Y el conflicto que quiero aborda en esta ocasión es el que se ha venido presentando en la Plataforma municipal de juventudes de Cali

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Gracias a este conflicto la plataforma se unió más y se reforzaron los lazos de afecto, y se fortaleció la autonomía de este escenario que ahora mira formas diferentes de avanzar en pro de la juventud sin depender tanto de la administración municipal. Para explicar este suceso podemos basarnos en la teoría de Simmel que nos dice que el conflicto es una forma de socialización necesaria en relaciones humanas, un factor integrador sin el que las sociedades no subsistirían. En este sentido, para que este escenario juvenil se articule de modo armónico, son indispensables las discusiones internas y el conflicto. Pues en gran medida, la formación de grupos sociales se debe a la unificación en torno a un enemigo común, conforme a la hostilidad compartida por unos hacia otros. Que en este caso sería la alcaldía debido a la inconformidad en el manejo que se le ha dado a los procesos juveniles de la ciudad.

Desde la perspectiva de Coser podemos ver que muy probablemente la causa de que en el conflicto interno no haya sido integrador sino disfuncional haciendo que muchos se hayan retirado de la plataforma obedece a que no se contaron con los medios para evacuar efectivamente la hostilidad de unos a otros, y para expresar su disentimiento, por lo que los miembros del grupo pueden sentirse completamente abrumados y reaccionar con la separación o apartamiento como ocurrio

que no necesariamente el conflicto va acompañado de agresividad u hostilidad como en esta segunda parte; de esta manera los contendientes plataforma y alcaldía pueden discutir objetivamente las demandas divergentes que se manifiestan en el conflicto siendo más fácil llegar a acuerdos negociados que cuando los negociadores se dejan llevar por el conflicto.