre en la práctica y a través de la historia quedan muchas incógnitas en la forma como se han solucionado los conflictos.

La solución o desenlace depende en gran medida del poderío de los países en conflicto, ejemplo de ello son los conflictos que se han suscitado entre países denominados Potencias Mundiales con países pequeños, como por ejemplo el caso de la Guerra de las Malvinas, hace treinta años, en los cuales La Gran Bretaña y La Republica de Argentina, se disputaban la soberanía de las Islas de Las Malvinas, éste conflicto fue resuelto a través de las armas en una guerra que dejo centenares de muertos, en donde el País más poderoso derroto al más pequeño. Un conflicto donde no dio fruto las herramientas entregadas por las Naciones Unidas en la resolución de conflictos.

Otro caso que se puede revisar, es el sucedido entre la República de Argentina y la Republica de Chile, el cual se conoce como el Conflicto del Beagle, que afectaba la soberanía de las Islas ubicadas dentro del canal del meridiano del Cabo de Hornos y gracias a la intermediación del Vaticano se logro que llegaran a un acuerdo y solución del conflicto.

Lo anterior toma sentido cuando el Doctor Velandia[1], concluye:

“Los acuerdos especiales como mecanismo alterno de soluciones de conflictos, no está encaminado a resolver en general el conflicto armado, sino un conflicto relativo al Derecho Internacional Humanitario”.

---------------------------------------------------------------